El coronavirus demora el desfile de víctimas en la causa del espionaje ilegal en Lomas de Zamora

Mientras tanto, la causa de Villena sigue adelante con otras diligencias y en la comisión bicameral aparecen más datos

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La entrada del juzgado de Lomas de Zamora (foto Maximiliano Luna)
La entrada del juzgado de Lomas de Zamora (foto Maximiliano Luna)

El intendente de Lomas de Zamora Martín Insaurralde, víctima del espionaje ilegal que investiga el juez Federico Villena, fue el primer contagiado de coronavirus. Después, le tocó ser COVID positivo a la ex gobernadora María Eugenia Vidal. Y ahora quedaron “guardados” por 15 días, aunque sus estudios iniciales dieron negativos, los ex diputados del PRO Nicolás Massot y Emilio Monzó, que tenían previsto presentarse hoy ante en los tribunales para conocer las pruebas de los seguimientos en su contra -algunas de las cuales fueron detalladas por Infobae-.

Así, imprevistamente, el coronavirus frenó el desfile de las víctimas por el juzgado. Hugo Moyano, líder histórico de los camioneros, tenía que ir el miércoles con su hijo Pablo al juzgado, pero pidió suspender la audiencia. Explicó que había amanecido con dolor de garganta y el juez los volvió a convocar para el lunes próximo, junto a su abogado Daniel Llermanos.

En medio de la pandemia, mostrar por las pruebas del espionaje o hacer audiencias por zoom, en una causa tan sensible, resulta un problema, señalan las fuentes judiciales. Con algunos de los convocados hicieron una excepción. Fue el caso del obispo Jorge Lugones y su hermano, Luis, dirigente del PJ de La Plata, porque explicaron que eran personas de riesgo y no podían acercarse hasta el juzgado.

Vidal e Insarrualde, dos de los convocados como víctimas por Villena que tienen coronavirus (Télam)
Vidal e Insarrualde, dos de los convocados como víctimas por Villena que tienen coronavirus (Télam)

La investigación apunta a saber si desde dentro de las entrañas del Estado Nacional se habría espiado a decenas de jueces, periodistas, religiosos, empresarios, gobernadores y hasta ex presidentes. Los datos los aportó un narcotraficante que confesó cómo un agente de la AFI le encargó llevar un paquete bomba a la casa de un ex funcionario. La bomba no explotó. Era solo un “susto”. El “narco” se llama Sergio Rodríguez, pero su fama se la dio su apodo: “Verdura”. Luego, se sumó otra hipótesis: además de a los políticos, espiaban a los presos K.

La primera de las víctimas que se presentó en la causa fue Cristina Kirchner. Su llegada al juzgado fue precedida por un video que difundió en sus redes sociales hablando de la persecución que sufrió en el gobierno de Macri y que, en tribunales, fue leído como un espaldarazo a la investigación que nació en el juzgado de Villena.

Cristina Kirchner, en su paso por Lomas de Zamora (foto Maximiliano Luna)
Cristina Kirchner, en su paso por Lomas de Zamora (foto Maximiliano Luna)

Pero la lista de víctimas convocadas hasta ahora -porque se asegura que hay más- incluye a dirigentes del PRO como Vidal -que tenía previsto presentarse como querellante-, a Diego Santilli, Massot y Monzó -cuyos seguimientos fueron detallados por Infobae-. También al diputado Cristian Ritondo –ex ministro de Seguridad de Vidal- y a Waldo Wolff. El jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta ya fue la semana pasada, vio las pruebas de sus seguimientos y, aunque su entorno buscó minimizar lo que vio, pidió ser impulsor de la causa como particular damnificado.

También fueron llamados el senador del FDT Maurice Closs y el intendente de Avellaneda Jorge Ferraresi, junto al juez Martín Irurzun, el padre José María Di Paola, los periodistas Hugo Alconada Mon -que se presentó el lunes feriado- y Marcelo Veneranda, e integrantes de la comunidad mapuche. A ellos se les suma el representante sindical de los empleados gastronómicos Luis Barrionuevo y su esposa, la diputada Graciela Camaño, a quienes monitoreaban bajo los apodos de Durazno y Ramona.

El último de los citados en la lista de Villena es Salvatore Pica, el novio de Florencia Macri, la hermana del ex presidente, a quien la banda de agentes de la AFI espió aprovechando la conexión con un arquitecto que estaba haciendo reformas al lado de la casa de la pareja, según se lo detalló a la comisión bicameral de seguimiento de organismos de inteligencia el agente investigado Facundo Melo.

Así, la causa judicial -que hasta ahora no tuvo detenciones ni indagatorias- se va mezclando con lo que va conociéndose a través de la comisión bicameral, donde fueron convocados este viernes Alan Ruiz, el director de Operaciones Especiales de la AFI que comandaba el grupo que descubrió Villena y Susana Martinengo, encargada de Documentación Presidencial durante el Gobierno de Macri.

Es que Cristina Kirchner, a través de su abogado Carlos Beraldi, le avisó a Villena en su rol de querellante que los espías Melo, Leandro Araque y el jefe de ambos Jorge Sáez - iban a la Casa Rosada a reunirse con Martinengo cuyo despacho quedaba a 50 metros del de Macri. Los datos los encontraron a través de los registros públicos de ingresos y egresos a la Casa Rosada.

Pero Beraldi no solo señaló la presencia de esos espías sino de otras personas a las que eligió mencionar en esa presentación. Entre ellas a los abogados Fernando Scanavino -funcionario de Junín- y Federico Mastopierro. A Scanavino lo ligó a una ONG que también integró la abogada Silvina Martínez -representante de Margarita Sbolbizer-.

 Silvina Martínez y Margarita Stolbizer
Silvina Martínez y Margarita Stolbizer

Ahora, Scanavino y Mastopierro se presentaron en el juzgado de Villena para hacer un descargo: aseguraron que su presencia en la Casa Rosada y en las oficinas de Martinengo fue a pedido del Secretario de Obreros y Sindicatos Municipales de Junín. Según explicaron, se trataba de una reunión "por motivos sindicales acerca de algunos proyectos que pretendían acercar para desarrollarse en el interior de la provincia". "Fue tan transparente nuestra visita que hasta se publicó en redes sociales, para desterrar cualquier sospecha de clandestinidad", dijeron.

En declaraciones a Infobae, Scanavino ligó a mención que se hizo de él en el marco de la causa de Villena a su denuncia, junto a la abogada Martínez, de las irregularidades que hubo en 2013 en la Inspección General de Justicia para ocultar datos del caso Ciccone por el que después fue condenado el ex vicepresidente Amado Boudou. “Se me vincula ridícula y erróneamente de espionaje a la ex presidenta de la Nación -dijo- El ‘ministerio de la venganza’ ya está en marcha”.

Silvina Martínez, en tanto, hizo su propia presentación pero en la causa del Tribunal Oral Federal 2, donde se sigue el caso de la obra pública en el que está imputada Cristina Kirchner. Habló de “intimidaciones” por parte de la vicepresidenta desde que declaró como testigo en ese juicio oral. “Intentan meterme por la ventana en la causa de Lomas de Zamora”, aseguró.

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