La confesión de Milly Alcock luego de ser confirmada para protagonizar Supergirl: “No sé cómo interpretarla”

La actriz australiana en una entrevista con Forbes habló sobre el vértigo que sintió al asumir el rol de la superheroína, el impacto que el proyecto tendrá en su vida y el camino personal y profesional que la llevó de House of the Dragon a encabezar una de las apuestas más ambiciosas de DC Comics

Guardar
Milly Alcock interpreta a una Supergirl más oscura y vulnerable en Woman of Tomorrow, una película inspirada en el cómic de Tom King y Bilquis Evely que explora el duelo, la identidad y la distancia emocional entre la heroína y Superman (Warner Bros/DC Comics)

Milly Alcock, la joven actriz australiana que conquistó la atención internacional como Rhaenyra Targaryen en House of the Dragon, está lista para liderar el universo DC como protagonista de Supergirl: La Mujer del Mañana.

Su trayectoria, desde los suburbios de Sídney hasta sets internacionales, ha posicionado a la actriz de 25 años como referente para nuevas generaciones, según destaca Forbes.

Nacida y criada en Petersham, en el Inner West de Sídney, Alcock creció como la menor de tres hermanos, en una familia ajena a la industria del cine. Su infancia transcurrió entre veranos descalza, piscinas locales y amistades de barrio.

La actriz australiana, que conquistó
La actriz australiana, que conquistó a los fans de Game of Thrones, da un gran paso en su carrera al tomar el rol de Supergirl (Portada Forbes Australia)

En contraste, atravesó dificultades escolares: “Yo era la niña que estudiaba durante horas y aprobaba por los pelos”, recordó Alcock en diálogo con Forbes. Su paso por la Escuela Secundaria de Artes Escénicas Newtown marcó el inicio de su acercamiento profesional a la actuación, aunque pronto eligió priorizar el trabajo por encima de los estudios.

El salto a la actuación profesional

En su último año escolar, Alcock dedicaba más tiempo a los rodajes que a las clases. “Mi asistencia fue inferior al 50%”, comentó. La decisión de abandonar la escuela fue clara: “Fui con mi mamá y le dije: ‘Me gustaría dejar la escuela’. Me preguntaron cuántos años tenía. Dije 18. Dijeron: ‘De acuerdo’. Eso fue todo, simplemente sucedió”.

Ese instinto la condujo a buscar independencia y a trabajar desde joven, abriéndose camino en la industria mediante anuncios y papeles televisivos.

El punto de inflexión llegó en 2019 con Upright, la serie creada por Tim Minchin, donde interpretó a una de las protagonistas y se dio a conocer ante un público más amplio. Dos años después, Alcock recibió la llamada que transformó su carrera: el papel de Rhaenyra Targaryen para House of the Dragon.

El papel de Rhaenyra Targaryen
El papel de Rhaenyra Targaryen en House of the Dragon marcó un antes y un después en la trayectoria de Milly Alcock (HBO Max)

“Estaba en casa de mi mejor amiga en Glebe. Mi agente me preguntó: ‘¿Estás lista?’. Supe al instante que me habían dado el papel”, rememoró. El secretismo del proyecto fue absoluto y mantuvo en secreto su participación durante cuatro meses. “La gente sospechaba, pero nadie lo adivinó”, comentó entre risas.

Desafíos y aprendizajes en la industria

El rodaje de House of the Dragon coincidió con la pandemia, lo que llevó a Alcock a mudarse sola a Londres a los 21 años. Se enfrentó a la magnitud de un proyecto internacional sin contar con referentes familiares en la industria.

La serie tuvo un éxito inmediato: debutó con casi 10 millones de espectadores y promedió 29 millones a lo largo de la temporada, alcanzando el mayor estreno de HBO desde Game of Thrones.

El camino incluyó desafíos personales. Al inicio de las grabaciones, una figura de alto rango le sugirió que necesitaba un profesor de actuación, afectando su confianza.

Milly Alcock enfrentó inseguridades y
Milly Alcock enfrentó inseguridades y desafíos personales durante el rodaje de House of the Dragon en plena pandemia (REUTERS)

“Era joven, estaba al otro lado del mundo y ya dudaba de mí misma. Simplemente destruyó cualquier confianza que tuviera”, admitió. Sin embargo, Alcock transformó la inseguridad en motivación para perfeccionar su oficio. “Cuanto mayor me hago, más me doy cuenta de que esto no es casualidad ni suerte. Es trabajo”, afirmó.

Supergirl, un nuevo capítulo bajo los focos

El siguiente gran paso en su carrera llegó con la confirmación de su papel como Supergirl en la película dirigida por Craig Gillespie, una producción de USD 200 millones. Alcock recibió la noticia con mezcla de entusiasmo y temor: “Me costó mucho creer que podía conseguir el papel. Incluso llamé al director y le dije: ‘No sé cómo ser Supergirl. Simplemente soy yo’”.

Esa sensación inicial, explicó en la conferencia de prensa por el lanzamiento del tráiler, estuvo atravesada por una intuición clara sobre el impacto del proyecto: “Creo que esto me va a cambiar la vida. Así que estaba muy emocionada. Pero también tenía mucho miedo”.

La actriz describió a Supergirl
La actriz describió a Supergirl como una superheroína compleja y humana, alejada de los estereotipos idealizados (Warner Bros.)

Con el correr del tiempo, esa inseguridad dio paso a una comprensión más profunda del personaje y del desafío que implicaba encarnarlo. Alcock encontró un anclaje en la forma en que estaba escrita la protagonista, lejos de una figura idealizada.

“Es una superheroína, pero fue escrita con una base tan profunda que parece una persona con la que todos podemos entender y empatizar. Tiene muchísimos defectos, es un desastre. Y el hecho de ser una superheroína es lo que la hace diferente”, explicó la actriz sobre las características que tendrá Supergirl.

En medio de la atención internacional y grandes proyectos, Alcock insiste en que su vida diaria está lejos del glamour. Para ella, el éxito no alteró su esencia ni su rutina. “La mayor parte del tiempo es bastante normal. Voy a trabajar, vuelvo a casa, llamo a mi madre y preparo la cena. La gente espera que sea glamorosa, pero así es mi vida”, detalló y concluyó a Forbes.