Running sin control: advierten sobre los riesgos para el corazón de volver a correr después de casi 3 meses de cuarentena

Desde el lunes, en la Ciudad de Buenos Aires se puede hacer ejercicio físico entre las 20 horas y las 8 de la mañana. Las actividades permitidas comprenden caminar, correr, andar en bicicleta, circular en rollers y otras rutinas similares, no más de 2 personas, con un distanciamiento mínimo de 2 metros entre cada uno y el uso del tapabocas no es de uso obligatorio mientras se lleva adelante el entrenamiento.

Teniendo en cuenta que los porteños -y en definitiva los argentinos- cumplen más de 80 días de aislamiento social, preventivo y obligatorio, el que comenzó a regir el viernes 20 de marzo, la necesidad de poder retomar el running fue uno de los pedidos que más resonó en los oídos del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, motivo por el cual asesorado por su equipo de expertos decidió permitir esta actividad con ciertos recaudos.

Esta decisión fue celebrada por los deportistas y amantes de este ejercicio al cual definen como un “cable a tierra”, pero a su vez despertó la preocupación en los expertos en entrenamiento y los profesionales de la salud.

Daniel Tangona, entrenador personal profesional, certificado por la Universidad de Miami y especialista en Liderazgo y Desarrollo Personal por la Universidad del Salvador, alertó sobre el riesgo para la salud que podría implicar la decisión de realizar actividad física después de 80 días de sedentarismo sin controles médicos.

En diálogo con Infobae manifestó: “Lo que digo es que entendamos que hace 80 días somos todos sedentarios, los deportistas de élite, los de alta competencia, doña Rosa y don Juan, mi recomendación es que todos los que hoy piensan salir a correr no lo hagan, pero sí salgan a caminar, porque el corazón, que es un músculo, está fuera de servicio hace 80 días”.

“Si un bicep o una pierna se desgarran se puede curar, puede pasar que en el músculo cardíaco tengamos un evento más peligroso, lo cual no es lo mismo, es mucho más grave. Considerando que la gente es inteligente, lo primero que va a hacer es volver a hacerse los chequeos médicos, es lo que corresponde a esta altura del año”, agregó.

¿Por qué es importante esto? “Está todo ordenado y organizado en los centros médicos, con turnos y horarios, con las previsiones y recaudos necesarios contra el COVID-19, si no te hacés los chequeos es porque no tenés ganas, no porque no puedas”, manifestó Tangona, quien es autor de dos libros: “Un camino sin excusas: fitness holístico” y “Las excusas engordan”.

“Hay varios atletas, futbolistas profesionales, al menos 5 casos de desgarros, todos desgarrados, que volvieron y estamos hablando de deportistas preparados, imaginémonos una persona común que hoy decida volver a correr con todo el estrés que tiene: físico, psíquico, anímico, económico, con un vacío espiritual muy fuerte”, puntualizó, y recomendó: “Debemos empezar con calma, calmarnos, no es el fin del mundo, se puede empezar de nuevo, pero con las precauciones del caso, fundamental tener sí o sí tener un apto físico para volver paulatinamente, progresivamente con una adaptación mínima de un mes para volver a hacer ejercicio físico, aunque se que la gente va a salir loca a las calles, pero debe ser con todos los cuidados”.

¿Qué sucede con el frío? “La gente ha salido siempre a correr a la mañana, a la tarde y a la noche, y a primera hora hay personas que salen a trotar 5:30, 6 de la mañana hace millones de años. Por el horario puede haber un poco más de frío, pero no tendría porque ser un factor agravante el frío. Te tenés que tapar las manos, la cabeza, pero si vos no te tapás nariz y boca cuando corrés, el frío entra por ahí. Acá viene el tema de los barbijos. Cuándo nos poníamos un pañuelo o un barbijo protector cuando se va a esquiar, ahora hay quienes hacen todo un lío por su uso (del barbijo o tapaboca) pero toda la vida se usó para que el frío no entre por nariz y boca”, señaló el personal trainer.

“Hay una realidad, todos respiramos oxígeno y cuando soltamos el aire largamos el dióxido qué es el veneno, no se puede estar con el barbijo todo el tiempo porque estaríamos inhalando nuestro propio veneno todo el tiempo”, agregó.

“Ahora con el virus hay que tener cuidado y estar alejado de la gente, y con el barbijo hay que tener cuidado por la demanda de oxígeno no tener mareo, taquicardia, náuseas, vómitos, que uno no sienta que le baje la presión, no hacer un mundo de esto, sino salir a hacer deporte con las previsiones del caso con inteligencia”, reflexionó Tangona.

Para el entrenador de los famosos, hay otro problema en el sedentarismo por los días de cuarentena además de los kilos ganados: “los coágulos, si te queda un coágulo por estar todo el día acostado o sentado mirando la tele, un coágulo puede ir al cerebro o al corazón, tenemos que tener mucho cuidado con la hipertensión arterial, que es la muerte silenciosa, hay que cuidar los esfuerzos, el exceso de peso, y no salir a correr sin los debidos controles médicos correspondientes con todos estos ingredientes ganados durante el aislamiento".

Según el experto, “es necesario contar con un certificado de aptitud física antes de entrenar, ya que cuando entrenás tenés muchas más posibilidades de tener un evento cardíaco que al estar sentado, porque se está sacando al corazón fuera de lugar, fuera de su zona de confort, por esto es fundamental un pequeño chequeo, análisis de sangre, un pequeño estrés, un ecocardiograma básico y después salir con mucha tranquilidad, habituar al corazón al esfuerzo al cual se lo quiere preparar paulatinamente, la salud está en juego en todo aspecto”.

Este martes por la noche, en el segundo día de habilitación, un hombre de 58 años que había salido a correr fue hallado muerto en una plaza del barrio porteño de La Paternal. El hijo de la víctima, de 24 años, señaló que su padre no tenía antecedentes cardíacos y que salía a correr “de vez en cuando”, pero que con la cuarentena obligatoria por la pandemia de coronavirus tuvo que dejar de hacerlo.

“Los deportistas, por más que estén muy entrenados, cuando vuelven a sus entrenamientos tienen que hacer algo muy tranquilo. Poner otra vez el cuerpo humano, la maquinaria, en marcha”, alertó Alberto Crescenti, titular del SAME, sobre el regreso a la actividad física.

En este sentido, Crescenti puso como ejemplo a “los jugadores de fútbol, que cuando vuelven también “hacen ejercicios más bien recreativos para tomar fuerza muscular y recuperar la capacidad respiratoria”.

"Si uno entra a correr de golpe y bombea sangre al corazón de forma intempestiva, hasta que se acomoda otra vez el mecanismo, esto puede llevar el corazón a un esfuerzo máximo y ocasionar un infarto o una muerte súbita”, advirtió.

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