Mario Molina contradice a López-Gatell sobre el impacto del cubrebocas; el subsecretario no cede

Mario Molina, nobel de Química 1995, recomendó el uso obligatorio de cubrebocas, pues el científico recién participó en una investigación donde se demostró que esta medida tuvo un impacto directo en reducir la tendencia del COVID-19. Con ello, el ingeniero químico contradijo la poca relevancia que Hugo López-Gatell ha atribuido a esta disposición.

El Nobel mexicano asistió a la conferencia diaria de Claudia Sheinbaum, jefa del gobierno capitalino; ahí el científico comentó del trabajo en que contribuyó con sus colegas de la universidad de Texas y de California, un análisis estadístico que reveló cómo la protección facial obligatoria fue un factor determinante en reducir los contagios de coronavirus en Italia y Nueva York.

En Italia, el uso obligatorio de cubrebocas disminuyó en más de 78,000 el número de infectados en un periodo considerado entre el 6 de abril y el 9 de mayo pasado. Mientras que en Nueva York, la instauración de la mascarilla previno más de 66,000 contagios del 17 de abril y al 9 de mayo.

Por su parte, Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud, se mantuvo firme en implementar la obligatoriedad de la medida, pues consideró difícil determinar el impacto en los contagios en relación con el uso individual del cubrebocas.

El funcionario federal informó que el propio Mario Molina le envió el estudio un par de días previos a su publicación en la revista PNAS (Proceedings of the National Academy of Sciences), mismo que revisó. Pero López-Gatell señaló que el análisis tiene limitaciones en la fuente de información, debido a que es muy extensa.

“Es un reto muy importante, en términos científicos, evaluar el impacto de un fenómeno que requiere un uso poblacional [...] en este caso, también, como toda publicación científica, como todo estudio tiene algunas limitaciones, sobre todo por la fuente de información que es muy macro, hace una síntesis de la información que proviene, por ejemplo, de qué tanto se utilizaron las medidas, él hace una comparación entre lugares geográficos que tuvieron indicación de uso de cubrebocas o no lo tuvieron y que lo tuvieron a distintos tiempos, pero obviamente es un gran reto, y el propio artículo lo discute, el poder documentar lo que separa entre la indicación de uso y el verdadero uso en la población que justamente hemos comentado, es uno de los retos más grandes”, comentó López-Gatell en la habitual conferencia vespertina para informar del avance del coronavirus en México.

Horas antes, Mario Molina había referido que el impacto del cubrebocas fue sustancial en reducir las infecciones, incluso recomendó su uso al presidente Andrés Manuel López Obrador, a los líderes mundiales y a la población en general.

“Nosotros lo que demostramos es que son muy importantes el uso de las máscaras, no nada más si estoy enfermo para no pasarle las gotas a otras personas, sino, simplemente al hablar, para que no contamine yo a los que están, ni siquiera tienen que estar muy cerca, es como el humo del cigarro pues si están en algún restaurante a veces les llega [...] está clarísimo que en Asia y China pidieron el uso de cubrebocas desde el principio, por eso no subió mucho la infección”, dijo el egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México.

A su vez, el Ingeniero Químico argumentó que sustentaba sus recomendaciones en base científica, el mismo artículo “revela que la diferencia con y sin el uso obligatorio de los cubrebocas representa la medida determinante para darle forma a las tendencias de la pandemia”. Aunado a esto, la publicación especializada indica que otras medidas como guardar sana distancia, la cuarentena y quedarse en casa, son insuficientes para proteger a la ciudadanía.

“Nosotros tenemos observaciones, no nada más es una idea, tenemos observaciones estadísticas comprobables que correlacionan el cambio de la tendencia de la infección y de las muertes se asocian muy claramente con el día en que es obligatorio usar los cubrebocas”, comentó Mario Molina en conferencia virtual.

López-Gatell ha reiterado que el uso de mascarillas para proteger nariz y boca no es tan determinante como el resguardo voluntario. Aun cuando aceptó el uso “adecuado” de esta prenda de bioseguridad, el subsecretario de Salud sólo se mostró con cubrebocas el 25 de mayo pasado, cuando informó que la medida sería auxiliar en la llamada “nueva normalidad”.

El mismo AMLO se ha mostrado renuente a usar tapabocas porque, según el mandatario, lo consultó con López-Gatell, y éste no se lo había recomendado.

“No me pongo el cubrebocas porque no me lo recomienda Hugo, le pregunté y él ya tiene una explicación sobre eso, pídansela. Entonces yo le hago caso”, dijo el mandatario en su conferencia matutina del 29 de abril pasado.

Unas horas después de ese comentario, el subsecretario de Salud publicó un video en sus redes sociales, en el que explicaba que usar cubrebocas no era más importante que el confinamiento domiciliario. Expresó además que el mal uso de la mascarilla contribuía a una falsa confianza, es decir, a creer que se estaba protegido.

“El cubrebocas puede ser un elemento complementario, pero lo más importante es quedarse en casa para no contagiar [...] el cubrebocas puede ayudar, úselo si quiere, pero no es una medida que garantice que usted no se vaya a contagiar”, explicó López-Gatell en aquella ocasión.

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