Diego Santilli: “Más allá de la foto, con Manes vamos a estar trabajando juntos el domingo a la noche”

En una entrevista con Infobae, el primer precandidato de Juntos criticó al Gobierno por “una radicalización que está lejos de los problemas de la sociedad” y advirtió: “Muchos candidatos se la pasearon chicaneando, pero ninguno hizo una propuesta”

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La radicalización del Gobierno, según Diego Santilli #Entrevista

Diego Santilli ha recorrido un largo y difícil camino en los últimos tiempos. Dejó la gestión porteña, a la que conocía al milímetro, para convertirse en candidato a diputado en la provincia de Buenos Aires. Y comenzó a caminar el territorio bonaerense aun antes de que se confirmara su postulación: ya estuvo en 80 municipios y su derrotero le insumió unos 12.000 kilómetros, que promete seguir tras las PASO.

Antes de cerrar hoy su campaña electoral con un acto en el Club Atenas de La Plata, el precandidato habló con Infobae acerca de los vaivenes en la relación con Facundo Manes, su oponente de la UCR en las primarias del domingo próximo; cuenta qué lo impactó más en sus semanas de recorridas por la provincia, cuestiona a “los candidatos que se la pasearon chicaneando y no hicieron propuestas”, y hasta revela cuáles son sus preocupaciones en la relación con sus hijos y cómo lo apoya su esposa.

En medio de la apuesta más difícil de su carrera, que pondrá en juego el proyecto presidencial de su amigo y jefe político Horacio Rodríguez Larreta, Santilli también le contesta duramente a Sabina Frederic, la ministra de Seguridad, quien dijo que la tasa de homicidos en CABA creció más que en Santa Fe en 2020: “Me parece una falta de respeto. En lugar de enfrentar los problemas, como el notorio avance de los narcos en Rosario, hace un comentario de un infantilismo notable. Y además es mentira”.

-¿Por qué decidió visitar el búnker de Facundo Manes el próximo domingo pese a que él los sigue criticando duramente a Horacio Rodríguez Larreta y a usted?

-Nosotros hicimos una campaña centrada en propuestas. En caminar y escuchar a la sociedad. Jamás hicimos ataques personales ni recurrimos a las chicanas. No es lo que espera la sociedad en este momento tan angustiante y complejo de la dirigencia política. Dije que iba a pasar a saludar, como corresponde, porque en esta elección estamos compitiendo para que la ciudadanía elija quien quiere que encabece Juntos para ampliar nuestra coalición, para enfrentar los problemas estructurales de la Provincia, y luego ir unidos a ganarle al kirchnerismo en noviembre.

Diego Santilli, en una recorrida de la campaña que finalizará hoy
Diego Santilli, en una recorrida de la campaña que finalizará hoy

-¿Es tan importante tener una “foto de la unidad”?

-Más allá de la foto, lo importante es que vamos a estar el 12 a la noche trabajando juntos. La unidad de Juntos es un valor que hay que cuidar y destacar. Es la primera vez desde que gobierna el peronismo que la oposición se mantiene unida. No hay ningún margen hoy en nuestro espacio para poner en riesgo esa unidad.

-Aun después de confirmar que se verán, Manes insistió en que usted no quiere debatir y dijo en que su lista no le ganará al kirchnerismo en noviembre. ¿Qué le contesta?

-Que le vamos a ganar juntos en noviembre. Yo siento el apoyo de la gente, el cariño cuando camino los municipios y los barrios, y estoy muy agradecido. Tenemos una oportunidad este domingo de ir a votar para decirle basta a un gobierno que improvisa permanentemente, que atropella, que grita, y que no gestiona ni resuelve los problemas. Eso representa nuestra lista, las ganas de millones de bonaerenses de creer que hay salida, de quedarse a pelearla en nuestro país porque tenemos todo el potencial para salir adelante y construir un futuro mejor.

-¿Cuál sería su ranking de lo que más lo impresionó positivamente y negativamente en sus recorridas de campaña?

-Empiezo por lo negativo. El dolor de las mamás diciendo que sus hijos se quieren ir. La angustia del que lo robaron o le mataron un familiar, le entraron a su casa o le tomaron su terrenito. Se mezcla la inseguridad con la angustia de perder tu laburo, que la changa no te alcanza. Es muy fuerte lo del año y medio sin educación. Y eso cruzado trasversalmente: papás, mamás, docentes, los chicos. El otro día en Bahía Blanca me encontré con nena, Mariela, que me dijo: “Hoy es mi último día”. ¿Cómo el viernes es tu último día? Yo no entendía, pero claro tienen clases una semana sí y una semana no. Tremendo. Los problemas que arrastramos desde hace décadas son mucho más profundos. Con un corolario en el que escuchás que nuestros hijos se quieren ir del país. Y no son sólo nuestros hijos de la clase media los que se quieren ir a probar suerte a Brasil, a Australia, a Uruguay.

Diego Santilli, en un cuestionario personal #Entrevista

-¿Y lo positivo?

-Un interior pujante de la provincia con gente que tiene ganas, que sólo quiere que le saquen el pie de la cabeza en términos de impuestos, de las cargas que tiene. Que los dejen laburar, que los acompañen, que no les hagan otra vez más lo de repetir un fracaso de hace 15 años como el cepo a la exportación de la carne, pero que está, que arremete, que es laburadora, que tiene productores que están dispuestos a arriesgar, el chacarero que labura la tierra como ninguno. El polo petroquímico Bahía Blanca. El sector autopartista metalmecánico de San Nicolás, Zárate, Pilar, Campana. Vos vas viendo el Pergamino profundo, Junín, Tandil, te vas a Bahía Blanca , venís por la Costa y el distrito tecnológico en Tandil, tenés una Mar del Plata que con la gestión de (Guillermo) Montenegro es un faro en la provincia de Buenos Aires. Bajó la desocupación del 26% al 9,2, y eso es fruto de haber escuchado, haber entendido a los comerciantes, a las Pymes, haberlos acompañado en el peor momento. Eso te da unas ganas y una garra tremendas. El bonaerense quiere salir adelante. El conurbano también quiere laburar, ver un futuro mejor. Ahí es donde me cargo de energía y voy para adelante.

-“Yo no quería ser candidato y dejar la vicejefatura de la Ciudad”? ¿Usted dijo eso?

-Lo que dije es que estoy orgulloso del equipo que armamos con Horacio (Rodríguez Larreta). Primero, tengo una amistad muy importante con él, yo lo quiero, lo aprecio y aprendo todos los días. Es un hombre muy meticuloso, riguroso a la hora de trabajar. Somos muy complementarios en ese trabajo. Es difícil imaginarse lejos de la persona con la que sos compatible. Formo parte de un equipo, siempre dije que iba a estar donde mi equipo me necesitara y el lugar donde más tenemos que transformar nuestro país es la provincia de Buenos Aires. Me gustan los desafíos fuertes, y ahí estoy.

-¿Cuál fue la decisión más difícil que le tocó tomar en lo personal y en lo laboral?

-Tomé tantas decisiones en mi vida... En lo personal tuve momentos muy duros cuando mi hijo Nicanor estuvo mal y fueron momentos extremos de su vida donde había que tomar decisiones porque nada daba resultados. Tuvo sus operaciones y no podía salir del Síndrome Urémico Hemolítico. Ese fue un momento muy duro. Siempre voy a recordar a una persona que quiero mucho, Emanuel, que vino, rezó al lado de él y hoy está acá con nosotros. ¿Momentos muy lindos? Cuando me casé con Analía (Maiorana). Y en la vida profesional tomé muchas decisiones. Cuando afronto las cosas, las hago con pasión. Cuando Horacio me dijo un día: “Necesito que te hagas cargo de Seguridad”. Le contesté: “Yo voy”. “¿Por qué me elegiste a mí?”, le pregunté. “Porque me venís hablando de este tema hace un año y medio”, respondió.

Diego Santilli y Horacio Rodríguez Larreta, de campaña en Bahía Blanca
Diego Santilli y Horacio Rodríguez Larreta, de campaña en Bahía Blanca

-¿Cómo se enteró su esposa de su candidatura?

-Lo venía hablando con Analía. No fue de la noche a la mañana. Desde el minuto uno, me dijo: “Te banco en lo que quieras hacer”. Sabe que es distinto, que es otra historia, pero me banca a muerte. Y está poniendo el cuerpo, preguntándome en cada uno de los lugares de mis recorridas, donde salgo los miércoles y vuelvo los sábados, cómo estoy, cómo me trataron, qué necesito. Me encanta que eso sea así.

-¿Qué le preocupa más de la relación con sus hijos?

-No poder acompañarlos. No poder ver que ellos proyecten sus sueños. Y eso es algo que nos pasa a nosotros como país. Todos los papás y las mamás queremos que nuestros hijos tengan oportunidades y que después ellos construyan sus vidas, que tengan oportunidades. Hay muchos chicos que empiezan a darse cuenta de no tienen oportunidades acá y que quieren tener una oportunidad mejor. Tenemos que hacer que se queden acá a remarla, a pelearla, porque van a tener un futuro mejor.

-¿Está preocupado por la posibilidad de un fraude electoral?

-Estoy ocupado en que tengamos una fiscalización como corresponde, en que tengamos un equipo que esté a la altura de esta elección. Parece mentira que en el siglo que vivimos tengamos que estar discutiendo si tenemos que tener fiscales. Esta elección debería ser la última donde se vota de esta manera. O boleta única de papel o boleta electrónica, pero basta con esto. Que la gente pueda entrar y definir con un sistema de tachas o de manera electrónica. Tenemos que terminar con esto del recuento de votos. Que lo que vos decidas votar, a quien decidas votar, se sepa a las horas sin tener que tener un regimiento de personas para la fiscalización. Es anacrónico lo que estamos viviendo.

-Algunas encuestas dan como ganador a Juntos en el distrito bonaerense. En un escenario así, ¿puede estar en juego la gobernabilidad en la provincia de Buenos Aires o en el país?

-Si me guío por lo que siento y veo en la calle, tenemos una oportunidad de hacer una muy buena elección. El peronismo unido nunca perdió, pero siento que tenemos una linda oportunidad y hay que hacerlo con respeto. Lo que la sociedad espera de nosotros son propuestas. Está cansada de ver a los políticos con piquetes de ojos, patadas, peleas, y que no le responden ninguno de los temas. Muchos candidatos se la pasearon chicaneando. Ninguno hizo una propuesta. Yo hice propuestas para cada uno de los sectores. La sociedad está esperando eso de nosotros, que nos pongamos al frente y que nos sentemos en una mesa para discutir cómo generamos trabajo en Argentina. Hace más de una década que no se genera trabajo privado en nuestro país. ¿Cuándo vamos a generarlo? Porque el trabajo privado no es la megacorporación Es el ferretero, el comerciante, la pyme que arriesga y dice “voy a tomar cuatro laburantes más, voy a avanzar, voy a invertir, voy a poner otro comercio más, y otra sucursal”. Ahí es donde tenemos que focalizarnos. Entonces, ¿hay riesgo de gobernabilidad? No hay riesgo en Argentina de ninguna discusión que no tenga que ver con la democracia.

Diego Santilli: "En la Argentina parece que es gratis cometer delitos, y eso está mal" (Foto Gastón Taylor)
Diego Santilli: "En la Argentina parece que es gratis cometer delitos, y eso está mal" (Foto Gastón Taylor)

-¿Se puede radicalizar el Gobierno, gane o pierda las elecciones? Algunos creen que Cristina Kirchner podría tomar definitivamente el control y avanzar hacia posturas más extremas.

-Hasta ahora lo que ha pasado es que se fueron radicalizando. El Gobierno que empieza allí por febrero, marzo, donde convocaba a todas las fuerzas políticas, gobernadores de otros partidos, y a pesar de que pensemos distinto estábamos sentados en una mesa porque enfrentábamos una pandemia durísima para la humanidad. Después no sé qué pasó. En junio llevamos una propuesta de apertura, de una cuarentena inteligente donde escuchamos a los comerciantes que te decían “no doy más, necesito abrir la persiana”. Llevamos propuestas de cómo volvían las clases rápidamente que era lo primero que teníamos que hacer para evitar una pandemia educativa. Llevamos propuestas sobre la economía, porque en definitiva perdimos 90.000 comercios, 42.200 pymes. Son miles de puestos de trabajo. Ahora con lo de la carne empiezan las suspensiones, los despidos, las jornadas reducidas. Algo pasó.

-Pero ¿qué es lo que pasó?

-No lo sé. Pero ahí empezás a ver una radicalización o ideologización que está lejos de los problemas de la sociedad. ¿O usted cree que es ideológica la inseguridad? La inseguridad afecta al que menos tiene. El otro día fui a Villa Jardín con (Néstor) Grindetti y (Diego) Kravetz y una señora que se toma el bondi a las 5 de la mañana contó: “Salen de este pasillo y me afanan. Si no somos cinco o seis en la parada nos roban”. ¿Por qué tenés que vivir así? Para evitar la radicalización hay que convocar a resolver esos problemas, a sentarse en una mesa y enfrentar los temas de inseguridad, la falta de trabajo. ¿Cómo lo hacemos? No parece que suceda. Hay una luz en el fondo del túnel, pero no veo que el Gobierno esté encarando eso.

-¿Qué piensa sobre las afirmaciones de la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, acerca de que la tasa de homicidos en CABA creció más que en Santa Fe en 2020?

-Me parece una falta de respeto lo que dijo la ministra. En lugar de enfrentar los problemas, como el notorio avance de los narcos en Rosario, hace un comentario de un infantilismo notable. Y además es mentira: la tasa de homicidios de Rosario cuadruplica la de la Ciudad de Buenos Aires, que es la segunda capital más segura detrás de Ottawa en el continente americano.

-¿Cómo encararía usted el combate al narcotráfico?

-Poniendo a la policía en la calle. Sancionando las leyes que corresponden. El Código duerme el sueño de los justos en el Congreso. El Código que tipifica, que evita la puerta giratoria por la que un delincuente entra por una puerta y sale por la otra. El Código Penal para el endurecimiento y el cumplimiento de las condenas. Los países donde sus ciudadanos viven seguros son los países donde se detiene al delincuente, se lo condena y se cumple la condena. Acá no pasa eso, hacen un curso y se reduce la condena a un delincuente violento, a un homicida, a un ladrón a mano armada, a un narcotraficante, a un violador. Parece que es gratis cometer delitos, y eso está mal.

Diego Santilli presenta a los integrantes de su lista de diputados
Diego Santilli presenta a los integrantes de su lista de diputados

-¿Qué opina de la gestión de Sergio Berni en la provincia?

-Siempre lo dije: reconozco su actitud. Ahora, es imposible cuando tenés un gobierno que libera a los delincuentes. Entonces con la actitud no alcanza, necesitás decisión política de entender que los temas de seguridad al que más afectan es al que menos tiene. Parece mentira: se supone que tienen que representar a un sector del electorado que menos tiene y no lo hacen porque es el que más sufre.

-¿Está preocupado por la posibilidad de un alto ausentismo en las elecciones?

-Aprovecho para pedirle a la gente que vaya a votar: es importante porque el cambio empieza hoy. Si queremos cambiar, empezamos ahora. Con el que quieran decidir votar, pero empecemos ahora, participando, hagámoslo de manera cuidada. Hay que decidir por lo que quieran, pero hay que ir. En nuestro país, en las elecciones hubo un porcentaje menor de participación. Espero que no pase.

-¿Por qué no aceptó el debate con Victoria Tolosa Paz?

-Sí lo acepté. Voy a debatir cuando seamos candidatos. Pero lo más gracioso, o irónico, es que el peronismo no debate desde 1987. En este caso el kirchnerismo no debate. No quisieron debatir con Vidal. ¿Entonces son los que plantean debates? Tolosa Paz, que no hizo una sola propuesta en la campaña, me chicanea, pero por supuesto que acepto el debate. Antes de la elección de noviembre voy a estar debatiendo, cuando todos seamos candidatos. Yo soy precandidato.

-¿Qué es lo peor y lo mejor del kirchnerismo?

-Lo peor es lo de imponer, siempre echarle la culpa al otro, mirar para atrás. Me hace acordar a la camiseta que se puso Martín Tetaz, que decía “Ah, pero Macri”. O sea, la culpa es del pasado. Los argentinos tenemos problemas de muchas décadas, que es más fácil barrer abajo de la alfombra o no mirarlos en vez de enfrentarlos. Me gusta enfrentarlos. Y eso significa resolverlos. O sea, cuando agarro lo de Seguridad no es para generar un status quo sino para que la cosa cambie. No es que se arregló, porque si tengo 60% menos de motochorros no es 100%, pero tengo que trabajar en lo que me falta.

Diego Santilli, con vecinos de Florencio Varela
Diego Santilli, con vecinos de Florencio Varela

-En las décadas de tantos problemas incluye al gobierno de Macri también.

-Todos. Es un problema de la Argentina, es indiscutible. Lo peor del kirchnerismo es no escuchar, maltratar al otro, echarle la culpa al otro, imponer. También improvisar: no va más la Argentina de los parches. Hay que sentarse y resolver los temas estructurales, que son la falta de trabajo, la inseguridad, la falta de educación. A los argentinos nos hizo un país grande la educación, que igualaba las oportunidades para los chicos que iban a una escuela u otra. Hoy no pasa eso cuando tenés un año y medio sin chicos en las escuelas. ¿Por qué no volvemos a las bases, por qué no nos volvemos a ordenar como país y a organizar para ir en búsqueda del país que queremos?

-No me dijo nada bueno del kirchnerismo.

-No sé, me cuesta. Por ahí le reconozco la militancia, que es buena, sana, pero no alcanza y tampoco me parece bueno el fanatismo. Se necesitan ideas, propuestas, y se necesita ampliar, abrir los brazos, y entender que hay un país que sufre por la falta de trabajo, la falta de oportunidades, los desencuentros. Hay que terminar con esa maldita grieta que nos separa. Es insoportable vivir así.

-Igual, en la campaña porteña, ¿no fueron a buscar a Mauricio Macri y a Patricia Bullrich para tener un discurso más duro y apuntar a ese electorado para captarlo?

-No.

Elisa Carrió también se sumó a la campaña de Diego Santilli
Elisa Carrió también se sumó a la campaña de Diego Santilli

-¿La gente no pide más grieta?

-Yo no lo he hecho.

-Usted no, ¿pero no hay un sector del electorado que pide más grieta, más extremos?

-Es verdad que hay sectores más extremos, pero también que cada uno ha ocupado su lugar. Es la primera vez en democracia que la oposición se mantuvo unida y eso se logró porque cada uno hizo su tarea desde el lugar que ocupó. Los gobernadores desde el área de los gobernadores. Los presidentes de los partidos como Patricia, Maxi Ferraro, (Alfredo) Cornejo, haciendo su tarea. Los presidentes de los bloques, (Mario) Negri, (Cristian) Ritondo, Juan Manuel López. Ese es el trabajo que hay que hacer. Cada uno en su lugar y tuvimos una oposición unida que evitó atropellos sobre el Procurador, sobre la reforma judicial, temas que no están hoy en la mente de los ciudadanos y la oposición pudo parar.

-¿Cómo lo ve hoy a Alberto Fernández como presidente de todos los argentinos?

-Diría que preocupado. Aunque no pienso igual y estoy en las antípodas de lo que está sucediendo, me hubiera gustado un Presidente que en marzo convocara a dialogar a los diferentes partidos políticos, a los gobernadores, los intendentes. No sé por qué se vuelve a los extremos. No sé si es el sillón de Rivadavia, pero algo le está pasando. Lo veo distante, lejano del ciudadano. Porque si vos estás cerca del ciudadano, entendés lo que le pasa. ¿Y qué le pasa? Escucho a veces al gobernador diciendo cosas que están lejos de lo que le pasa al comerciante, al papá, a la mamá y al chico que quiere ir a la escuela, la víctima o los ciudadanos con miedo. Hay temas sobre los que no se habla.

-Si lo tuviera enfrente al Presidente, ¿qué le preguntaría?

-No, cada uno tiene su responsabilidad. En todo caso, él tiene la responsabilidad de convocar. Es el presidente de los argentinos, lo hayan votado o no. La responsabilidad está en el que conduce.

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