El primer iPod vio la luz el 23 de octubre de 2001. En ese entonces, Apple lanzaba un pequeño dispositivo donde se podía reproducir música de otra manera. Una vez más el gigante de Cupertino marcaba el rumbo tecnológico.
Hoy, 15 años después de aquel histórico día el iPod para muchos es un artículo del pasado. Lejos está de ser una prioridad de la compañía que, hace dos años, retiró del mercado el modelo clásico.
Sin embargo, vale la pena hacer un recorrido por algunas de las modificaciones que fue experimentando este producto que marcó un antes y un después en la forma de consumir música. Sin dudas, un dispositivo que muchos recuerdan con cariño y que, incluso, todavía algunos usan.
El modelo original, lanzado en 2001, tenía 5GB de memoria, y una rueda en la parte central desde donde se operaba el equipo. La segunda generación incluyó una versión táctil de ese control de mando.
El iPod Mini, que se comenzó a comercializar en 2004, era, tal como indica su nombre, más finito y pequeño. Venía con 4 o 6 GB de memoria y se ofrecía en varios colores.
La cuarta generación (2004) tenía la pequeña ruedita que se operaba con tan solo presionar.
El iPod Shuffle original (2005) fue el primer modelo en incorporar la memoria flash. Era alargado y no tenía pantalla.
La quinta generación de iPod sumó una pantalla más grande, ya que la compañía apostó al contenido en video.
El iPod Classic de 2007, la última reversión del original, tenía una carcasa de aluminio y ofrecía 160 GB de almacenamiento. Fue el iPod con mayor capacidad que se hizo y se descontinuó en 2014.
El iPod Touch, lanzado en 2010, tenía hardware más potente, un nuevo diseño y parlante. A su vez, la cuarta generación del touch añadió cámara trasera y frontal para FaceTime.
La quinta generación de iPod Touch (2015) sumó muchas variantes de colores en la carcasa. Y la sexta generación mejoró "la maquinaria" e incorporó el procesador A8.