Malestar en la OEA por las declaraciones del canciller argentino Felipe Solá

El ministro de Asuntos Exteriores de la Argentina había acusado al organismo internacional de participar en un golpe de Estado en Bolivia. Sorpresa e indignación en la sede de Washington

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Luis Almagro, secretario general de la OEA y Felipe Solá, ministro de Relaciones Exteriores de la Argentina (Infobae)
Luis Almagro, secretario general de la OEA y Felipe Solá, ministro de Relaciones Exteriores de la Argentina (Infobae)

Lo que ocurrió en Bolivia no hubiese sido posible sin la anuencia de la OEA. Su función es denunciar golpes, no patrocinarlos. La frase corresponde a un mensaje que el canciller argentino, Felipe Solá publicó en su cuenta de Twitter contra la Organización de Estados Americanos (OEA) y que repercutió en la sede del organismo en Washington. Fue un día después de que Evo Morales -quien estuvo casi un año como refugiado en la Argentina luego de haber cometido fraude en las elecciones de 2019- retornara a su país acompañado por el presidente Alberto Fernández.

Visiblemente molestos con los dichos del ministro de Relaciones Exteriores, desde la OEA prefirieron no responder públicamente -por el momento- a las acusaciones hechas desde una app en el Palacio San Martín. Sin embargo, en estricto off the record, una alta fuente no ocultó su enojo y señaló que los conceptos de Solá estaban absolutamente infundados y que no guardaban correlación con lo sucedido en los turbulentos días de noviembre de 2019 que condujeron a la renuncia de Morales tras varias jornadas de violencia y caos en todo el país.

La OEA hizo llamados a la paz, al respeto de la Constitución y de las instituciones. La OEA fue absolutamente contundente en cuanto a que el ex presidente Evo Morales debía terminar su mandato", indicaron desde el organismo multilateral conducido por el diplomático uruguayo Luis Almagro. Al respecto, recordaron el comunicado que elevaron el 10 de noviembre de 2019 que decía: “Se entiende que los mandatos constitucionales no deben ser interrumpidos, incluido el del presidente Evo Morales”.

El mensaje por Twitter de Felipe Solá que causó malestar en la Organización de Estados Americanos (Twitter)
El mensaje por Twitter de Felipe Solá que causó malestar en la Organización de Estados Americanos (Twitter)

En el mismo documento, la OEA también remarcó que se había convocado a todos los actores de la vida política de Bolivia a cumplir con lo indicado por la constitución nacional y agregaba que “las instituciones del Estado boliviano deben actuar en consonancia con lo establecido en la Constitución y las leyes del país”.

Fuimos la única organización multilateral con pronunciamientos tan claros. Hacer afirmaciones que posicionan a la OEA de otra forma es mentir y tratar de instalar una narrativa de falsedades”, señaló otra de las fuentes consultadas, quien también pidió reservar su identidad.

Por último, el funcionario hizo mención al trabajo que el organismo internacional hizo durante las elecciones presidenciales donde se comprobaron maniobras de fraude en diferentes distritos para favorecer la permanencia en el poder de Morales. “La OEA no avaló que se contabilizaran votos de personas fallecidas, no avaló que se tomaran como válidas actas prellenadas, actas con resultado alterado y actas falsificadas, tampoco avaló que se contabilizaran votos provistos desde servidores ocultos y ajenos al sistema electoral. Es decir, no avaló la manipulación dolosa del resultado electoral”, subrayó indignado.

“Avalar eso, ya sea en ese momento o ahora, pone en duda las credenciales democráticas de quien lo hace ya que la manipulación dolosa de resultados electorales sí es una práctica de ruptura democrática y de alteración del orden constitucional de un país”, concluyó.

El canciller Solá había sido más extenso en su tuit en el cual convocó a una unidad supuestamente perdida en América Latina. “Trabajaremos en esta nueva etapa política del continente para recuperar la unidad perdida, con la voluntad de una integración fuerte y responsable. Lo que ocurrió en Bolivia no hubiese sido posible sin la anuencia de la OEA. Su función es denunciar golpes, no patrocinarlos”, dijo el funcionario.

No es la primera vez que Solá apunta contra Almagro, secretario general de la OEA. Días atrás, cuando habló ante el plenario del organismo, arremetió contra el dirigente por la posición que mantiene el organismo ante la dictadura de Venezuela“No cumple con ese mandato ya que se opta por posiciones personales que terminan alimentando el problema al que se debe solucionar”. El diplomático uruguayo denuncia constantemente “la carencia de condiciones democráticas mínimas, para garantizar elecciones libres, justas y transparentes" en la nación comandada por Nicolás Maduro.

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