La PS6 y la próxima Xbox retrasarían su lanzamiento por el elevado costo de un importante componente

Fabricantes de consolas analizan retrasar la próxima generación para evitar precios finales demasiado altos para los consumidores

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PlayStation 6 y la nueva
PlayStation 6 y la nueva Xbox tardarían en salir al mercado por el precio de las RAM. (Foto: Sony y Microsoft)

La próxima generación de consolas de videojuegos podría llegar más tarde de lo previsto. Sony y Microsoft estarían evaluando retrasar el lanzamiento de la PS6 y la nueva Xbox, inicialmente proyectado para la ventana 2027-2028, debido al fuerte aumento en el precio y la limitada disponibilidad de la memoria RAM, un componente clave para el rendimiento de estos sistemas.

La información surge de reportes de Insider Gaming, que advierten que el encarecimiento del hardware, impulsado en gran parte por la demanda de la industria de la inteligencia artificial, está generando preocupación en los niveles más altos del sector.

De acuerdo con el medio especializado, el tema comenzó a discutirse internamente a fines de 2025 y ya forma parte de conversaciones estratégicas sobre la viabilidad de producir consolas de nueva generación a un precio competitivo.

Sony estaría pensando en atrasar
Sony estaría pensando en atrasar el lanzamiento de la PS6 y mantener el PS5. Crédito: Sony store

La RAM es uno de los elementos más sensibles en el diseño de consolas, ya que impacta directamente en el rendimiento gráfico, los tiempos de carga y la capacidad de ejecutar juegos cada vez más complejos.

El impacto de la IA en el mercado de la memoria

El principal factor detrás de este escenario es el aumento sostenido en la demanda de memoria RAM por parte de la industria de la inteligencia artificial. En los últimos meses, el precio de los módulos de RAM habría aumentado varios cientos de puntos porcentuales, impulsado por centros de datos, servidores de entrenamiento de modelos de IA y grandes empresas tecnológicas que absorben gran parte de la producción global.

Este fenómeno no parece ser transitorio. Según las fuentes citadas por Insider Gaming, la demanda de memoria vinculada a la IA no muestra señales de desaceleración en el corto plazo, lo que convierte a la RAM en un cuello de botella estructural tanto en disponibilidad como en costos.

El precio de la memoria
El precio de la memoria RAM ha aumentado considerablemente ante su escasez en el mercado. (Imagen ilustrativa)

En este contexto, los fabricantes de consolas enfrentan un dilema: lanzar nuevos dispositivos con precios considerablemente más altos o postergar su llegada al mercado a la espera de una estabilización.

Una decisión que afecta a toda la industria

La preocupación no se limita a Sony y Microsoft. De acuerdo con lo reportado, toda la industria del hardware está atenta a la evolución del mercado de la memoria, ya que el impacto podría extenderse más allá de la próxima generación. Incluso las consolas actuales podrían verse afectadas.

Las fuentes indican que, si la presión sobre la RAM continúa, no se descartan nuevos aumentos de precio para las consolas de la generación actual a partir de 2026, una posibilidad que hasta hace poco parecía lejana.

Microsoft también evalúa retrasar el
Microsoft también evalúa retrasar el lanzamiento de su nueva Xbox. REUTERS/ Mike Blake/File Photo

Históricamente, los fabricantes han absorbido parte de los costos iniciales, vendiendo consolas con márgenes reducidos o incluso a pérdida para compensar luego con la venta de juegos y servicios. Sin embargo, el escenario actual pondría en jaque ese modelo.

Consolas más caras que nunca

La próxima generación ya se perfilaba como la más costosa de la historia. El salto tecnológico esperado —mayor potencia gráfica, mejoras en trazado de rayos, mayor uso de inteligencia artificial en juegos y sistemas más rápidos— implica un hardware significativamente más caro que el de generaciones anteriores.

Si a eso se suma el incremento sostenido del precio de la RAM, el resultado podría ser un precio final “exorbitante” para el consumidor, según describen las fuentes.

Este riesgo habría llevado a los fabricantes a considerar seriamente retrasar el lanzamiento de la PS6 y la próxima Xbox, con la expectativa de que los productores de memoria amplíen su infraestructura, aumenten la oferta y, eventualmente, reduzcan los costos.

No sería la primera vez
No sería la primera vez que una consola como la Xbox o PlayStation retrasan su lanzamiento por diversos factores externos e internos. (Unsplash)

¿Retrasar para abaratar?

La ventana de lanzamiento originalmente estimada para 2027-2028 ahora estaría en revisión. Un retraso permitiría no solo esperar una posible baja en los precios de la RAM, sino también ajustar especificaciones técnicas para lograr un equilibrio entre potencia y costo.

No sería la primera vez que la industria toma este tipo de decisiones: el calendario de lanzamientos de consolas ha variado en el pasado por razones económicas, tecnológicas y logísticas.

Sin embargo, posponer la llegada de una nueva generación también tiene riesgos. Implica extender la vida comercial de las consolas actuales y mantener el interés del público con hardware que, aunque vigente, empieza a mostrar límites frente a las ambiciones de los desarrolladores.