Por primera vez, el streaming superó a la televisión por cable y abierta en Estados Unidos, posicionándose como la principal vía de consumo de contenido durante mayo de 2025, según datos recopilados por Nielsen. Este punto de inflexión, en parte consecuencia de los hábitos adquiridos durante la cuarentena, marca un cambio claro en las preferencias de los usuarios, quienes ahora se inclinan por contenidos bajo demanda.
Este nuevo panorama obliga a anunciantes y creadores de contenido a replantear sus estrategias, ya que el predominio del streaming está transformando la industria televisiva. Además, esta tendencia genera una competencia creciente entre plataformas, que buscan captar y mantener la fidelidad de los suscriptores en un entorno cada vez más disputado.
El streaming supera por primera vez a la televisión tradicional en Estados Unidos
El grupo de personas mayores de 65 años en Estados Unidos ha comenzado a consumir contenido digital de manera similar a las generaciones más jóvenes, lo que ha impulsado el dominio de los servicios de streaming sobre la televisión tradicional. Según informó Nielsen, durante el mes de mayo de 2025, las plataformas de streaming como YouTube y Netflix lograron captar el 45% de la audiencia televisiva, superando por primera vez la suma total de espectadores de la televisión por cable y los canales de señal abierta, que juntos alcanzaron el 44%.
De acuerdo con los datos publicados por Nielsen, empresa multinacional en medición de audiencias, datos y análisis, este cambio representa un hito en la historia del entretenimiento en casa, ya que nunca antes el streaming había superado a la televisión tradicional en la preferencia de los televidentes estadounidenses.
Aunque la diferencia entre ambos formatos es de apenas un punto porcentual, la tendencia muestra un crecimiento sostenido del streaming y un descenso constante de la televisión por cable y abierta. En 2021, cuando la empresa comenzó a comparar ambos tipos de consumo, el 66% del tiempo de pantalla correspondía a la televisión tradicional, mientras que el streaming solo representaba el 26%. Ahora, la situación se ha invertido completamente.
Nielsen detalló que este cambio de paradigma se ha visto acelerado por la adopción masiva de las plataformas digitales por parte de los baby boomers. Este grupo demográfico, que históricamente ha sido el que más tiempo dedica a ver televisión —generando un tercio del tiempo total frente a la pantalla—, ha migrado en los últimos años hacia el streaming, con una preferencia marcada por las plataformas gratuitas y sin suscripción. Entre las opciones más populares para este segmento se encuentran YouTube, Tubi, Roku y Pluto.
El crecimiento de YouTube entre los boomers ha sido especialmente notable. Según consignó la empresa multinacional, el tiempo de visualización de esta plataforma por parte de los mayores de 65 años aumentó un 106% en comparación con mayo de 2023. Este nivel de consumo iguala al de los niños menores de 11 años, otro grupo que dedica una parte considerable de su tiempo a ver televisión y, en particular, a navegar por YouTube.
Mientras tanto, la televisión por cable ha experimentado una caída significativa en su audiencia. En los últimos cuatro años, la cantidad de espectadores de este formato disminuyó un 39%. Los analistas atribuyen este descenso a la estrategia de varias cadenas, como USA Network, TBS y MTV, que han reducido la producción de contenido original y han optado por retransmitir maratones de series antiguas como Law and Order y The Office, así como películas reconocidas como Tiburón.
En el caso de los canales de televisión generalista, la reducción de espectadores ha sido menos abrupta, con una caída del 20%. Sin embargo, Nielsen señala que incluso los grandes eventos transmitidos por estos canales están perdiendo exclusividad, ya que cada vez más se comparten con las plataformas de streaming. Un ejemplo de esta tendencia se observó en el último Super Bowl, que se transmitió tanto por Fox como por Tubi, y en la ceremonia de los Oscar, que estuvo disponible en vivo a través de Hulu además de ABC.
La transformación en los hábitos de consumo de contenido audiovisual no solo responde a la oferta tecnológica, sino también a la demanda de los distintos grupos etarios. La preferencia de los boomers por plataformas gratuitas y sin suscripción ha impulsado el crecimiento de servicios como Tubi, Roku y Pluto, que han sabido captar a un público tradicionalmente fiel a la televisión abierta y por cable.
El impacto de este fenómeno se extiende a la programación de las cadenas tradicionales, que han debido ajustar sus estrategias ante la disminución de su audiencia. La decisión de priorizar la retransmisión de contenidos ya emitidos respondería a la dificultad de competir con la variedad y flexibilidad que ofrecen las plataformas digitales.
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