Lamentos, sospechas y autocríticas en Juntos por el Cambio por la negociación de leyes y cargos con Axel Kicillof

Cómo impactó la denuncia del senador Joaquín de la Torre de que en la Legislatura bonaerense se pactaron “privilegios a espalda de la gente” con el kirchnerismo. Qué estuvo en juego en las tratativas. La incógnita sobre la postura que adoptará Mauricio Macri

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"Más que halcones o palomas, parecemos pavos reales", dijo el senador provincial de Juntos Joaquín de la Torre
"Más que halcones o palomas, parecemos pavos reales", dijo el senador provincial de Juntos Joaquín de la Torre

“La razón de mi renuncia es sencilla: no podemos entregarle al kirchnerismo el Tribunal de Cuentas de manera vitalicia a cambio de un par de cargos para Juntos. Esto es buscar privilegios a espaldas de la gente. Así, más que halcones o palomas parecemos pavos reales”. El tuit de Joaquín de la Torre, senador provincial de Juntos, se está transformando en un misil que puede complicar el armado de la oposición por aparecer ante la sociedad como una opción lejana a los acuerdos entre cúpulas e implacable ante las desmesuras kirchneristas.

El ex intendente de San Miguel renunció en esos términos a la vicepresidencia segunda del Senado bonaerense y generó una nueva fisura en las filas de Juntos por el Cambio luego de la sesión en la que se votó a Federico Thea, candidato del gobernador Axel Kicillof, como nuevo titular del Tribunal de Cuentas -un puesto vitalicio- y se aprobaron las designaciones de dirigentes del PRO y de la UCR en el directorio del Banco Provincia y en la Defensoría del Pueblo. A simple vista, una suerte de toma y daca muy tradicional en la política, pero se trata de una negociación con el kirchnerismo con nombramientos en cargos públicos de por medio, algo que Mauricio Macri podría criticar porque parece lejos de los valores que viene reclamando en el PRO: “La gente quiere un cambio y nosotros tenemos que representar ese cambio”.

Por algo el ex presidente impulsó en el último almuerzo de los líderes del PRO, hace dos semanas, el voto en contra de la reforma de la Caja de Jubilaciones del Banco Provincia que se estaba negociando entre los opositores y Kicillof porque “propicia la litigiosidad”. Los últimos cambios, sancionados durante la gobernación de María Eugenia Vidal, llevaron la edad jubilatoria de 57 a 65 años y redujeron el haber para la constitución de la jubilación, que era del 82% y pasó al 75%. “Lo que pasó es que la ley de Vidal tenía muchos defectos jurídicos y por eso estaba en la mira de la Corte para ser declarada inconstitucional”, explicó un dirigente de Juntos. Para el oficialismo bonaerense, además, se sumaron las presiones para modificar la norma por parte de la Asociación Bancaria, que lidera Sergio Palazzo, un aliado de Cristina Kirchner.

La Legislatura Bonaerense votó proyectos que necesitaba Axel Kicillof y que también buscaba la oposición
La Legislatura Bonaerense votó proyectos que necesitaba Axel Kicillof y que también buscaba la oposición

La postura que promovió Macri derivó en la renuncia del intendente de Lanús, Néstor Grindetti, al Consejo Provincial de Juntos: se sintió desautorizado porque era quien negociaba con el gobierno bonaerense la reforma a la Caja de Jubilaciones del Banco Provincia. No lo hizo por iniciativa propia, aseguraron en su entorno, sino luego de haber tenido el aval de legisladores alineados con Vidal y el apoyo del PRO y la UCR. Poco después de su renuncia, Grindetti se reunió con el ex mandatario para explicarle su posición. “Tenía mala información”, dijeron.

El PRO mantuvo su negativa a votar los cambios a la reforma previsional de Vidal en el Banco Provincia, todo un emblema de su gestión porque apuntaba a quitar privilegios y recortar gastos en el Estado provincial, y ese proyecto ahora quedó trabado en la Legislatura bonaerense. Sin embargo, el líder del PRO provincial, Jorge Macri, y su par de la UCR, Maximiliano Abad, siguieron negociando con Kicillof algunos proyectos cuya sanción se había demorado desde fines de 2021 como consecuencia de la pelea interna en el Frente de Todos.

Uno de esos proyectos era el que completaba la designación de miembros del directorio del Banco Provincia y también estaba paralizado por la interna de Juntos por el Cambio. Ahora pudo destrabarse: según lo acordado entre el oficialismo y la oposición, serán nombrados Bruno Screnci, ex ministro de Gobierno porteño que fue propuesto por el diputado Diego Santilli; Santiago Nardelli, ex diputado provincial por la Sexta Sección Electoral y armador del PRO en el sur bonaerense; Carlos Fernández, ex diputado nacional oriundo de Tandil, propuesto por el radicalismo, y Laura González, una dirigente de La Cámpora de Quilmes alineada con la intendenta Mayra Mendoza.

Los líderes del PRO, tras el almuerzo en el que hablaron de la reforma a la Caja de Jubilaciones del Banco Provincia
Los líderes del PRO, tras el almuerzo en el que hablaron de la reforma a la Caja de Jubilaciones del Banco Provincia

Referentes del PRO se lamentaron en las últimas horas por el efecto negativo que tendrá la posición de De la Torre. “En realidad, las designaciones en el Banco Provincia tendrían que haberse aprobado en diciembre pasado, pero se postergaron para que no coincidieran con la votación de un proyecto antipático para la gente como el de la reelección indefinida de legisladores e intendentes, que les limitó la continuidad aunque dio la posibilidad de que compitieran por un mandato más”, señaló un legislador bonaerense de la oposición.

Lo que no estaba en la agenda legislativa era el nombramiento en el Tribunal de Cuentas, decisivo porque se encarga de controlar cómo se gastan los fondos en los municipios y en la provincia: su titular, Eduardo Grinberg, renunció sorpresivamente a fines de año luego de 35 años de gestión. Y en este tema la oposición no tiene fuerza para designar a su sucesor, por lo que Kicillof avanzó con la propuesta de llevar a ese puesto a Thea, un amigo personal que había trabajado con él entre 2013 y 2015, cuando fue ministro de Economía de Cristina Kirchner.

Sin embargo, la bancada de Juntos logró cambios importantes en la Ley Orgánica del Tribunal de Cuentas, que además del presidente se integra con cuatro vocales contadores (actualmente, dos fueron elegidos por Juntos y dos por el Frente de Todos): ahora, el titular del ente tendrá un margen de maniobra más limitado para decisiones discrecionales, por ejemplo en la ejecución presupuestaria, y los vocales podrán actuar con mayor autonomía que antes. Por eso hay autocrítica opositora: “Tendríamos que haber difundido esta reforma que mejorará el funcionamiento del Tribunal de Cuentas, pero lamentablemente quedamos asociados con una negociación que favorece al kirchnerismo -dijo un diputado-. No explicamos bien las cosas y quedamos enredados en algo que parece poco transparente”.

Los legisladores provinciales del PRO y de la UCR, resignados, sienten que “hicieron lo que pudieron” con esa ley (la Coalición Cívica votó en contra), mientras deslizan que también sufrieron presiones de los intendentes de la coalición en favor del proyecto tal como lo quería Kicillof: “Es lógico porque son los primeros que necesitan los fondos del gobierno bonaerense para la obra pública”, aseguraron.

El gobernador Axel Kicillof
El gobernador Axel Kicillof

Los mismos referentes opositores cuestionaron la postura de De la Torre. Para algunos, el senador provincial pateó el tablero porque “no consiguió los cargos que había reclamado”. Otros, más extremos, interpretaron que se trata de un primer paso que lo llevará a dejar el espacio para aliarse a Javier Milei en la Provincia, en una jugada supuestamente alentada por Macri para favorecer al líder libertario.

Ese tipo de versiones incomprobables contrastan con una certeza: aunque aseguran que estaba al tanto de las negociaciones bonaerenses, Macri debe sentirse incómodo por la forma en que quedó expuesta esta suerte de trueque legislativo con el kirchnerismo. Sobre todo porque el ex presidente viene de exigirles a sus pares del PRO que se diferenciaran del radicalismo por algunas votaciones en el Congreso de iniciativas que no coinciden con los valores del partido, como aumentar el tamaño del Estado o incrementar los impuestos. “Nunca más lo políticamente correcto, que es joder a la gente”, exclamó al hablar en la cena de la Fundación Libertad, donde también pidió “dirigentes que conmuevan y que sean el cambio, no el recambio”. ¿Qué dirá Macri sobre el voto del PRO en la Legislatura provincial?

Hasta ahora, la única opinión en el PRO sobre este polémico tema estuvo a cargo del ex senador Esteban Bullrich, a quien nadie podría acusarlo de “paloma” ni “halcón” o de ser un fundamentalista de algún lado de la grieta: “Después nos preguntamos por qué los jóvenes corren en masa a los brazos de la antipolítica. Destrabar negociaciones por cargos nos pone en la misma vereda de lo que dijimos venir a combatir -escribió en Twitter luego de elogiar la “valentía” de De la Torre-. Tenemos la obligación de ser mucho mejores que esto”.

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