La clave para sostener el ejercicio en diciembre y en meses de calor sin perder la motivación

Estrategias prácticas y apoyo social ayudan a sostener la actividad física durante la temporada de verano

Guardar
Mantener la motivación para el
Mantener la motivación para el ejercicio en diciembre requiere ajustar expectativas y priorizar la regularidad en la rutina (Imagen ilustrativa Infobae)

Mantener la motivación para entrenar en diciembre y durante los meses de calor representa un desafío considerable, ya que las agendas sociales, los viajes y las condiciones climáticas extremas alteran las rutinas habituales.

Según expertos citados por Grazia y Runner’s World, la clave para no abandonar el ejercicio en estas épocas radica en ajustar las expectativas, priorizar la regularidad y aplicar estrategias prácticas que permitan sostener el hábito sin que el entrenamiento se convierta en una carga.

Meses con desafíos: diciembre y la temporada de calor

Diciembre y los meses de calor presentan obstáculos particulares para quienes desean mantener el entrenamiento, ya que la combinación de actividades sociales, viajes y cambios de horarios puede interferir con la organización y la constancia, según Grazia y Runner’s World.

Paula Coms, instructora de Barre y Balletfit en Club Barre, subraya que estos meses “no son momentos para abandonar, sino para reafirmar tus prioridades”, y advierte que postergar el entrenamiento para otro momento del año con frecuencia lleva al abandono definitivo del hábito.

Mantenerse activo durante la temporada
Mantenerse activo durante la temporada de calor ayuda a estructurar los días y reducir la tensión típica de fin de año (Imagen Ilustrativa Infobae)

Runner’s World destaca que el estrés y las modificaciones en la rutina pueden dejar el ejercicio de lado, aunque moverse contribuye a estructurar los días y aliviar la tensión típica de estas temporadas.

Objetivos realistas y flexibles para asegurar la constancia

Ambos medios recomiendan fijar objetivos realistas y flexibles para conservar la constancia. Coms aconseja comprometerse con un número alcanzable de entrenamientos semanales, como dos o tres sesiones, y dejar ese compromiso por escrito para fortalecer la disciplina. “La motivación sube y baja, pero la disciplina te sostiene cuando la rutina se complica”, explicó en declaraciones recogidas por Grazia.

Runner’s World sugiere dividir el periodo en semanas y establecer metas adaptadas a los compromisos personales. Si el plan no se cumple, la recomendación es ser flexible y comprensivo, y recordar que cada día brinda una nueva oportunidad para retomar el hábito.

Entrenamientos cortos e intensos y
Entrenamientos cortos e intensos y rutinas variadas optimizan el tiempo y mantienen la motivación cuando el clima es adverso (Imagen Ilustrativa Infobae)

Según Grazia, el compromiso compartido y la socialización resultan herramientas eficaces para mantener la motivación. Runner’s World coincide en la relevancia de la socialización: recomienda anunciar los planes de entrenamiento y ejercitarse en grupo. Estas estrategias refuerzan el compromiso y pueden inspirar a mantener el esfuerzo, además de ayudar a disfrutar el proceso.

Calidad sobre cantidad: entrenamientos intensos y rutinas variadas

Cuando el tiempo escasea o la temperatura es elevada, ambas publicaciones recomiendan priorizar la calidad antes que la cantidad. Runner’s World apoya la reducción de la frecuencia y el aumento de la intensidad; apostar por intervalos puede brindar resultados comparables a sesiones más largas y ayudar a mantener la motivación gracias a la variedad.

El clima, ya sea frío en diciembre o caluroso en verano, puede convertirse en un obstáculo adicional. Runner’s World aconseja aprovechar el entrenamiento al aire libre siempre que las condiciones lo permitan, ya que moverse fuera puede mejorar el ánimo y evitar la sensación de encierro.

Adaptar el entrenamiento al aire
Adaptar el entrenamiento al aire libre y elegir horarios adecuados mejora el bienestar y la seguridad durante el verano o el invierno (Imagen Ilustrativa Infobae)

Para quienes viajan o no cuentan con equipamiento, la creatividad es esencial: reemplazar pesas por ejercicios con el peso corporal o convertir una caminata en actividad física son buenas alternativas.

Invertir en ropa adecuada, elementos de hidratación o protección solar, y adaptar los horarios para evitar las horas más calurosas, facilita mantener el hábito y permite entrenar con mayor seguridad.

Un truco adicional es preparar la ropa deportiva la noche anterior, cerca de una fuente de calor en invierno o en un lugar fresco durante el verano, para que esté lista y confortable al iniciar la actividad.

La importancia de la continuidad: evitar el riesgo de renunciar

Coms advierte, citada por Grazia, que postergar el ejercicio para “más adelante” rara vez funciona: “Menos del 10% de los propósitos se mantienen a largo plazo. Y hasta un 80% de los nuevos inscritos en gimnasios en enero han abandonado en cinco meses”.

Mantener el hábito, aunque sea con menor intensidad, permite afrontar el nuevo ciclo en movimiento y sin presión por comenzar de cero. La continuidad, aunque sea parcial, fomenta la adaptación y el bienestar físico y mental, y evita la frustración común al reiniciar desde la inactividad.

La continuidad, aunque sea parcial,
La continuidad, aunque sea parcial, previene el abandono del ejercicio y favorece el bienestar físico y mental a largo plazo (Imagen Ilustrativa Infobae)

Sostener el entrenamiento durante diciembre y en los meses de calor no depende de grandes gestos, sino de pequeñas decisiones diarias que mantienen cuerpo y mente activos. Encontrar el modo más sencillo de seguir en movimiento puede marcar una diferencia notable en el bienestar durante cualquier temporada.