Evo Morales destacó que AMLO le haya dado asilo político a la familia de Pedro Castillo en México

El expresidente boliviano indicó que Lilia Paredes y sus hijos estaban encapsulados en un entorno de odio, que era impulsado por el “fujimorismo”, en el Perú.

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Evo Morales, Pedro Castillo y Andrés Manuel López Obrador, tridente que tiene en común una ideología: la izquierda.
Evo Morales, Pedro Castillo y Andrés Manuel López Obrador, tridente que tiene en común una ideología: la izquierda.

La decisión del Gobierno de México de otorgarle asilo político a la familia del hoy detenido expresidente Pedro Castillo sigue generando repercusión internacional. Evo Morales destacó el gesto de Andrés Manuel López Obrador al ofrecerle su país como lugar de refugio a la ex primera dama Lilia Paredes y los dos menores hijos, quienes abandonaron ayer el Perú.

“Saludamos el acto humanitario del hermano presidente López Obrador al brindar asilo y salvar la integridad y seguridad de la familia del hermano presidente Pedro Castillo, sometida injustamente al acoso, persecución y hostigamiento político del fujimorismo y prensa derechista”, escribió el ex jefe de Estado boliviano en su cuenta de Twitter.

De otro lado, Evo Morales agregó que líderes políticos de izquierda son perseguidos en toda América por sectores conservadores, que pretenden instaurarse eternamente en el poder. Además, mostró su solidaridad con el diplomático Pablo Monroy, quien fue expulsado como embajador de México por la administración de Dina Boluarte.

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“Dirigentes comprometidos con la vida, la soberanía y hermandad son perseguidos, expulsados, procesados, confinados y exiliados. La derecha los reprime para seguir robando nuestros recursos naturales. Nuestra solidaridad con el hermano embajador de México”, culminó.

El martes pasado, el canciller mexicano Marcelo Ebrard confirmó que los parientes del expresidente Castillo habían obtenido el asilo. “El asilo ya se les concedió porque ya están en territorio mexicano, en nuestra embajada. Es una decisión independiente y soberana de México. Lo que se está negociando es el salvoconducto para que si desean salir y venir a México, lo puedan hacer”, apuntó.

Los beneficiados fueron Lilia Paredes y sus hijos. Con el asilo, la esposa de Castillo logró eludir la acción del Ministerio Público que la investiga por el presunto delito de organización criminal por el caso del direccionamiento de obras públicas en regiones tras destaparse que su hermana Yenifer Paredes ofrecía un proyecto de saneamiento en la comunidad de Chadín (Cajamarca).

La primera dama salió del país sin ningún problema porque, además, el Poder Judicial le levantó una serie de restricciones, entre las que se destacaba que debía informar sus actividades dentro del territorio nacional.

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Paredes partió de madrugada con destino al aeropuerto Jorge Chávez, donde fue increpada por diversos pasajeros que también acudían a tomar un vuelo. La comitiva fue resguardada por escoltas y, al llegar al aeropuerto, Paredes fue increpada por varios pasajeros que la llamaron “sinvergüenza”.

El presidente mexicano se refirió a la acogida del país vecino a la exprimera dama y sus hijos con Pedro Castillo.

Francisco Garduño, comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM) de México, entregó este miércoles los documentos que acreditan la estancia legal de Paredes y sus dos menores hijos en el país que les concedió asilo político.

El organismo publicó en su cuenta de Twitter cuatro fotografías en las que aparece Garduño entregando las tarjetas migratorias a los familiares del expresidente Castillo.

Lazos quebrados

Los lazos entre Perú y México empezaron a resquebrajarse cuando, a fines de 2021, el presidente Andrés Manuel López Obrador abogó por Castillo, arremetiendo contra los intentos del Congreso de destituirlo del cargo.

Además de México, los gobiernos de Argentina, Bolivia y Colombia también habían mostrado su respaldo a Castillo, pese al fallido golpe de Estado del 7 de diciembre. Ello llevó al Perú a llamar a consulta a sus embajadores en esos países.

Tras su intento de autogolpe de Estado, Castillo, un maestro rural de izquierda y alejado de las élites, fue destituido y posteriormente detenido cuando se dirigía a la embajada mexicana para solicitar asilo.

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