Quién es Nayla Micherif, la "Miss Brasil" involucrada en el caso de la mansión swinger de Punta del Este

La ganadora de la edición 1997 del certamen de belleza y su marido, el empresario brasileño Ronosalto Pereira Neves, figuran como propietarios de la casona ubicada en el exclusivo barrio de Beverly Hills

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La Justicia ordenó el allanamiento de la mansión swinger de Punta del Este seis días después del arresto de Lulukhy Moraes, de 38 años, principal sospechosa del asesinato de su ex esposo, Edwar Alexis Vaz, que murió a los 45 años el pasado 9 de julio.

Los vehículos policiales inspeccionaron la totalidad de las instalaciones de Gipsy Queen el pasado viernes a la mañana. Entre otras cosas, encontraron documentos que evidencian que Lulukhy la vendió en 2013 a la ex modelo brasileña Nayla Micherif y a su esposo, el empresario Ronosalto Pereira Neves. La operación se concretó por 1,25 millón de dólares.

Micherif fue Miss Brasil de 1997
Micherif fue Miss Brasil de 1997

A pesar de que siempre estuvo a cargo de la mansión, y de que ella aseguraba haberla construido en 2004, Lulukhy nunca figuró como su propietaria. Antes de la venta, estaba a nombre de Leticia, su "compañera de vida", con la que organizaba las fiestas sexuales.

En una declaración al diario El País de Uruguay antes de ser arrestada, reconoció que se la habían vendido a un magnate brasileño. Pero con una curiosidad: éste la habría contratado para que continúe como "administradora".

Nayla Micherif nació en 1976 el municipio de Ubá, estado de Minas Gerais. Tras una carrera meteórica en el modelaje, alcanzó su pico de fama en 1997, cuando ganó el concurso Miss Brasil, que le permitió participar del certamen Miss Universo.

Aunque retirada de las pasarelas, Micherif continuó vinculada al mundo de la moda y de la farándula. De hecho, entre 2002 y 2011 fue directora administrativa de Gaeta Promoções e Eventos, empresa responsable de la realización de Miss Brasil.

Estuvo a cargo del certamen por muchos años
Estuvo a cargo del certamen por muchos años

Su gestión en la competencia no estuvo exenta de polémicas. Sus críticos sostienen que fue el período en el que peor le fue a las concursantes brasileñas en Miss Universo. Además, fue denunciada por fraude en la nominación de algunas postulantes.

Esos cuestionamientos la llevaron a dejar el cargo y a ir alejándose de los medios. A fin del año pasado, bloqueó sus cuentas en las redes sociales, que antes eran públicas.

Compró la mansión swinger junto a su esposo en 2013
Compró la mansión swinger junto a su esposo en 2013

En sus distintos perfiles tenía fotos con celebridades de todo el mundo, como el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que fue dueño de Miss Universo. También se mostraba con el artista uruguayo Carlos Páez Vilaró, fallecido en 2014.

Pagaron USD 1.250.000 por la mansión
Pagaron USD 1.250.000 por la mansión

Un crimen con muchos puntos oscuros

Vaz fue asesinado por dos sicarios de un tiro en la cabeza. El hombre que los llevó hasta su casa en la avenida Lavalleja, en pleno centro de Punta del Este, apuntó contra Lulukhy tras haber sido detenido. Es Albañil, tiene 25 años, y trabajaba para la mujer. Había sido convocado por ella un día antes del crimen, con la excusa de instalar unas baldosas.

"Me pidió que el lunes no le falle. Que venían dos muchachos de Montevideo para darle un susto a su ex marido", le contó a la Policía. Esa declaración fue determinante para el arresto de Lulukhy.

Estuvieron casados entre 1997 y 2016, aunque vivieron juntos al menos un año más. "Tenía un mal vínculo con su ex marido", dijo el albañil.

También se fotografió con el artista Carlos Páez Vilaró
También se fotografió con el artista Carlos Páez Vilaró

Martín Etcheverry, abogado de Vaz, contó que en los días previos al crimen había estado trabajando en una demanda civil por 1,5 millón de dólares contra la ex esposa de su cliente. Era una disputa que se remontaba al divorcio y a una presunta estafa en la división de bienes.

Etcheverry sostiene que Lulukhy se quedó de manera ilegítima con 750 mil dólares, un departamento de 200 mil dólares, un Mercedes Benz SL 350 2011 declarado en 90 mil dólares, una 4×4 y otro auto más. Para ello, había acudido a una trampa: poner todo a nombre de Leticia.

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