Qué es un buen lavado de manos y cuáles son los beneficios para la salud

El lavado adecuado de las manos puede prevenir enfermedades y salvar vidas. Con motivo del Día Mundial del Lavado de Manos, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos informaron que se puede reducir el número de personas que enferman de diarrea en un 23%-40% si se brinda educación a cada comunidad.

El lavado es una tarea sencilla que se puede conseguir con agua y jabón. Puede tener beneficios concretos que han sido comprobados por investigaciones científicas.

Se puede reducir el número de días de escuela perdidos por los niños debido a enfermedades gastrointestinales en un 29%-57%, de acuerdo con los CDC.

Además, con un buen lavado, se pueden disminuir los casos de diarrea en personas con sistemas inmunitarios debilitados en un 58% y bajar la incidencia de los resfriados en la población en general en un 16%-21%.

Para realizar el lavado de manos adecuado, los 5 pasos clave de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) son los siguientes:

• Mojarse las manos con agua limpia (fría o tibia) y cerrar la canilla o grifo
• Aplicar jabón y frotar las manos hasta formar espuma
• Frotar todas las superficies de las manos durante al menos 20 segundos incluyendo las palmas, el dorso de las manos, entre los dedos y debajo de las uñas
• Abrir nuevamente la canilla o grifo y enjuagar bien las manos bajo el agua corriente
• Secar las manos con una toalla limpia o al aire.

1. Antes de comer o preparar alimentos
2. Después de ir al baño
3. Después de sonarse la nariz, toser o estornudar
4. Después de tocar basura
5. Después de estar en contacto con una persona enferma

“Lavarse las manos es fácil y es una de las maneras más eficaces de prevenir la propagación de gérmenes. Los estudios han demostrado que lavarse las manos puede prevenir 1 de cada 3 enfermedades relacionadas con la diarrea y 1 de cada 5 infecciones respiratorias, como el resfriado o la gripe”, explicaron en un comunicado los expertos de los CDC.

Tanto la OMS como los CDC recomiendan que si no hay agua y jabón disponibles se puede usar un desinfectante a base de alcohol. El desinfectante debe contener al menos un 60% de alcohol. Sin embargo, el lavado con agua y jabón sigue siendo más efectivo para eliminar ciertos gérmenes, como el norovirus o la bacteria C. difficile.

Lavarse las manos es una de las cosas más importantes que se puede hacer para prevenir la intoxicación alimentaria.

Las manos se deben lavar antes, durante y después de preparar alimentos, ya que en esos momentos los gérmenes pueden propagarse.

También hay que considerar el lavado antes y después de usar guantes. Los guantes pueden contaminarse con gérmenes de las manos.

Los gérmenes pueden propagarse fácilmente en oficinas donde los empleados comparten el mismo espacio, suministros y equipo, según advirtieron los CDC.

Los especialistas aconsejaron lavarse las manos con frecuencia, especialmente en momentos clave en los que es probable que se contraigan y propaguen gérmenes durante el horario laboral en oficinas:

• Antes de almorzar o preparar alimentos
• Después de usar el baño
• Después de sonarse la nariz, toser o estornudar

Los CDC instaron a los padres y cuidadores a inculcar en los niños el hábito del lavado de manos, tanto en casa como en la escuela y durante el juego.

Enseñar a los niños los cinco pasos básicos para un lavado de manos efectivo (mojar, enjabonar, frotar durante 20 segundos, enjuagar y secar) es fundamental. Además, es crucial que los niños sepan cuándo deben lavarse las manos, como después de usar el baño o antes de comer.

Es preferible que usen agua y jabón. Advierten que los niños menores de seis años deben ser supervisados al usar desinfectante con base de alcohol para evitar que lo ingieran o entren en contacto con sus ojos.

Los padres y cuidadores deben liderar con el ejemplo al mostrar a los más pequeños la importancia de mantener las manos limpias para proteger su salud y la de su entorno.