“Fue mi bienvenida a Hollywood”: Paul Rudd recordó su audición más desastrosa y las pasiones simples que lo definen fuera del cine

En una charla para el pódcast New Heights, el actor repasó entre risas su primer gran tropiezo en Hollywood, recordó juegos creativos de su infancia y compartió rituales, amistades y gustos personales que revelan su costado más espontáneo, lejos del brillo de la industria

Guardar
Paul Rudd compartió en el
Paul Rudd compartió en el pódcast New Heights sus anécdotas más personales y recuerdos de infancia junto a los hermanos Kelce (REUTERS/Mario Anzuoni)

Paul Rudd regresó al pódcast New Heights, emitido por YouTube, para conversar con Jason y Travis Kelce en un ambiente relajado, repleto de humor, confesiones inesperadas y recuerdos personales.

Su presencia distó del formato tradicional de entrevistas promocionales, ofreciendo al público una visión más espontánea y humana del actor. A lo largo de la charla, Rudd compartió anécdotas de su carrera, los retos del rodaje junto a Jack Black, sus años formativos y detalles curiosos de su vida cotidiana.

“Es bueno estar de vuelta con ustedes”, expresó Rudd al inicio del episodio, generando una atmósfera de cercanía y risas que marcó todo el encuentro.

Rudd rememora sus primeros experimentos
Rudd rememora sus primeros experimentos con cámaras caseras, resaltando la influencia de estos juegos en su carrera artística (YouTube: New Heights)

Los anfitriones recordaron su primer intercambio televisivo con Rudd, evocando momentos familiares y emotivos: “Lo que más recuerdo de ese día fue que era tu cumpleaños, Trav, estábamos riendo y de repente empezamos a hablar de nuestros padres, y terminamos llorando”, relató el actor durante la transmisión.

Admiración por Jack Black y la experiencia en “Anaconda”

Uno de los temas centrales fue la relación profesional y personal que une a Rudd con Jack Black, así como el proceso para sumar al comediante a su más reciente proyecto, la película Anaconda.

Refiriéndose a su colega, Rudd fue enfático: “Es el mejor. Es único, un verdadero tornado de talento”. Llegó a describir a Black como alguien capaz de transformar cualquier situación con su presencia: “Es como un tsunami de comedia... es como el Diablo de Tasmania”.

La relación profesional y personal
La relación profesional y personal entre Paul Rudd y Jack Black destaca como eje central de la charla en el pódcast (Sony Pictures)

El actor recordó la anécdota de cómo Black se sumó al elenco. “Me enviaron el guion y empecé a trabajar con Kevin Ettin y Tom Gormican. Era un proyecto aún en desarrollo. Cuando supe que Jack lo había leído y le interesaba, quise llamarlo. Hablamos unos 15 minutos por teléfono y nos dimos cuenta de que ambos teníamos en mente el mismo personaje. Ninguno consultó al director, simplemente lo decidimos ahí mismo”, contó Rudd entre risas.

La admiración mutua entre ambos artistas emergió también en recuerdos de sus primeras coincidencias en castings de los años 90 y en la energía inconfundible de Black, a quien Rudd calificó como “una fuerza única”, señalando: “Cuando la gente se le acerca, les da una auténtica experiencia Jack Black”.

Infancia, películas caseras y el origen del entretenimiento

La pasión de Rudd por
La pasión de Rudd por los caramelos y dulces, reflejada en su vínculo con Samuel’s Sweet Shop y sus preferencias infantiles, se revela en el programa (YouTube: New Heights)

En un tono nostálgico, Rudd y los hermanos Kelce compartieron sus primeras experiencias con cámaras familiares y la pasión por crear historias en la infancia y adolescencia. El actor detalló: “Soy un fósil... Usaba una videocámara de cassette, grababa, detenía y editaba en la misma cámara”.

Mencionó sus experimentos junto a amigos como Guy Garvin, con quien realizó la serie de videos “Hey Garvin”, una secuencia de cortos caseros en los que bromas como lanzar cervezas recorrían múltiples escenarios mediante cortes “imposibles”. “Hicimos unos diez y las ideas se volvían cada vez más locas”, recordó.

Al repasar esos videos hoy, reconoció entre risas: “Ahora, vistos de nuevo, son imposibles de ver, pero en su momento nos parecían geniales”.

La peor audición de Paul
La peor audición de Paul Rudd en Hollywood incluye una anécdota con Danny DeVito y una alfombra quemada en un casting (Foto: Sony)

Esta nostalgia por los proyectos caseros resultó ser un terreno común entre los tres, quienes coincidieron en el valor de esas primeras aventuras como germen de su humor y creatividad.

La audición más desastrosa y el aprendizaje en Hollywood

A pedido de los conductores, Rudd rememoró su “bienvenida a Hollywood” con una anécdota sobre su primera audición profesional. “Escuché la historia de Danny DeVito y fui a la prueba intentando ser diferente. Sin fumar, llevé un cigarrillo y lo apagué en la alfombra de la directora de casting”, confesó.

El fanatismo de Paul Rudd
El fanatismo de Paul Rudd por los Kansas City Chiefs y la importancia de compartir victorias deportivas con su familia ocupan un lugar especial en la entrevista (REUTERS/Hannah McKay)

Relató que, apenas terminó la escena, le agradecieron y supo inmediatamente que no conseguiría el papel. “Se lo conté a mi representante y me dijo: ‘Bueno, supongo que hay que aprender’”, recordó entre bromas.

Anécdotas y gustos personales: dulces, “Anchorman” y rituales

La charla en New Heights permitió descubrir otros aspectos curiosos de la trayectoria y personalidad de Rudd. Por ejemplo, compartió que en la comedia “Anchorman” decidió bautizar uno de los testículos de su personaje con el nombre de su excompañero universitario y actual dueño de CharBar en Kansas City: “Mi izquierda lleva su nombre. Quería sorprenderlo cuando viera la película, y lo logramos”.

También habló de su afición por los caramelos —es dueño de Samuel’s Sweet Shop— y de sus debilidades infantiles: “Tengo gustos de niño de nueve años. Me encantan todos los dulces. Los Sour Santas son mi preferido, aunque también adoro el chocolate y las golosinas ácidas”.

Humor, rituales y amistad: Paul
Humor, rituales y amistad: Paul Rudd destaca la importancia de las bromas privadas y la risa como motor de sus relaciones personales fuera de Hollywood (REUTERS/Jeenah Moon)

Hacia el cierre del episodio, la conversación giró hacia rituales personales y el fanatismo de Rudd por los Kansas City Chiefs. El actor relató la alegría de disfrutar los triunfos deportivos junto a su familia: “La felicidad y los recuerdos que los Chiefs me dieron con mi hijo y mi familia no tienen precio. Aunque esta temporada no haya sido la mejor, valoro compartir esa experiencia como fan”.

En un ambiente festivo, Rudd despidió su participación agradeciendo a los anfitriones y enviando saludos navideños: “Feliz Navidad, felices fiestas a todos y gracias por dejarme volver”, declaró.

New Heights reveló, en la voz de Paul Rudd, cómo las bromas privadas y los guiños insólitos son para él la mejor manera de celebrar la amistad y reírse de uno mismo. Detrás de cada anécdota quedó claro que en el humor entre amigos reside uno de los pequeños placeres que más valora fuera del foco de Hollywood.