Semana financiera: se profundizó el declive de los dólares paralelos que ahora convergen con el “solidario”

El dólar libre cerró a $150, su valor mínimo desde el 10 de noviembre, mientras que el contado con liqui cayó a $145, con un dólar en bancos a $144. Mejoraron las acciones, pero el riesgo país siguió sobre 1.400 puntos

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El dólar libre perdió un 23% desde el récord de finales de octubre. (Foto: Franco Fafasuli)
El dólar libre perdió un 23% desde el récord de finales de octubre. (Foto: Franco Fafasuli)

Esta semana confirmó el sostenido nivel de las acciones argentinas, que medidas en dólares defendieron sus mejores precios desde agosto, mientras que los dólares operados por fuera del “cepo” siguieron debilitándose, al punto de cotizar al mismo nivel que el dólar para para ahorro que se vende con cupo mensual de USD 200 en bancos.

El dólar blue cedió en la semana cinco pesos o 3,2%, a $150 para la venta. La divisa marginal se pactó en su valor más bajo desde el pasado 10 de noviembre. Conserva una apreciación de 99,3% en lo que va de 2020, aunque la brecha cambiaria con el oficial mayorista -que rozó el 150% el 23 de octubre-, ahora alcanza el 83,7 por ciento.

En el circuito oficial, el dólar mayorista concluyó a $81,65, para acumular un ascenso de 36,3% en 2020. La brecha entre la cotización libre del dólar y el tipo de cambio mayorista es ahora la más baja desde el 15 de septiembre, casi tres meses atrás. Y desde el récord del dólar blue -$195, el 23 de octubre- la divisa marginal restó 45 pesos o un 23 por ciento.

Las paridades bursátiles del contado con liquidación y el dólar MEP quedaron en 145,05 y 142,05 pesos, respectivamente, próximas a los precios más bajos desde el 25 de septiembre. Así, los dólares bursátiles convergieron con el dólar para atesoramiento, que en bancos promedió los $143,83 para la venta.

El dólar blue retrocedió en once de las últimas doce ruedas operativas

Este fenómeno se había dado en enero, con la aplicación del Impuesto Para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS) para la demanda de divisas por parte de individuos en el mercado de cambios, y también a mediados de septiembre, inmediatamente después de establecida la percepción de 35% para las mismas operaciones, como adelanto del Impuesto a las Ganancias.

De todos modos la calma cambiaria del presente no implica un escenario distendido a futuro. Para los analistas del Grupo SBS, “la inflación seguiría muy alta en los próximos meses y la clave para evitar un sendero disruptivo parece estar en lograr un acuerdo favorable con el FMI y presentar señales de consolidación fiscal y monetaria que puedan moderar el financiamiento con emisión de manera sostenible”.

En un reporte, Balanz Capital coincidió en que “cuesta encontrar un catalizador para ver un cambio importante en las expectativas. La evolución de la inflación y las reservas van a marcar el camino del Gobierno, ya que su aceleración o una continuación en su caída lo obligarían a volver a tomar medidas para reducir la brecha, ya sea a través de regulación o usando política monetaria”, con un incremento de las tasas, mayor devaluación o ambas a la vez.

En la semana la cotización del dólar libre cayó 3,2%, a $150, y la brecha cambiaria retrocedió al nivel más bajo en casi tres meses

El récord del dólar libre en octubre fue un disparador para las órdenes de compra de acciones argentinas, que coincidió con un período de importantes mejoras en los índices bursátiles internacionales.

Desde que los dólares alternativos al cepo alcanzaron precios récord a fines de octubre ($195 para el dólar blue el día 23, y $181 para el contado con liquidación el 22), se produjo un arbitraje desde posturas líquidas en dólares a apuestas por acciones.

Las cotizaciones de los dólares libres cedieron desde entonces un 23% en un mes y medio, mientras que los títulos privados en moneda dura ganaron en promedio un 24%, según las valuaciones de los ADR en Wall Street y el S&P Merval medido en dólares, que regresaron al nivel del 14 de agosto pasado.

En la Bolsa porteña, los activos bursátiles mostraron altibajos, pero con un índice Merval siempre cerca de los 56.114 puntos, el récord en pesos anotado el pasado 4 de agosto, en un mercado que continuó atento a las nuevas conversaciones con el FMI y aliviado por la financiación que obtuvo el Gobierno con la primera subasta mensual de títulos a corto plazo.

El panel líder S&P Merval de ByMA (Bolsas y Mercados Argentinos) subió un magro 0,6% en pesos en la semana, y un 1,7% promedio en dólares. En cuanto a la evolución de los ADR que se negocian en las bolsas de Nueva York, hubo alzas muy significativas en el acumulado de cinco ruedas para Corporación América (+35%), Tenaris (+7,5%), y Despegar (+7,4%).

En Wall Street, los bonos soberanos en dólares con ley extranjera anotaron una pérdida promedio de 3% en una semana en la que el riesgo país JP Morgan no cedió del elevado umbral de los 1.400 puntos básicos, para concluir en los 1.425 enteros para la Argentina.

Máximos históricos en Wall Street

El viernes, los principales índices de Wall Street volvieron a zona de récord, luego de que datos de empleo mostraron la generación de puestos de trabajo más lenta en seis meses, noticia que refuerza las expectativas sobre la pronta aprobación de un nuevo proyecto de ley de estímulo fiscal para ayudar a sacar a la economía estadounidense de su peor recesión en décadas.

La tasa de desempleo en Estados Unidos cedió dos décimas en noviembre, a 6,7%, lo que estuvo por debajo de las expectativas. Mientras, la creación de nuevos puestos de trabajo en dicho mes -nóminas no agrícolas- cerró en 245.000, lo que estuvo por debajo de las proyecciones de 469.000 empleos.

El Dow Jones de Wall Street avanzó 1% en la semana, para terminar en un récord histórico por encima de los 30.000 puntos

“Esta dinámica del mercado laboral refleja una ralentización en la recuperación económica ante la segunda ola de contagios por Covid-19 en Estados Unidos, con la tasa de crecimiento de empleo más baja desde el comienzo del rebote en mayo”, explicó un análisis de Puente.

En las últimas ruedas se reflejó que los inversores están a la espera de la aprobación de dicho plan de estímulos fiscales en Estados Unidos, que podría alcanzar unos 908.000 millones de dólares.

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