Cena saludable por Año Nuevo: este es el tipo de alimentación que recomienda el Minsa

A puertas del Año Nuevo, el Minsa recomienda evitar los excesos típicos de la celebración y propone opciones saludables que combinan sabor, equilibrio y tradición en la mesa familiar

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El Minsa sugiere que la
El Minsa sugiere que la mitad del plato de Año Nuevo esté compuesto por verduras y recomienda evitar bebidas azucaradas y postres industrializados. - Minsa

El Ministerio de Salud (Minsa) exhorta a la población a recibir el Año Nuevo con una cena festiva que no solo sea sabrosa, sino que también aporte beneficios a la salud. Frente a la tendencia de excesos en estas fechas, la institución enfatiza la importancia de mantener un equilibrio alimenticio y evitar prácticas que puedan afectar el bienestar de las familias.

La clave está en la composición del plato

La nutricionista Lily Sandoval Cervantes, de la Dirección de Promoción de la Salud del Minsa, explicó que la base de una cena saludable radica en la proporción y variedad de los alimentos que se sirven. Según Sandoval, el plato ideal debe estar integrado en su mitad por verduras, frescas o cocidas, sazonadas con aliños ligeros como aceite de oliva, limón, vinagre de manzana o yogurt natural. Estos ingredientes, ricos en fibra y nutrientes, favorecen la digestión y aportan equilibrio a la comida.

La especialista detalló que una cuarta parte del plato debe contener proteínas bajas en grasa, entre las que destacan el pollo, la pavita, el pescado, el cerdo o el cuy. En tanto, el otro cuarto debe incluir cereales como quinua, trigo o arroz, o tubérculos como papa, camote, yuca y plátano bellaco, preferentemente sancochados u horneados.

Consumir panetón y chocolate caliente
Consumir panetón y chocolate caliente en exceso puede aportar grandes cantidades de azúcar; lo ideal es reservarlos para el desayuno y optar por frutas frescas en la cena. - Minsa

Bebidas naturales, la mejor opción

En relación con las bebidas, el Minsa recomienda elegir refrescos naturales bajos en azúcar para acompañar la cena de Año Nuevo. Entre las alternativas saludables se encuentran la chicha morada, limonada, naranjada, maracuyá, carambola, camu camu, agua de manzana o de piña. Sandoval advirtió sobre el consumo de bebidas gasificadas y néctares industrializados, ya que suelen contener cantidades elevadas de azúcar, lo que puede resultar perjudicial para la salud.

Moderación con postres y productos típicos

Durante las celebraciones, muchas familias acostumbran a incluir en la mesa panetón, chocolate caliente y postres en una sola comida. El Minsa sugiere reservar el panetón y el chocolate para el desayuno del día siguiente, dado su alto aporte calórico. La nutricionista puntualizó la importancia de consumir una porción pequeña de panetón, sin mantequilla ni mermelada, ya que estos agregados incrementan de manera significativa las calorías. Sandoval recordó que una porción de panetón puede contener hasta 18 cucharaditas de azúcar, cantidad equivalente a cinco panes, cifra que aumenta si se acompaña con otros productos.

El Seguro Social de Salud
El Seguro Social de Salud advierte que la tradicional cena navideña puede superar las 2.000 calorías, duplicando la necesidad diaria y generando riesgos para la salud. - EsSalud

Acerca de los postres, la especialista señaló que el consumo habitual de duraznos enlatados no es recomendable debido a su alto contenido de azúcar y señaló que una ensalada de frutas frescas es una alternativa más saludable, además de contribuir a la digestión.

Sabor y salud pueden ir de la mano

El Minsa recalca que disfrutar de una cena saludable en Año Nuevo no implica renunciar al sabor, sino encontrar el balance adecuado en cada preparación. Se aconseja servir la cena con suficiente anticipación, entre tres y cuatro horas antes de acostarse, para permitir una digestión adecuada. Además, se recomienda evitar productos procesados y ultraprocesados, optando por ingredientes frescos y naturales.

En esta celebración, optar por una alimentación balanceada permitirá a las familias recibir el nuevo año con energía y bienestar, sin excesos ni consecuencias para su salud.