Arthur Hanlon, íntimo: “Crecí en una casa con cinco mujeres y le debo mi carrera a mi abuela”

El eximio pianista dialogó con Teleshow y contó cómo surgió Piano y Mujer II, el álbum que editó con la participación de Ivy Queen, Ha*Ash, Catalina García, Debi Nova y Lupita Infante

Compartir
Compartir articulo
Arthur Hanlon habló con Teleshow de Piano y Mujer II

“Un piano y una voz femenina son una combinación ideal”, explica Arthur Halon. Después del éxito de Piano y Mujer, el álbum que grabó en plena pandemia junto a Kany García, Natalia Jiménez, Goyo, Evaluna Montaner y Nella, el pianista nacido en Detroit, Michigan, Estados Unidos, presenta la segunda edición de esta propuesta de Sony Music y HBO para la que convocó a figuras de la talla de Ivy Queen, Ha*Ash, Catalina García, Debi Nova y Lupita Infante. Y, en diálogo con Teleshow, contó cómo surgió este proyecto y de dónde nació su amor por la música latina.

—¿Qué puede contar de este nuevo trabajo?

—El año pasado salió Piano y mujer I. Tres meses después, me llamó la gente de HBO y, simplemente, me dijo: “Arthur, está saliendo muy bien y queremos otro ya”. Entonces yo contesté: “Dejenme pensar, no estoy seguro...” No, mentira. Yo respondí muy gratamente que sí, claro. Es un honor. E, inmediatamente, pensé en chicas que dieron mucho como Lupita, como Cata, como Ivy Queen, como Debi Nova y como las Ha*Ash.

—El álbum anterior se había grabado en plena pandemia, ¿en qué momento se hizo este?

—Me llamaron hace más o menos seis meses y yo me puse a trabajar enseguida, porque era un poco complicado. Yo tenía en mente a quienes quería convocar. Pero, más allá de eso, como la propuesta es pura y honesta, es piano y voz femenina, hay que conectar con las chicas. Porque, si no, la gente se da cuenta si es falso. Si yo estoy grabando solo en Miami, por ejemplo, y Cata en Colombia, el público lo nota. Entonces, nos juntamos en mi casa, comemos pan de mono con cafecito, e hicimos flow para buscarle la magia a la música. Y salió así.

—¿Alguna dudó en aceptar o todas dijeron que sí rápido?

—Gracias a Dios, todas dijeron que sí. Porque yo hago algo diferente, pero para mí esa es la magia del proyecto también. Lupita hace mariachi, pero en este caso hace piano y mujer. Ivy Queen es reggaetonera. Cata es más pop. Y las Ha*Ash, las hermanas, hacen un country mexicano. Entonces fue algo distinto para todo el mundo, incluyéndome a mí por el hecho de estar tocando solo con mujeres. ¡Hasta en la banda, que es especial, está conformada por mujeres también! Fue alucinante de verdad, todo el proceso.

—Usted ya había hecho colaboraciones con muchos artistas, ¿la decisión de grabar solo con voces femeninas tiene que ver con el cambio que hay en la sociedad con respecto a la lucha por los derechos de las mujeres?

—Eso es muy importante para mí. Fijate que yo crecí en una casa con cinco mujeres. Tengo tres hermanas, mi mamá y mi abuela. Y todas las noches, después de comer, yo estaba practicando en mi piano de chiquito. Y era mi abuela la que estaba sentada escuchándome, apoyándome y diciéndome que sí se puede. “Dale, dale, dale”, me repetía. Así que yo tenía este proyecto en mente desde hacía mucho tiempo. Y, cuando empezó la pandemia, le dije a Sony: “Ahora sí es un buen momento para sacar algo que es totalmente diferente”.

—Habiédose criado en una familia tan femenina, ¿igual tuvo que cambiar algunos conceptos de los que tenía aprendidos?

—Yo creo que sí, como todos. Especialmente el mundo de la música era muy masculino. El reggaeton, por ejemplo, tenía muchísima testosterona. Lo mismo pasaba con los mariachis y para Lupita fue muy difícil cantar como mujer. Así que yo admiro eso. Y creo que tuvo que ver con la magia de este proyecto, porque no sólo son mujeres con mucho talento, sino también mujeres fuertes y con mucha creatividad e inteligencia para sobrevivir en la industria y ser exitosas.

—Hoy las mujeres empezaron a pisar fuerte en todos los géneros musicales...

—Claro. Mi abuela ya no está con nosotros. Pero yo pienso en ella todos los días para decirle: “Gracias abuelita por apoyarme y empujarme”. Porque si hoy estoy con estos dos especiales de HBO, en gran parte es por ella.

Arthur Hanlon grabó junto a Ha*Ash en Piano y Mujer II (Instagram)

—Siendo un ciudadano norteamericano, ¿de dónde surgió su interés por la música latina?

—Mi historia es rara, porque mis papás son irlandeses. Ellos emigraron a los Estados Unidos y yo crecí en Detroit, con una pasión por el piano. Pero mi papá me dijo: “No quiero músicos en esta casa. Somos inmigrantes y nosotros tenemos que trabajar. Así que tu tienes que trabajar como tus seis hermanos”. Y yo le dije: “Papi, lo único que yo quiero es la música”. Finalmente, me dice: “Ok, hagamos una cosa. Trata de entrar en Nueva York, al Manhattan School of Music”. Es uno de los mejores conservatorios del mundo. “Si entras, hablamos”, me dijo. Y gracias a Dios, me aceptaron. Pero lo que él no sabía era que ese conservatorio queda en un barrio cien por ciento latino. Es un barrio de boricuas, de colombianos, de dominicanos...Entonces, como compositor joven, yo me la pasaba escuchando merengue, salsa y bachata en todos lados....

—Entiendo.

—Pasé gran parte de mi vida tocando en clubes de Detroit, pero después comencé a tocar en clubes latinos. ¡Y aquí estoy!

—¿Cómo tomaron esto en su casa? Porque no sólo se dedicó a la música, sino que se dedicó a la música latina...

—Según mi mamá, me convertí en doctor Jekyll y el señor Hyde, tocando música clásica durante el día y en clubes latinos por la noche. No fue fácil. Pero cuando terminé firmando con un sello en Los Ángeles, eso cambió todo el escenario con mi familia.

—¿O sea que cuando vieron que esto también era una salida laboral se tranquilizaron?

—Exacto. En mi tercer disco, la canción Mi gorda linda llegó al número uno en los charts. Después de eso, todo cambió con mi carrera y con mi familia. La música es como el deporte, no es fácil. Y yo entiendo la postura de mi padre. Pero no tengo plan “B”, yo soy cien por ciento músico y compositor.

—¿No hubiera podido dedicarse a ninguna otra actividad?

—En Nueva York hubiera podido ser abogado, doctor, contador...Y no, yo soy músico. Mi piano es mi mejor amigo. Es mi psicólogo, mi amante, mi esposa: es todo para mí.

—Dice que el piano es todo, ¿le cuesta tener una vida común, pareja e hijos siendo músico?

—Es diferente y hay que pensarlo mucho. En la casa yo soy papá. Y cocino, porque me encanta. Pero cuando estoy tocando, que me la paso en aviones o dando entrevistas, es otra cosa. Así que hay que lograr un balance. Pero no es imposible. Y ahora estoy muy contento con lo que está pasando con mis música. En medio de la pandemia me llamaron de Sony para decirme que mis discos se estaban escuchando en todas partes del mundo por el auge que hoy tienen los ritmos latinos. Y eso fue increíble.

—Imagino que ahora se vendrá una gira, ¿verdad?

—Ya grabé un especial de Navidad que va a salir en dos semanas. Y ya estamos hablando con varios empresarios de Colombia, Argentina, México y Estados Unidos, para llevar Piano y Mujer en vivo el año que viene. Eso sería espectacular para celebrar esta música.

Seguir leyendo: