Cuando se movilizaba por el municipio de Sabaneta, en el departamento de Antioquia, hacia un centro de cirugía estética donde iba a operarse el rostro para cambiar su imagen, fue capturado el ex policía John Eduard Barbosa Muñoz, de 47 años de edad, uno de los capos de la temida banda criminal La Oficina, que controla el narcotráfico en Medellín desde la época de Pablo Escobar.

Barbosa recién había regresado de España, país a donde trasladó su residencia luego de sufrir un atentado a principios de año en la vía del municipio de Copacabana, del que salió ileso. Las autoridades lo vigilaban desde abril, luego de que fue capturado en Madrid por portar documentos falsos; detalla el diario El Colombiano.

Su rostro estaba en el letrero de los más buscados de Medellín, publicada por el mismo alcalde de la ciudad, Federico Gutiérrez. Y las autoridades ofrecían 50 millones de pesos (14.964 dólares) por información que diera con su captura. Por eso, Barbosa decidió cambiar la apariencia de su rostro para no ser encontrado.

Sin embargo, la Sijín de la Policía, con el apoyo del departamento antidrogas de los Estados Unidos (DEA), le venían siguiendo la pista desde que se convirtió en una de las cabezas visibles de La Oficina, la banda criminal que comenzó como una red sicarial fundada por el mafioso Pablo Escobar, líder del Cártel de Medellín, pero que tras su muerte fue tomada por paramilitares y enemigos del capo para tomar el control de la criminalidad de la ciudad.

Barbosa fue subintendente de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, trabajó en la Sijín (investigación criminal) y en el Gaula (equipo antisecuestro). Entonces participaba en secuestros y cobro de deudas de la mafia al servicio de La Oficina, de acuerdo con el portal Análisis urbano, por lo que fue destituido.

Tras la captura de los principales cabecillas de la banda criminal, Juan Carlos Mesa Vallejo, alias Tom, y Carlos Mauricio Soto Isaza, alias Soto, Barbosa adquirió mayor importancia en la jerarquía de la organización ilegal. Sus planes -según el diario El Colombiano– era expandir su actividad delictiva a Europa, fundando una sucursal de la banda en España.

Barbosa tiene órdenes de captura vigentes por delitos de concierto para delinquir con fines de tráfico de estupefacientes, extorsión, secuestro extorsivo agravado y hurto calificado y agravado, detalló el alcalde Gutiérrez.

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