De los fetos humanos a la modificación del ADN: lo que López-Gatell ha dicho de los mitos sobre la vacuna contra COVID-19

El funcionario aseguró que dichas afirmaciones son “un completo disparate sin ningún fundamento científico”

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El funcionario aseguró que dichas afirmaciones son “un completo disparate sin ningún fundamento científico”

Durante el informe sobre el estado actual de la COVID-19, Hugo López-Gatell, Subsecretario de Prevención y Promoción a la Salud, explicó que “no había oído de una postura tan aberrante, tan anticientífica y un pronunciamiento tan lejano a la realidad”, refiriéndose a quienes afirman que la vacuna COVID-19 contiene restos de fetos humanos.

Esta información se viralizó en Facebook con la difusión de un video donde la narradora mostraba que la vacuna desarrollada por AstraZeneca y Oxford contenía tejido pulmonar de un feto varón abortado de 14 semanas, la grabación correspondía en realidad a la reacción que tienen las células cuando la vacuna es inyectada.

De acuerdo con la verificación de datos de Reuters, las células que se usan para investigación se han cultivado en laboratorios de todo el mundo desde que se obtuvieron en las décadas de 1960-1970.

Al respecto, el arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, catalogaba como una acción inhumana la no confirmada utilización de células de fetos abortados, mientras que el Vaticano veía “moralmente aceptables” vacunas pese al supuesto origen de las mismas, ya que no lo consideraba un incentivo para promover la legitimación del aborto.

El subsecretario de Salud de México, Hugo López-Gatell, muestra una dosis de la vacuna Pfizer / BioNtech COVID-19 en el Hospital General, mientras continúa el brote de la enfermedad por coronavirus (COVID-19), en la Ciudad de México, México, 24 de diciembre de 2020. REUTERS / Edgard Garrido
El subsecretario de Salud de México, Hugo López-Gatell, muestra una dosis de la vacuna Pfizer / BioNtech COVID-19 en el Hospital General, mientras continúa el brote de la enfermedad por coronavirus (COVID-19), en la Ciudad de México, México, 24 de diciembre de 2020. REUTERS / Edgard Garrido

Otro de los mitos que circulan en redes sociales y la opinión pública es que recibir la dosis de la vacuna contra la COVID-19 modificaría el ADN de la persona que la reciba, causando alteraciones en el funcionamiento del su organismo.

Durante una entrevista para la BBC, el profesor Jeffrey Almond de la Universidad de Oxford señaló que “el inyectar ARN a una persona no cambia nada del ADN de una célula humana”, pues la tecnología de ARN mensajero no se integra en la cadena genómica.

La tecnología del ARNm ya se había desarrollado desde hace décadas atrás contra enfermedades como el VIH, la gripe, la rabia y el zika, por eso es que los laboratorios como el de Pfizer-BioNTech comenzaron a trabajar en la vacuna a mediados del año pasado.

La molécula que utilizan este tipo de vacunas es una secuencia que se ha modificado para aumentar su estabilidad y facilitar que la célula sea capaz de leerla, traducirla y sintetizar la proteína viral que le permitirá defenderse del virus, en este caso, el SARS-CoV-2.

El primer ministro australiano, Scott Morrison (i) en una visita a los laboratorios de Astra Zeneca en Sidney, el pasado mes de agosto. EFE/EPA/Nick Moir / Archivo
El primer ministro australiano, Scott Morrison (i) en una visita a los laboratorios de Astra Zeneca en Sidney, el pasado mes de agosto. EFE/EPA/Nick Moir / Archivo

La desconfianza ante la efectividad de las vacunas es un tema recurrente, ya que personajes políticos como el ex presidente Felipe Calderón o la senadora Lilly Téllez han demostrado en diversas ocasiones su desconfianza ante la utilización de la vacuna rusa Sputnik-V.

El 11 de agosto de 2020, Hugo López Gatell dijo que la vacuna no se puede ni debe ser usada por razones éticas y de bioseguridad, ya que no había terminado los estudios de Fase 3 satisfactoriamente a esa fecha.

Sin embargo, la vacuna rusa Sputik V, que será aplicada a los adultos mayores, alcanzó el 91,4% de eficacia en el último punto de ensayos clínicos de la Fase III en diciembre de 2020 y el día de ayer, la revista británica The Lancet, que la eficacia del antígeno es del 91.6% según sus resultados.

Brindis de Gatell por la vacuna Rusa (Foto: Captura de pantalla)
Brindis de Gatell por la vacuna Rusa (Foto: Captura de pantalla)

La implementación de microchips dentro de las dosis de las vacunas fue también una información no confirmada que se hizo viral luego de que el empresario de Microsoft, Bill Gates explicara que a la larga la población estadounidense tendría certificados digitales con información sobre quien se ha recuperado, hecho la prueba y si ya fue vacunado contra el virus.

Al respecto, Bill Gates aseguró que quedó desconcertado por la cantidad “loca y malévola” de teorías conspirativas que se difundieron a través de las redes sociales, las cuáles incluían que tanto él como Anthony Stephen Fauci, un inmunólogo estadounidense, habían creado la pandemia para después intentar controlar a las personas a través de un microchip que sería insertado en la vacuna.

El pasado 22 de enero de este año, Bill Gates recibió su primera dosis de la vacuna, expresó sentirse bien y agradeció a los científicos, participantes de ensayos, reguladores y trabajadores de la salud de primera línea que habían hecho posible la aplicación.

Bill Gates también explicó que recibir la vacuna era una ventaja de tener 65 años
Bill Gates también explicó que recibir la vacuna era una ventaja de tener 65 años

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