Análisis de Tiny Tina’s Wonderlands, el ansiado y alocado shooter de fantasía medieval

Las empresas Gearbox y 2K son las propietarias de la saga Borderlands, una mítica franquicia de disparos que se caracteriza por tener un gameplay muy divertido, una estética sólida y una historia cargada de burlas desquiciadas para adultos. La serie cuenta con una trilogía que mantiene una línea temporal y narrativa en su universo ficticio, pero no se estanca ahí, sino que los títulos se ramificaron con muchos DLC y aventuras paralelas que alimentaron el lore para los fanáticos.

Tiny Tina’s Wonderlands es un spin-off protagonizado por Tina, una carismática personaje que ya tuvo una aparición previa en un paquete de contenido anexo de Borderlands 2. La desarrolladora ha encarado el proyecto de una forma conveniente y -a fin de cuentas- eficaz, debido a que el game design está basado en una enorme partida de Dungeons & Dragons liderada por la joven preadolescente y otros dos co-estrellas que nacen para este título, llamados Valentine y Fred. En toda travesía del medioevo hay un villano, aquí es el Señor de Los Dragones.

Todo comienza con elegir el tipo de partida en la que el jugador desee embarcarse, ya sea cooperativa o competitiva, de forma local u online (crossplay incluido). Para el caso de la primera, está programado que todo el botín sea equitativo, mientras que la segunda implica luchar contra tu propio compañero o disputarse en ser más veloz a la hora de abrir los cofres. No obstante, cabe aclarar que el juego entero puede disfrutarse en solitario.

Posteriormente se da lugar a la elección de clases:

-Puñalomante: build de críticos, daño cuerpo a cuerpo y utiliza sigilo para sus acciones especiales.

-Garrapiñazos: tiene un compañero que constantemente tira fuego por la boca y ataca a los enemigos con sus garras; puede provocar daño melee con martillos; también genera ataques ígneos y de electricidad.

-Tirahechizos: típico mago de cualquier otro videojuego. Usa una considerable gama de encantamientos hostiles instantáneos y otros recargados. Puede transformar a los enemigos en una “skeja” (algo similar a una oveja).

-Sepulcronato: inflige daño de magia oscura a cambio de salud. Al igual que el Tirahechizos, siempre está acompañado de un compañero con habilidades variadas. Cuenta con una destreza especial para hacerse inmune por unos segundos.

-Guardaesporas: centrado en armamentos y skills a distancia, se apoya en su compañero fúngico, un hongo venenoso. Puede congelar a los enemigos con su ciclón helado y habilidad glacial.

-Brr-Serker: otra clase con acciones cuerpo a cuerpo y una gran variedad de ataques especiales como “Tornado de dolor” mixeado con daño glacial.

Ahora bien, la dificultad está muy bien segmentada y permite que todos los gamers puedan disfrutar de esta experiencia. Por un lado está la “relajada”, donde los jugadores poseen un 15% más de poder y los enemigos un 15% menos; “equilibrada”, ideal para balancear un desafío justo; e “intensa”, donde se invierte lo sucedido a la más fácil, aunque las recompensas son un 15% mejores tanto en oro como orbes lunares.

La campaña tiene una premisa bastante simple: superar un mundo tras otro revelando profecías, mejorar el equipamiento y obtener pistas para terminar con la tiranía de El Señor de Los Dragones. El guión es bastante único en su estilo, que obviamente se potencia con los cimientos que dejó Borderlands. Este tiene un humor un poco menos ácido que en los lanzamientos previos -y honestamente a veces algo repetitivo-, lo que a muchos les resultará divertido, pero a otros los incomodará un poco en ciertas ocasiones.

Sin embargo, no todo es cómico en Tiny Tina’s Wonderlands, porque otra cantidad de emociones se hacen presentes a lo largo de las narraciones. Por ende, no sería una sorpresa que alguna lágrima cayera en el medio del relato. Además, hay muchísimas referencias de películas, libros y las misiones secundarias parodian incluso al propio Borderlands.

Una vez superado el objetivo principal y luego de ver los créditos, se desbloquea el Modo Caos -una dificultad extra que recompensa con mejores objetos- y una experiencia roguelike conocida como Cámaras del Caos, donde cada run es aleatoria en lo que respecta a monstruos, jefes y premios.

Los enfrentamientos y el gunplay son espectaculares. Si bien juegos como Doom Eternal dejaron la vara altísima en lo que concierne a frenetismo entre las batallas, Tiny Tina’s Wonderlands no se queda atrás. Indudablemente su arista RPG converge en algo sumamente gratificante cuando se combina con las diferentes sinergias de clase, dándole al jugador decenas de posibilidades de estrategias para enfrentarse al entorno y otros usuarios. Las armas realmente son muy alocadas y buscan hacer reír al público. Por ejemplo, algunas de ellas literalmente disparan dragones.

Las prestaciones gráficas son absolutamente hermosas y ostentosas por igual. Borderlands siempre se caracterizó por tener texturas tan peculiares, con una animación tan fina que también hace uso de la captura de la gesticulación de actores reales. La dirección artística de los escenarios es súper llamativa y todos los assets tienen efectos visuales que están a la altura de la nueva generación. Algunos de los casos más emblemáticos son zonas de piratas, bosques encantados y otras tantas locaciones medievales. Alineado a este tópico, la personalización a la hora de crear un personaje es muy amplia e inclusiva.

Hemos probado esta experiencia en PS5 y PC. En ambas plataformas parece estar perfectamente optimizado e insistimos en que no se perciben bugs que puedan arruinar la experiencia. Algo que nos sorprendió fue el uso tan intenso que se le da al DualSense, ofreciendo a los usuarios versatilidades en la vibración y las resistencias de los gatillos en múltiples ocasiones.

Finalizando el recorrido, podemos asegurar al menos 18 horas para culminar con el arco principal, pero hay muchísimas horas adicionales que se pueden agregar en términos de rejugabilidad. Tiny Tina’s Wonderlands es un juego fantástico para sentarse, rolear y disfrutar de un excelente paquete compuesto por humor y acción.

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