Detuvieron a un policía por un brutal travesticidio en Mendoza: la víctima fue acribillada de seis balazos

El crimen ocurrió hace tres semanas en Guaymallén. Luego del análisis de cámaras de seguridad y la declaración de testigos, la Justicia detuvo a Darío Jesús Chaves Rubio, un efectivo de la fuerza provincial

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Melody Barrera, la víctima y Darío Jesús Chaves Rubio, el sospechoso
Melody Barrera, la víctima y Darío Jesús Chaves Rubio, el sospechoso

En la madrugada del 29 de agosto pasado, Melody Barreras, una mujer trans de la localidad mendocina de Guaymallén, fue asesinada de manera brutal. Según la investigación, mientras la joven ofrecía servicios sexuales un hombre la mató de seis balazos desde un auto y luego escapó. A casi tres semanas del violento crimen, el Ministerio Público Fiscal provincial, luego del análisis de cámaras de seguridad de la zona y del testimonio de algunos testigos, requirió la detención del posible asesino: se trata de Darío Jesús Chaves Rubio (31), auxiliar principal de la Comisaría 34 del barrio Bancario de Godoy Cruz, quien a partir de ahora deberá enfrentar una acusación grave.

La fiscal de Instrucción Carolina Lazo, de la Unidad Fiscal de Homicidios de Mendoza, lo imputó por el delito de homicidio agravado por el odio a la expresión de género en concurso ideal con homicidio agravado por el uso de arma de fuego, y en concurso real por violación de cuarentena. Esta fuerte acusación sitúa al efectivo ante la posibilidad de una condena a prisión perpetua.

Por ahora, el hombre no declaró.

De acuerdo con el diario Los Andes, la fuga del asesino quedó registrada en las cámaras de seguridad y los investigadores de Homicidios tenían el dato de que el auto era un Volkswagen Bora de color gris. Chaves Rubio tiene un vehículo similar.

Para la detención del sospechoso fue clave declaración de un testigo que aseguró haberse cruzado con él antes del hecho y que le manifestó que iba a buscar un arma y a cagar a tiros al travestipor una discusión previa, un claro discurso de odio de género. Sobre esta pista la fiscal trata de profundizar para determinar por qué se pelearon víctima y victimario.

En la declaración, el testigo describió a un hombre con características físicas que coinciden con las del acusado y además aportó detalles que coinciden entre el coche en el que se fugó el asesino y el del uniformado. Pero no es lo único. También hay llamadas telefónicas que lo ubican al efectivo en el momento y lugar del crimen. Chaves fue detenido durante el mediodía del jueves en la dependencia donde se desempeña.

Tras la detención, la fiscal Lazo ordenó otros dos procedimientos. El primero fue en la comisaría donde trabajaba el ahora acusado. Allí le incautaron un teléfono celular y su pistola reglamentaria calibre 9 milímetros. El arma será analizada con el fin de establecer si fue la que mató a Melody, ya que los peritajes establecieron que la víctima fue atacada con balas de ese calibre.

El otro operativo se llevó a cabo en la casa del uniformado. En la vivienda, ubicada en calle 25 de Mayo al 1700 de la capital provincial, los investigadores se llevaron otro celular, un pantalón de jean y un buzo de color gris con capucha.

En el operativo intervinieron los canes de la fuerza de seguridad, quienes olfatearon todo el inmueble. De acuerdo con el diario mendocino, Chaves no tenía antecedentes y su conducta era buena dentro de la Fuerza. En paralelo a su situación procesal, la Inspección General de Seguridad abrirá un sumario interno que, en caso de ser condenado por la Justicia, derivará en su exoneración.

Si sufrís o conocés a alguien que sufre violencia de género podés llamar a la línea 144 las 24 horas.

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