“Star Wars Jedi: Fallen Order”: el mejor juego para sentirte un caballero de la Fuerza

Análisis del lanzamiento más importante de noviembre y uno de los más trascendentes del año por mecánicas de combate y exploración.

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No es un secreto: el mítico sable láser característico de la serie ideada por George Lucas es un clarísimo objeto de deseo de aquellos que se dejaron seducir por los encantos de Star Wars. Sin importar si tu primera película fue Episodio IV o VII, todos soñamos en algún momento con blandir esa luminosa espada, haciendo gala de movimientos imposibles. En este sentido, Star Wars Jedi: Fallen Order es sin dudas lo más cercano que podemos tener a experimentar el poder de la Fuerza en nuestras manos. Y del sable láser también, claro está.

El combate en esta nueva obra de EA desarrollado por Respawn Entertainment (Titanfall, Apex Legends) toma varias páginas de los juegos de From Software y las licúa con los ingredientes característicos del universo de Star Wars, sumando así a su metódico esgrima los poderes de la Fuerza, que nos permiten convertirnos en una efectiva máquina contra las tropas imperiales. En las dificultades más elevadas es donde brilla, pero en sus cuatro niveles de dificultad posibles hay algo para todos los gustos: para aquellos que buscan un enorme desafío o quienes simplemente están ahí para divertirse y disfrutar del relato que nos plantea.

Sucede que, casi como convertirse en un Jedi, empezamos el periplo con una serie de movimientos básicos y limitados, pero conforme mejoramos nuestro nivel y avanzamos en la aventura, terminaremos convirtiéndonos en un guerrero que poco tiene que envidiarle al mismísimo Luke Skywalker. Los sistemas de combate son muchos y dominarlos encierra un nivel de profundidad imposible de negar; pero su accesibilidad es tal que cualquiera puede llegar a disfrutarlo con algo de práctica, y la recompensa será enorme: pocos juegos poseen una curva tan disfrutable.

Pero su maravilloso combate no es lo único que nos convoca a la ventura, porque Star Wars Jedi: Fallen Order tiene mucho más para ofrecer. Ubicado entre Episodio III y Episodio IV, conoceremos qué es lo que sucede cuando Palpatine ejecuta la famosa “Orden 66”, mediante la cual, el Imperio aniquila sistemáticamente a todos los caballeros Jedi de la galaxia. Los pocos sobrevivientes prevalecen ocultos en el exilio o anonimato, como es el caso de Cal Kestis -el protagonista-: un joven aprendiz o “padawan” que se ve obligado a usar la fuerza para salvar la vida de un viejo amigo.

Al exponerse de este modo, el Imperio lo persigue implacablemente a lo largo de una secuencia introductoria memorable que sienta las bases de la aventura que nos espera: nuestra misión será, ni más ni menos que restaurar el balance de la contienda al devolverle el poder a la Orden Jedi, mientras que en el camino el propio Cal se consagrará como uno de sus miembros más importantes. Esto se traduce en una auténtica travesía interplanetaria, ya que a bordo de nuestra propia nave -con una tripulación cargada de personajes memorables, cada cual con sus propias historias y motivaciones- visitaremos un total de seis planetas distintos.

Cada uno de ellos tiene su propia flora, fauna y enemigos característicos, como también una enorme cantidad de sitios que explorar y secretos que develar. El combate tiene mucho de Dark Souls y Sekiro, pero cuando Star Wars Jedi: Fallen Order deja los duelos de lado, se convierte en un perfecto híbrido entre Tomb Raider, Uncharted e incluso clásicos como Metroid, puesto que si queremos descubrirlo todo, tendremos que ir y venir entre planetas una vez que hayamos aprendido ciertas habilidades o mejorado determinado equipamiento para visitar zonas antes inaccesibles. La razón principal para verlo todo no sólo tiene que ver con conocer más sobre el universo que se nos plantea, sino que también se traduce en experiencia: la cual podremos canjear por puntos de habilidad para nosotros o para BD-1, el encantador androide que nos acompañará en todo momento.

Así, cada planeta que visitamos alberga misiones principales y encargos secundarios; momentos de acción y exploración y sitios con combate adrenalínico, incluyendo peleas con jefes duros de roer. Bestias salvajes saldrán inesperadamente a nuestro encuentro, y el Imperio también lo hará, con los clásicos Stormtroopers armados o un tipo de soldado desconocido hasta el momento: los Purge Troopers, entrenados para plantarle cara a los Jedi, quienes ofrecerán los momentos más intensos en lo que a combate se refiere. De este modo, Star Wars Jedi: Fallen Order gana en frescura, ya que siempre estamos ocupados con algo por completo distinto.

Lo cual es verdaderamente loable y demuestra en gran medida la flexibilidad que tiene Respawn Entertainment como estudio: aunque su pedigrí lo emparenta con algunos de los shooters más influyentes de los últimos tiempos (Modern Warfare, Titanfall), se las ingeniaron para orquestar una obra que sintetiza elementos de juegos exitosos para dar forma al que sin dudas es el mejor título de Star Wars desde que Electronic Arts tiene la licencia de la serie, y uno de los mejores de la franquicia en mucho tiempo.

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Esto no quiere decir que sea perfecto ni mucho menos: Cal Kestis nunca termina de sobresalir como el héroe que el relato necesita, sino que por el contrario, el repertorio de personajes que lo rodea termina opacando su brillo ante la evidencia de un guión que no termina de favorecerlo. Así mismo, los problemas técnicos asoman en prácticamente todas las plataformas donde fue publicado: fallas gráficas, tiempos de carga eternos y más, que ni siquiera fueron resueltos con el parche del día de lanzamiento.

Aunque evidentes, los problemas que tiene el título de Respawn Entertainment no opacan el brillo que es capaz de generar: tiene algo para decir, en el contexto de una jugabilidad que ejecuta a la perfección ideas tomadas de los grandes exponentes del videojuego, con la capacidad de entretener de principio a fin. Más importante aún: se siente como una pieza genuina dentro del vasto universo de Star Wars incluyendo cómics, series y películas. De hecho, con The Mandalorian (primera serie live action de la franquicia) y el inminente estreno de Star Wars: El Ascenso de Skywalker, la franquicia de Disney está atravesando uno de sus mejores momentos, y Star Wars Jedi Fallen Order afirma este concepto. Porque no sólo enriquece la mitología de la saga, sino que también es una aventura divertida, espectacular y muy generosa, que no deberían dejar pasar.

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