Colectivos feministas señalaron que el caso Debanhi Escobar exhibió la ineficacia de la Fiscalía

El dolor de vivir en un México feminicida volvió a avivarse la tarde del pasado lunes 18 de julio luego de que la Fiscalía General del Estado de Nuevo León (FGE) diera a conocer los resultados de la tercera autopsia realizada al cuerpo de la joven Debanhi Escobar Bazaldua, quien fue encontrada sin vida el pasado 21 de abril

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La Fiscalía General del Estado de Nuevo León (FGE) expuso el pasado lunes los resultados de la tercera autopsia realizada al cuerpo de Debanhi Escobar (Foto: REUTERS/Daniel Becerril)
La Fiscalía General del Estado de Nuevo León (FGE) expuso el pasado lunes los resultados de la tercera autopsia realizada al cuerpo de Debanhi Escobar (Foto: REUTERS/Daniel Becerril)

Han pasado tres meses desde que Mario Escobar y Dolores Bazaldua vieron con vida por última vez a su hija Debanhi Susana; el trágico desenlace de la joven de 18 años estudiante de derecho conmocionó al país entero no solo por la viralización y auge que tuvo el caso en redes sociales sino porque -involuntariamente- expuso la terrible realidad de un México feminicida, en donde la violencia e impunidad continúan mientras que el actuar de instituciones y autoridades resulta insuficiente para garantizar la seguridad de las mujeres y el acceso oportuno a la justicia.

Pese a que la violencia de género ha permeado cada rincón de la República Mexicana, fue el estado de Nuevo León el escenario en donde se desarrolló la historia de Debanhi Escobar. Una fotografía de la joven parada en una de las carreteras más peligrosas del país en medio de la noche fue el parteaguas para que se desatara todo el caso que, hasta la fecha, no ha encontrado un desenlace digno.

Por el contrario, los padres de Debanhi Escobar continúan sin saber la verdad acerca de lo que pasó aquella noche que su hija desapareció, y la Fiscalía General de Justicia del Estado de Nuevo León (FGE) así como las múltiples dependencias gubernamentales involucradas han desempeñado un papel deficiente, situación que se evidenció con la tercera autopsia realizada al cuerpo de la joven y cuyos resultados fueron presentados el pasado lunes 18 de julio.

Los precedentes de una búsqueda por la justicia

Debanhi Escobar desapareció la madrugada del 9 de abril de 2022 (Foto: Instagram/@debanhi.escobar)
Debanhi Escobar desapareció la madrugada del 9 de abril de 2022 (Foto: Instagram/@debanhi.escobar)

La noche del viernes 8 de abril, Debanhi Escobar salió de su domicilio junto a dos de sus amigas para asistir a una fiesta en el municipio de Escobedo, Nuevo León, aunque se han difundido múltiples videos sobre lo que acontenció aquella madrugada, los motivos por los cuales la joven de 18 años terminó en medio de la carretera sola y de madrugada continúan siendo un misterio tanto para autoridades como para sus propios familiares.

El único rastro que quedó de la joven estudiante de derecho fue una fotografía que el chofer de una aplicación móvil -contactado por sus amigas para llevarla a casa- tomó entre las 4:00 y 5:00 horas de la madrugada del 9 de abril para deslindar responsabilidade sobre la presunta decisión que Debanhi tomó de descender del vehículo.

Fue cuestión de horas para que la fotografía de la joven apareciera en un boletín de búsqueda, mismo que fue volanteado, difundido en redes sociales y pegado en las calles del municipio de Escobedo y aledaños en el estado de Nuevo León. La incansable búsqueda y el pesar de la incertidumbre se mantuvieron durante 12 días, mismos en los que tanto colectivos feministas como familiares y amigos de Debanhi desplegaron tareas de búsqueda, cateos en el Motel Nueva Castilla -en donde una cámara de seguridad había captado su ingreso la noche en la que desapareció-, binomios caninos, drones y múltiples operativos para encontrarla.

La noche del 21 de abril, la esperanza del volver a ver a Debanhi Escobar con vida se esfumó con la noticia de que un cadáver había sido hallado en una de las cisternas del Motel Nueva Castilla, el mismo sitio que ya había sido cateado en al menos dos ocasiones previo a la aparición del cuerpo. Tanto la Fiscalía General del Estado de Nuevo León (FGE) como los padres de la joven confirmaron su fallecimiento.

Lluvia de inconsistencias e hipótesis contradictorias

El cuerpo de Debanhi Escobar fue exhumado el pasado 30 de junio (Fotos: Cuartoscuro: Alejandro Rodríguez / Facebook: DebanhiEscobar)
El cuerpo de Debanhi Escobar fue exhumado el pasado 30 de junio (Fotos: Cuartoscuro: Alejandro Rodríguez / Facebook: DebanhiEscobar)

La tarde del pasado lunes, en conferencia de prensa el subsecretario de la Secretaría de Seguridad del Gobierno de México (SSPC), Ricardo Mejía Berdeja, y el fiscal general de Justicia de Nuevo León, Gustavo Adolfo Guerrero presentaron los resultados de la tercera autopsia realizada al cuerpo de Debanhi Escobar. Si bien dicho peritaje reveló que la causa de muerte de la joven de 18 años fue una asfixia por sofocación, los resultados de la exhumación supusieron un autogol tanto para funcionarios como para las dependencias gubernamentales encargadas de esclarecer el caso.

¿El motivo? Tras el hallazgo del cadáver de Debanhi Escobar, el fiscal general de Justicia de Nuevo León, Gustavo Adolfo Guerrero, sostuvo la hipótesis de que la joven había caído accidentalmente en una de las cisternas del Motel Nueva Castilla y que había sido un fuerte golpe en la cabeza el causante de la muerte de la joven de 18 años.

Cabe mencionar que a unos cuantos centímetros del cuerpo de la joven de estudiante de derecho se encontraron sus pertenencias, entre las que destacan su bolso, llaves y tenis, mismos que no llevaba puestos al momento de presuntamente haber caído en la cisterna. Ese peculiar detalle sumado al hecho de que en México al menos 10 mujeres son asesinadas diariamente por motivos de género, hicieron que tanto la opinión pública como los padres de Debanhi Escobar desecharan tajantemente la primera versión de la muerte de su hija sostenida por la Fiscalía General del Estado de Nuevo León (FGE).

Por ello, Mario Escobar, padre de Debanhi, solicitó una segunda opinión acerca del fallecimiento de su hija, por lo que contrató servicios de peritaje privado que expusieron que el cuerpo presentaba signos de una relación sexual violenta y que, efectivamente, se trataba de un homicidio y no de un accidente como lo habían manejado autoridades del estado.

Las lagunas en el caso e inconsistencias, cada vez apuntaban más a que la historia de Debanhi Escobar se sumaría a la gran lista de casos de impunidad y feminicidios del país, no obstante, a diferencia de muchos otros, la mediatización y atención que la ciudadanía prestó a dicho acontecimiento creó una barrera de protección ante el posible carpetazo que autoridades suelen dar a este tipo de delitos. La presión social alcanzó tanto a la Fiscalía General del Estado (FGE) como al gobernador Samuel García e incluso al mismo presidente Andrés Manuel López Obrador.

La exigencia de justicia orilló a las autoridades de Nuevo León a solicitar la exhumación del cuerpo de Debanhi Escobar para practicarle una tercera autopsia, misma que, aunque brindó un avance en las investigaciones, evidenció la falta de capacitación, negligencia e ineficacia de las autoridades.

La nueva versión de los hechos y la opinión pública

Aún no han identificado a ningún responsable por la muerte de Debanhi Escobar (Foto: Infobae México)
Aún no han identificado a ningún responsable por la muerte de Debanhi Escobar (Foto: Infobae México)

Tres meses y tres autopsias le tomó a la Fiscalía General del Estado de Nuevo León (FGE) reconocer que la muerte de Debanhi Escobar no fue accidental y, pese a que presuntamente están siguiendo una línea de investigación por caso de feminicidio, dicho término no fue utilizado en la conferencia de prensa del pasado lunes en donde determinaron que la causa del deceso de la joven fue asfixia por sofocación.

Adicionalmente el informe de las autoridades señaló que al momento del hallazgo del cuerpo, habían transcurrido de tres a cinco días desde que la joven había fallecido. Asimismo, no encontraron evidencia que pudiera sustentar violencia sexual y se descartó por completo la asfixia por sumersión.

Colectivos feministas se han pronunciado en redes sociales para criticar tajantemente el actuar de las autoridades pues, si bien dichos resultados suponen un avance en las indagatorias aún no hay un culpable identificado y mucho menos detenido. Del mismo modo, expertos forenses hicieron especial hincapié en recordar que “la asfixia por sofocación en su modalidad de obstrucción de orificios respiratorios, no determina fehacientemente que el tipo de muerte sea homicida” pese a que Mario Escobar, padre de la jovén aseguró que se trató de un feminicidio.

Respecto a los días que llevaba Debanhi Escobar muerta al momento del hallazgo en su cuerpo, asosiaciones civiles y activistas denunciaron que la tarea de búsqueda de la Fiscalía General del Estado de Nuevo León (FGE) fue ineficiente e indignante pues la joven de 18 años pasó entre 7 u 8 días aún con vida a partir del día de su desaparición.

Se desconoce si fue privada de su libertad y los motivos por los cuales la mantuvieron incomunicada en ese periodo de tiempo pues, al no haber ningún tipo de comunicación de terceros o solicitud de rescate se descartó por completo que se haya tratado de un secuestro, de igual forma, de acuerdo con lo expuesto por autoridades, el cuerpo de Debanhi Escobar no presentaba signos de violencia sexual.

Debanhi Escobar fue asesinada y su cuerpo sembrado en la cisterna del Motel Nueva Castilla, la hipótesis del señor Mario Escobar y de miles de personas que están cansadas de vivir en un país impune y feminicida la sustentan. Ahora es tarea de la Fiscalía General del Estado de Nuevo León (FGE) reparar el daño y limpiar no solo la memoria de la joven de 18 años sino la propia imagen de una dependencia que le ha fallado en múltiples ocasiones a las mujeres que día con día desaparecen en la demarcación.

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