La emotiva reacción de su madre y el orgullo del barrio: los sueños cumplidos del Perrito Barrios por ser convocado a la Selección Sub 23

La Selección Sub 23 se mueve bajo las órdenes del cuerpo técnico encabezado por Fernando Batista. Pese al sol radiante, la temperatura oscila entre los seis grados, lo que justifica los buzos, cuellitos térmicos y calzas largas de la mayoría de los jugadores.

La práctica matutina comienza con unos movimientos de tenencia en espacios reducidos y entre los integrantes del equipo con pechera naranja se destaca uno. Su gambeta corta en velocidad y sus 156 centímetros de altura lo hacen inconfundible: se trata de Nahuel Barrios, el Perrito.

El talento del joven punta de San Lorenzo no es una novedad ya que, titular en cuatro de los cinco partidos que lleva la Superliga, es una de las figuras del elenco dirigido por Juan Antonio Pizzi, único puntero. Lo que sí es novedoso es verlo con los colores celeste y blanco.

"Nunca me habían llamado de la Selección, no se me había dado. Este es el primero y la verdad que lo tomé con tranquilidad, pero también con mucha felicidad. Ahora tengo que estar preparado para las circunstancias y dar lo mejor de mi", le contó a Infobae en un mano a mano en las instalaciones del predio que la AFA posee en Ezeiza.

Claro que como toda gran sorpresa, la convocatoria al Perrito le llegó de manera inesperada ya que si bien la AFA informó la nómina de citados el 18 de agosto, el diestro de 21 años fue confirmado este lunes, el mismo día en el que el plantel comenzó con sus entrenamientos. Es así que el Perrito explicó su reacción: "Estaba con mis hermanos en mi casa y me llegó un mensaje de parte de San Lorenzo para avisarme que me habían convocado. No lo podía creer, siempre había esperado este momento y por suerte llegó".

Luego de digerir la noticia y unirse en un abrazo con sus hermanos, Barrios no dudó en agarrar su celular y llamar a su madre para compartir la feliz novedad. Aunque la emoción fue tanta que se vio obligado a ir inmediatamente a visitarla. "Fui corriendo para su casa, estaba muy contenta y se me puso a llorar. Me causó mucha felicidad y me llenó de orgullo verla así", describió con una sonrisa de oreja a oreja en su rostro.

Una vez que se hizo pública la citación, el Whatsapp de Barrios no tardó en explotarle de mensajes felicitándolo. Unos de los primeros fueron sus amigos de Dock Sud, lugar en el que Nahuel nació, vivió y se formó como persona y jugador de fútbol. "Mis amigos estaban muy contentos, me dijeron que era un orgullo para el barrio que un pibe de ahí llegue", confesó, aunque también agregó que el típico mangueo de la vestimenta con el escudo de la AFA no tardó en llegar. "Me pidieron ropa, que por lo menos les guarde las medias. Voy a tratar de hacer lo posible", dijo entre carcajadas.

Más allá de la broma, el Perrito se pone serio a la hora de hablar de su lugar de procedencia, uno de los sitios más vulnerables del conurbano bonaerense. Si bien pudo brindarles una mejor calidad de vida a su familia desde que firmó su primer contrato con el Ciclón en 2017, el futbolista no olvida el lugar donde residió hasta los 18 años y desde donde viajaba casi dos horas en colectivo para entrenarse en la institución del Bajo Flores.

"No hay que olvidarse de donde uno salió y se crió. Yo tengo a mis amigos ahí y voy bastante. Por suerte siempre me reciben bien y me llevó muy bien con todos", destacó.

Será, quizá, que por el lugar de donde viene, hoy agradece donde está y lo disfruta, aunque todavía le cuesta asimilarlo del todo. "Apenas llegué al predio y me dieron la ropa no lo podía creer, me miraba el escudo, todo el lugar. Es algo que siempre soñé y no se me daba. Por suerte lo pude cumplir y me saqué la espina. Ahora lo tengo que aprovechar al máximo", confirmó.

Barrios no dudó en responder por qué cree que fue llamado por Batista: "Las cosas que uno hace en cada partido y cómo se me está dando todo en San Lorenzo, teniendo continuidad y buenos partidos, hicieron que el DT tenga confianza en mi. Ahora tengo que devolvérselo dejando todo en cada entrenamiento y en cada partido, si es que me toca jugar, pero voy a aportar desde cualquier lugar".

Al no haber formado nunca parte de este ciclo, en el que se viene trabajando hace tiempo y se disputaron el Sudamericano y Mundial Sub 20 y el Panamericano Sub 23, el Perrito se debió sumar a un grupo ya conformado. Sin embargo, eso no fue un problema ya que fue recibido de la mejor manera. "Me encontré con un grupo muy bueno, tanto en lo personal como en lo futbolístico. Me hicieron entrar en confianza rápido y me sirvió para sentirme cómodo. Tengo que aportar mi granito de arena", destacó.

El pibe nacido en 1998 sabe que este tipo de oportunidades deben aprovecharse al máximo, es por eso que admitió "no tener problema en jugar por las dos bandas", aunque se siente "más cómodo por la izquierda".

La edad de Barrios no condice con su recorrido ya que acumulas más de dos temporadas completas con la Primera y suma 51 partidos oficiales. Ese rodaje lo llevó a evolucionar como jugador. "En este tiempo acumulé mucha experiencia, muchas cosas. Me cambió al mentalidad a la hora de jugar, aprendí cuándo hacerlo a un toque y cuándo encarar. Todo los conocimientos que adquirí hasta hoy me sirven muchísimo", reconoció.

El tiempo llega a su fin. El Perrito debe volver con sus compañeros para ir a almorzar y luego encarar el segundo turno de entrenamientos. Este miércoles les espera el primer amistoso ante Bolivia (desde las 19 en el Estadio de Banfield), luego se medirán ante Colombia y Boca. Es así que el jugador se despide no sin antes confesar su deseo: "Mi objetivo con la Selección es poder disputar estos partidos y estar en las competencias que se vienen. Esta camiseta es muy linda y es con la que sueña todo jugador. Ojalá se me pueda dar y esté a la altura".