Allanaron el estadio de Rosario Central por una causa contra Pillín Bracamonte, el lider de la barrabrava asesinado

El estadio de Rosario Central fue el protagonista este jueves de una actividad que nada tiene que ver con lo deportivo, sino con lo judicial. Agentes de la PSA llegaron al Gigante de Arroyito para ejecutar un allanamiento ordenado por la Justicia rosarina, en el marco de una causa por lavado de activos contra Andrés “Pillín” Bracamonte, el jefe de la barra brava asesinado el 10 de noviembre pasado en cercanías del club, tras un partido contra San Lorenzo.

Fuentes del caso indicaron a Infobae que el expediente contra el barra ya lleva varios años, incluso, puntualizaron que es de 2020.

De esa investigación, se desprendió una nueva por administración fraudulenta en perjuicio del Club Atlético Rosario Central por medio de maniobras llevadas adelante entre Bracamonte y el Intendente del Club, detallaron. Pese a la muerte de “Pillín”, la causa continúa su avance.

En esta oportunidad, se secuestró dinero en efectivo, del cual se verificará el origen, como así también teléfonos celulares, computadoras y documentación, indicaron las fuentes a este medio.

Todos los elementos incautados serán analizados por la Unidad de Delitos Económicos, a cargo del fiscal Miguel Salvado Ernesto Moreno, titular de la Fiscalía del Área Económica de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos del Ministerio Público de la Acusación.

Andrés Alejandro “Pillín” Bracamonte, el jefe de la barra brava de Rosario Central, fue asesinado a tiros en la noche del 10 de noviembre pasado en las inmediaciones del Gigante de Arroyito, después del partido en el que el Canalla perdió de local por 1 a 0 ante San Lorenzo.

Daniel “Rana” Atardo, otro referente del paraavalanchas que estaba junto a él, también falleció en el Hospital Centenario como consecuencia de los disparos.

“Pillín” estaba en una camioneta blanca junto a Atardo, al momento del ataque. Testigos publicaron a través de la red social X que se escucharon entre siete y diez tiros en Avellaneda al 700 bis, a metros de hinchas que salían del estadio y de un conocido bar del barrio de Arroyito, donde había gente cenando.

El fiscal de Homicidios Dolosos Alejandro Ferlazzo dio las primeras directivas a la Policía de Investigaciones para la toma de testimonios, levantamiento del material balístico y relevamiento de cámaras de videovigilancia.

Días antes de su asesinato, había comenzado un juicio en su contra por violencia de género, causa por la que le pidieron 2 años de prisión efectiva y, en este 2024, ya lo habían baleado. Fue el 10 de agosto pasado, cuando en el Parque Alem, a metros de la cancha de Central, lo atacaron desde una moto. Un disparo le rozó la espalda y otro hirió a su pareja en el brazo derecho.

Hace meses que investigadores policiales sabían que había comenzado una interna en la barra brava Canalla, donde se señala a una estructura que vende droga al menudeo en la zona noroeste de Rosario como la que quiere “copar” el paraavalanchas”.

Se presume que en el marco de esa interna mataron el 1º de octubre pasado a Samuel Medina (24), alias “Gordo Samu” o “Gordo Quique”, pareja de la nuera del líder de Los Monos, Ariel Máximo “Guille” Cantero, quien recibió 16 disparos mientras manejaba un Polo blanco por la zona norte después de la victoria de Rosario Central ante Vélez por 3 a 0.