Gripe: la cepa que circulará este año es la más peligrosa y en los EEUU ya superó a la pandemia del 2009

El frío aún no se hizo sentir en este lado del planeta. Sin embargo, el virus de la gripe estacional ya circula. Y según alertaron los especialistas, la cepa de esta temporada "es la más peligrosa de las cuatro cepas de gripe estacional".

"La diseminación viral es similar a la de la pandemia de 2009, pero con predominio de la cepa estacional H3N2. Una estación típica mezcla dos cepas de tipo A, H1N1 y H3N2, y dos cepas tipo B, Victoria y Yamagata. Normalmente, las cepas B llegan más tarde y son más raras. De octubre de 2017 al 10 de febrero de 2018, alrededor del 77% de todas las muestras secuenciadas han sido H3N2, de acuerdo con los CDC2, puntualizaron desde la Fundación Centro de Estudios Infectológicos (Funcei) en su boletín epidemiológico.

Según el documento al que tuvo acceso Infobae, "esta cepa no es nueva: surgió por primera vez en Hong Kong, en 1968, y causó la muerte de un millón de personas alrededor del mundo. Pero circuló desde entonces constantemente y sufrió pequeñas mutaciones".

"Es la más peligrosa de las cuatro cepas de gripe estacional. Las temporadas en las que predomina esta cepa están asociadas con más hospitalizaciones y muertes. La H3N2 es un componente de la vacuna contra la gripe de cada temporada", agrega.

La temporada 2017-2018 de gripe en los EEUU ya alcanzó la mayor intensidad desde la pandemia de 2009. Así lo informaron directivos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Con una amplia diseminación, se superaron las tasas de infección de la temporada 2014-2015, que estuvo dominada por la misma cepa de gripe, H3N2, y durante la cual, 710 mil estadounidenses fueron hospitalizados y 56 mil murieron.

Comenzó la campaña de vacunación antigripal 2018

En todos los vacunatorios públicos de la Ciudad de Buenos Aires ya se aplica la vacuna antrigripal trivalente estacional, que incluye la cepa pandémica H1N1, así como otra cepa de influenza A y otra B.

Desde el Ministerio de Salud porteño detallaron que la vacuna se aplica a:

– Niños de 6 a 24 meses;
– Embarazadas en cualquier trimestre de la gestación;
– Puérperas (hasta 10 días después del parto);
– Trabajadores de la salud;
– Personas mayores de 65 años;
– Personas entre 2 y 64 años que tengan algún factor de riesgo como obesidad, síndromes genéticos, enfermedades respiratorias crónicas, cardiopatías, diabéticos, inmunosuprimidos, oncológicos, patología renal.

Sólo los pacientes entre 2 y 64 años con factores de riesgo deberán presentar la orden médica donde conste nombre, apellido y diagnóstico por el cual se indica la vacuna, a los fines de recibirla de manera gratuita. El resto de las personas que integren los grupos de riesgo deberán acreditar la edad o el estado, por ejemplo embarazadas en el primer trimestre.

"En los grupos de riesgo la vacuna demostró ser efectiva en disminuir el riesgo de enfermarse, las eventuales complicaciones y la mortalidad", explicaron desde la cartera sanitaria, al tiempo que agregaron. "La vacuna es segura existiendo evidencia en millones de dosis aplicadas y la tasa de efectos adversos es muy baja".

Y destacaron que "independientemente de que se hayan vacunado en años anteriores, quienes integran los grupos de riesgo es necesario que reciban la vacuna antigripal que corresponde al año en curso".

Para saber dónde y en qué horarios vacunarse en la Ciudad, ingresar aquí.

En busca de la vacuna universal

Desde el Instituto Nacional de Alergia de Enfermedades Infecciosas (NIAID, por sus siglas en inglés) trabajan en desarrollar una vacuna universal de la gripe, que pueda ofrecer protección duradera para todos los grupos etarios contra las mutaciones múltiples de la influenza, incluyendo aquellas con potencial pandémico.

Los investigadores del NIAID, en el Journal of Infectious Diseases, detallaron el nuevo plan estratégico del instituto para dirigir las áreas de investigación esenciales para crear una vacuna universal segura y efectiva. Dicho plan surgió de un workshop llevado a cabo en junio de 2017, con la participación del gobierno, de la industria y de sociedades científicas quienes desarrollaron un criterio para definir la vacuna universal, identificar las faltas en el conocimiento y delinear las estrategias de investigación para adquirir esos conocimientos.

La piedra angular de la prevención estacional y pandémica de la gripe es el desarrollo de vacunas contra las mutaciones específicas virales que plantean un riesgo potencialmente importante para el público. Las vacunas estacionales se realizan anualmente para mejorar las similitud con las cepas proyectadas para circular en la próxima temporada. Sin embargo, esto posee limitaciones y dificultades. "Para reducir las consecuencias en la salud pública tanto de la influenza pandémica como la estacional, las vacunas deben tener un espectro amplio y una protección duradera", aseguraron desde el organismo.

SEGUÍ LEYENDO

Alerta gripe: comenzó a circular el virus de la influenza y aconsejan extremar cuidados a grupos de riesgo

La temporada de gripe en los EEUU tiene gravedad histórica