La paleta de colores que utilizan las mujeres de la realeza en sus apariciones públicas no es sobria, ni flemática, como sí el estilo protocolar que intentan conservar.
Gustan de hacerse ver a la hora de pensar y elegir sus looks en público y encuentros protocolares. El mejor indicio de esta cuestión es la elección de una paleta de colores estridentes y shocking, repleta de colores plenos y combinaciones.
Amarillo patito, azul eléctrico , rojo furioso e incluso algún verde flúo son algunos de los colores que habitan el guardarropa de la reina Isabel II de Inglaterra, de la reina Máxima de Holanda, de la reina consorte de España, Letizia -quien arrancó con colores nude o amarronados en sus primeras apariciones-; de la Duquesa de Cambridge, Kate Middleton a quien se considera – casi sin discusión- un emblema de estilo entre todas las "royals".
La pregunta que resuena es si Meghan Merkle, la nueva Duquesa de Sussex, se sumará a esta tendencia shocking o preferirá tonalidades más suaves, casi en un intento de pasar desapercibida.
Caroline de Guitaut, curadora de la exhibición de la Colección Real, en una entrevista con el New York Times reveló que Isabel II usa colores estridentes para resaltar y que la encuentren con facilidad ante cualquier amenaza que ponga en riesgo su vida.
A Meghan Markle todavía no se la vio en ninguna visita oficial con outfits de colores shocking. "No creo que lleve trajes o vestidos de colores muy brillantes , salvo que así se lo pida en protocolo real . Ella es muy minimalista y net, viste con colores sólidos, sobrios y tonos neutros. Camel, negro, blanco, crema, azul, verde, azul noche y gris", compartió con Infobae la asesora de imagen María Gabriela Gurmandi.
La fuerza del rojo
El guardarropa de la reina Isabel II abarca casi todos los colores del arco iris, incluido el colorado. "El rojo simboliza la pasión, y expresa energía talento y coraje, velocidad y vigor. Simboliza lo irresistible, y siempre agrega vitalidad", explicó a Infobae la asesora y experta en colorimetría Carolina Aubele.
Fanática del rojo -tanto como la argentina Máxima de Holanda-, este color otorga poder y pide reconocimiento. Sin duda, quien se anima al rojo denota una personalidad fuerte. También es muy usual ver a la reina Letizia Ortiz de España con atuendos en esta tonalidad, que resalta su color de pelo y tez.
La realeza del violeta
Se lo asocia con la realeza, divinidad y el honor; infunde respeto. En simbología, el violeta representa el mundo místico y de la magia.
Encarna el liderazgo las clases alta, de las reinas y los reyes. Refinado y exclusivo, no se caracteriza por ser un color masivo.
Es habitual ver a Isabel II usando todas las tonalidades de violetas. Galeras, sobretodo, sacos, tailleures y vestidos de esta tonalidad están presentes en el vestidor de la reina de Inglaterra.
Los tonos lila, orquídea y lavanda son relajantes. En la moda, cuando se quiere impresionar, el uso de la paleta de los violetas hace ver los outfits refinados y sofisticados. Si este no está en equilibrio puede resultar extravagante.
"Es poco común verlo en un guardarropas". La experta en colorimetría agregó que "advierten que el violeta oscuro tiende a absorber la luz".
Fucsia, el color de la energía amorosa
El color rosa está netamente involucrado con una energía amorosa, nutritiva y compasiva. Es la tonalidad del amor incondicional, la compresión y el cuidado. Es femenino y romántico.
Para la realeza es un color positivo, que inspira calidad y contención. A su vez restaura energías emocionales. El tono rosado simboliza el cuidado, la calidez, la ternura y el amor por la familia. Cuanto más fuerte sea el rosa, más apasionada y vibrante será la sensación.
"El fucsia es un color que se usa cuando queremos ser protagonistas en ocasiones de ocio o festejo. Agrega notas positivas y alegres, para darle color a algún outfit aburrido", afirmó Aubele.
La felicidad del naranja
La energía del color es cálida e irradia felicidad. Es optimista, rejuvenecedora y renovadora. Brinda fuerza emocional y es el tono de mayor satisfacción que transmite vibraciones. Es estimulador de la mente y creatividad. Llama mucho la atención: simboliza diversión y espontaneidad.
Es recomendado para las personas tímidas o antisociales por ser un color naturalmente extrovertido y desinhibido. Para no es una tonalidad para todos los días, es imponente y los expertos en moda sugieren que si una prenda es de este color, que sea de buena calidad, porque tiende a notarse rápidamente si es vulgar o barata.
Amarillo de la mente y la inteligencia
Levanta el ánimo, ilumina, brinda diversión, felicidad, esperanza y jovialidad. La vestimenta amarilla representa el conocimiento. El amarillo es lúdico, dinámico, y está asociado con el oro por lo que también sugiere abundancia y riqueza.
En la moda, el amarillo es vitalidad pura, ya sea en combinación, en estampados o accesorios. Por su estridencia y luminosidad, es un color que atrae las miradas.
Azul, el "nuevo" negro
La fe de la paz, la honestidad y el compromiso se ven reflejados en este color. Su energía es sincera, reservada, pacífica y negociadora.
Como es el color del mar, los tintes oscuros suelen asociar a la estabilidad profundidad y los mas claros a la superficialidad.
En la moda e imagen personal esta más bien asociado a la imagen masculina. El azul es elegante. El tono noche muy oscuro hoy se volvió el "nuevo negro"; el eléctrico es vibrante y energético siendo ideal para llamar la atención.
Verde, frescura y crecimiento
Su energía es equilibrio, renacimiento, frescura y crecimiento. Es el color de quienes escuchan. Calma el sistema nervioso, mitiga la fatiga, el estrés y ayuda a reducir el insomnio. "Es un color positivo y calmo. Sus tonalidades claras y frías aportan armonía y frescura a cualquier outfit", sugirió Aubele.
En la moda, es ideal para usar al aire libre y para ocasiones festivas diurnas. El verde esmeralda es uno de los mas utilizados en realeza, ya que expresa lujo.
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