Entrevista a Federico Beligoy: “Si vamos a tener VAR, que sea el mejor del mundo”

Federico Beligoy es el Director Nacional de Arbitraje y, al mismo tiempo, el Secretario General de la Asociación Argentina de Árbitros. “Puedo dividir ambos cargos porque tienen competencia en el arbitraje. Estoy en el mundo del arbitraje desde hace 30 años, entiendo cómo se manifiesta, cómo se vive”, dice este ex juez, de 51 años. El 2020 le propuso dos desafíos complejos: los problemas que ofreció la pandemia de COVID-19 en su ramo y la recta final de la puesta en marcha del VAR en Argentina, que se espera que dé el puntapié inicial entre febrero y marzo de 2021.

“Cuando empezó la pandemia estábamos muy preocupados y no quedó otra que ocuparnos. A los 15, 20 días de que se decretó el aislamiento, todo el plantel de AFA, alrededor de 600 árbitros, vía zoom, iniciamos una capacitación virtual única en el mundo, que provocó que nos llamaran de otros países para que los asesoráramos. Y tenemos la suerte de que el presidente de AFA, Claudio Tapia, entiende lo que es un trabajador, y todos los meses los árbitros cobraron su sueldo y aguinaldo en tiempo y forma”, explica

-A los árbitros les pasó igual que a los futbolistas. La puesta a punto tuvo sus problemas por el coronavirus. ¿Cómo lograron que estuvieran a la altura de las circunstancias en el reinicio de la competencia?

-La actividad siguió de manera anormal, distinta. Por ahí un árbitro se entrenó de una manera durante 20 años y tuvo que que entrenarse en el patio de una casa; se han visto los videos en todos lados. Cuando los protocolos, el Ministerio de Salud y AFA lo permitieron, se armaron burbujas de seis árbitros y un instructor y, de a poco, con cargas bajas, fueron regresando al rigor de entrenamiento habitual. Los árbitros hoy contamos con un predio exclusivo; lo remarco porque no sucede en otras partes del mundo. Es un centro de alto rendimiento, que cuenta con un médico traumátólogo, otro deportólogo, licenciados en kinesiología con su correspondiente sala, gimnasio musculación con máquinas de última generación, canchas con riego artificial para entrenar con un césped igual al de los estadios de de Primera... Los profesionales tienen 4 o 5 horas de entrenamiento en el predio. La profesionalización del arbitraje y el centro de alto rendimiento llevaron a la evolución del árbitro argentino. Son las condiciones ideales para llevar adelante este trabajo. Todos los árbitros tienen sueldo básico garantizado en relación laboral con AFA.

-Imagino que en el predio también se armarán algunos desafíos futbolísticos en los que los árbitros dejan de ser árbitros. ¿Quién es el que juega mejor?

-Loustau juega muy bien, es enganche. Pitana es un buen delantero, un buen N° 9, Lamolina es marcador central. Rapallini, delantero. Hay de todo, no jugamos mucho al fútbol porque hay que cuidarse mucho, los tenemos en una cajita de cristal. Una lesión de un árbitro es un mes afuera de las canchas, los necesitamos a todos y los instamos a que se cuiden.

-¿En qué nivel creés que está el arbitraje argentino?

-El arbitraje argentino es de élite mundial. Y es lo que hablo con los dirigentes, jugadores, técnicos... Lo digo no sólo por los nombres, pero hoy por hoy la plantilla internacional cuenta con Néstor Pitana, Patricio Loustau, Fernando Rapallini, Facundo Tello, más Darío Herrera, Mauro Vigliano... No hay lugares en el mundo con un plantel tan fuerte que puede dirigir cualquier partido del planeta. Después está el día a día en tu país, en el que un árbitro te dirige un fin de semana, se equivocó en un lateral y lo están criticando; pero es parte de nuestra idiosincracia.

-¿Y a nivel sudamericano cómo ves el nivel?

-Veo un abanico de árbitros de experiencia, algunos fueron compañeros míos, como Wilmar Rolán, Wilson Sampaio, Roberto Tobar, Andrés Cunha, Víctor Hugo Carrillo... Y hay muchos jóvenes que están apareciendo, con futuro promisorio, al igual que en el arbitraje argentino.

-¿En qué punto se encuentra la implementación del VAR en el fútbol argentino? ¿A partir de cuándo se empezará a utilizar?

-Voy a armar una línea cronológica, para dejar en claro todos los pasos que se dieron. En enero de 2019, durante la pretemporada de los árbitros en Mar del Plata, el presidente de la AFA me dijo que quería traer el VAR a la Argentina, que quería un arbitraje más moderno y asertivo, con más transparencia deportivamente hablando en cuanto a lo que el VAR puede ayudar al árbitro. Empezamos con una serie de cursos en varias partes del mundo para capacitarnos y para ver cómo se lleva a cabo el proceso del desembarco. En enero de este año comenzamos con la capacitación de FIFA e IFAB, que te van monitoreando y aprobando etapas. E hicimos cursos en pandemia, a pesar de lo que costó, porque hemos tenido que quintuplicar las horas de trabajo, dado que son cursos que se hacen con 40 árbitros en un aula, y los hicimos con ocho. Ahora entramos en la última etapa, denominada 3C: son 80 partidos a trabajar con el VAR, con el cuarteto arbitral en el campo de juego y el equipo VAR a cargo de la tecnología. Se van a hacer en el predio de Ezeiza, con Selectivos, juveniles. Empiezan la semana que viene y, una vez que los atravesemos; en febrero o marzo creemos que podremos tener VAR.

-¿El sistema va a estar centralizado o va a haber una cabina del VAR en cada estadio?

-Cuando empezamos a pensarlo con el presidente de la AFA, pensamos: ‘Si vamos a hacer el VAR, que sea el mejor del mundo’. Y trabajamos para hacerlo con un sistema de VAR centralizado, armar un edificio para poder trabajar los partidos con la tecnología. En Europa sólo hay cinco países con el VAR centralizado: España, Holanda, Alemania, Inglaterra y Portugal. Y Estados Unidos, la primera federación de América. En el complejo de AFA ya se empezó a construir un edificio, con siete salas VOR, y ahí va a funcionar la Dirección de Arbitraje. El centro va a quedar inaugurado en junio de 2021. De manera transitoria, mientras tanto, se instalarán las cabinas junto al edificio, que tendrá 850 metros cuadrados y fibra óptica por doble acometida.

-¿Qué evaluación hacés de la implementación de la herramienta tecnológica hasta el momento en el mundo?

-La evaluación de la herramienta es altamente positiva. El uso de la misma lleva tiempo de adaptación y acostumbramiento. Es algo totalmente nuevo, en un deporte en el que el criterio y la interpretación existió y va a seguir existiendo. Va a seguir generando discordancia, el VAR llegó para erradicar los errores claros, obvios y manifiestos: el gol que entró o no entró, la trompada que no vio el árbitro, si la falta fue un metro afuera o adentro del área; es en las cuestiones interpretativas en las que se discute la herramienta. Y en cuanto al tiempo de demora de revisión, el mundo del fútbol tiene que entender que el VAR todavía es un bebé, está en pleno desarrollo. Van a ir cambiando cosas, procederes, hay que darle tiempo, bancarlo. Si sucede que hay 10 errores por fin de semana, y el VAR soluciona 8 o 9, firmo. Claro, el error que queda sin resolver se multiplica por un millón con el análisis después de los partidos, sí, pero somos seres humanos.

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