¿A dónde van los flujos de la industria de Fondos Comunes de Inversión?

La realidad de esta industria del mercado de capitales es un claro reflejo de la volatilidad de la plaza local, porque se va transformando en un gran termómetro del interés de los inversores

Compartir
Compartir articulo
Los Fondos Comunes de Inversión supera los $2,1 billones en activos bajo administración (Reuters)
Los Fondos Comunes de Inversión supera los $2,1 billones en activos bajo administración (Reuters)

Hoy la industria de los Fondos Comunes de Inversión supera los $2,1 billones en activos bajo administración, donde más del 50% de la estructura del mercado se los llevan los fondos de Money Market (MM). Sin embargo, el “new money” empieza a concentrar parte de interés en otras estrategias, como los fondos que apuestan a cubrirse contra la inflación (CER), o que inviertan en renta fija en pesos de corto plazo (con rescate en 24hs) -conocidos como los “Renta Fija T+1”-. El interés en estos últimos, surge del racional de buscar una mayor tasa que los fondos de liquidez inmediata, sin exponerse a la volatilidad del mercado.

De hecho, si se mira dónde fueron los flujos de marzo, se observa que más allá de los MM -que captaron casi $73.000 millones-, los Renta Fija T+1 y los CER también fueron objetivo. Algo similar a lo sucedido en febrero, o incluso enero. No obstante, los grandes perdedores de este año siguen siendo los Dólar Link. Con rescates por más de $24.700 millones en lo que va del mes, superando ampliamente los números de enero.

infobae

Ahora bien, ¿por qué los flujos siguen yendo hacia los fondos de liquidez inmediata? Una de las explicaciones más visual, está en el rendimiento directo que se viene registrando en las distintas categorías de pesos. En lo que va del mes el retorno de los T+1, e incluso los fondos de objetivo CER se mantiene en niveles similares o por debajo a los MM –con una volatilidad, como dato clave, menor; y en consecuencia, un riesgo de mercado también más bajo-.

En lo que va del mes el retorno de los T+1, e incluso los fondos de objetivo CER se mantiene en niveles similares o por debajo a los Money Market

Pero, ¿esto es suficiente para tomar una decisión de inversión? Analicemos primero cada opción, su potencial, y al perfil que más se adapta.

infobae

Primero, los fondos de Mercado de Dinero (o T+0) con Tasas Nominales Anual indicativas que se ubican en torno al 30% / 31%, producto de alguna presión levemente bajista sobre las tasas de plazos fijos -en promedio, en las últimas semanas estás bajaron de 33,5% a 33,3% anual- y el rendimiento de las cuentas remuneradas. Su volatilidad, en tanto, se mantiene por encima del 1%. Estos fondos siguen sin ofrecer una tasa real positiva (ante una inflación creciente que se espera ubique entre 3% / 4% en los próximos meses). Es por ello, que estos fondos se mantienen sólo como opción para los flujos en pesos de muy corto plazo, manteniendo como clara ventaja la liquidez inmediata que permiten. Son fondos así puramente transaccionales.

Los fondos con tasas de 30% a 31% anual siguen sin ser atractivos

Buscando un poco más de tasa, contamos con lo categoría Renta Fija en pesos T+1 (rescate en 24 horas) más conservadores -donde la liquidez puede llegar a representar más del 50% promedio de las carteras, mientras que el resto lo distribuye entre Letras, ONs o FFs, principalmente-. El objetivo es buscar minimizar el retorno real negativo que ofrecen los MM, aunque estos no logran tampoco evitar ubicarse por debajo de la inflación. Así, sus Tires indicativas van entre 32% / 34% anual, y la volatilidad promedio, aunque en ascenso, se ubica en niveles similares a los T+0 (1,4 por ciento).

Luego aparecen con estrategias un poco más agresivas, que reducen la liquidez e incorporan una mayor participación en activos con riesgo mercado -ONs, Bonos, Letras de corto plazo- y pueden incluso exponerse a futuros de dólar. Estos fondos de Renta Fija T+1 en pesos más agresivos mantienen tires indicativas que se ubican en promedio entre 38% / 39% -con máximos de 44% anual-, unos puntos más arriba de los más conservadores y de los MM.

Más que la inflación

Ahora bien, si el objetivo es ganarle a la variación del IPC del Indec, la opción son los Fondos con exposición a CER. No obstante, es necesario entender que tienen un riesgo implícito más alto de las opciones ya analizadas. Según la estrategia, pueden ir de una duration (plazo) promedio de 0.3 hasta 2.8 años –mayor a la que refleja cualquiera de los T+1-; y de acá que su volatilidad promedio se ubique entre 3% y 10 por ciento.

Sus Tires indicativas, con una curva de bonos con spread nuevamente negativos en la parte corta de la misma, promedian CER - 2%. Mantenemos igualmente nuestra visión que en el escenario actual estos fondos pueden ser una buena alternativa para inversores minoristas que busquen cobertura ante la expectativa (que convalidamos) de una inflación alta en el corto plazo -aunque la volatilidad podría ser creciente, en el marco en donde además los niveles actuales responderán con sensibilidad a cada noticia-.

Con una curva de bonos con spread nuevamente negativos en la parte corta de la misma, promedian CER - 2%. Mantenemos igualmente nuestra visión que en el escenario actual estos fondos pueden ser una buena alternativa para inversores minoristas (Reuters)
Con una curva de bonos con spread nuevamente negativos en la parte corta de la misma, promedian CER - 2%. Mantenemos igualmente nuestra visión que en el escenario actual estos fondos pueden ser una buena alternativa para inversores minoristas (Reuters)

Por último, los Fondos Dólar Linked (DL). Estos como su nombre lo indica, buscan como objetivo una cobertura contra un salto del tipo de cambio oficial. Su estrategia -que viene siendo muy dinámica- puede basarse en el armado de sintéticos, o activos con ajuste por el tipo de cambio (ya sea corporativos o soberanos), incluso -y dentro de las posibilidades de las regulaciones- algunas carteras han incorporado activos en moneda dura.

Pero, las expectativas de que el Gobierno logre “pisar” un ajuste en el tipo de cambio -o al menos, una aceleración en la tasa de devaluación-, hasta después de las elecciones llevó a esta estrategia a perder atractivo de corto plazo. La caída en el ritmo de devaluación en las últimas semanas, de hecho, sirvió como fundamento, aunque no se descarta este contexto como un buen punto de entrada a esta estrategia.

SEGUIR LEYENDO: