Las tensiones entre Javier Milei e Inacio Lula Da Silva no serán un impedimento para que el gas argentino de Vaca Muerta llegue a Brasil a través de, fundamentalmente, la iniciativa privada. Esa es la premisa con la que trabajan por estos días los empresarios energéticos de ambos países.
Para la Argentina resultaría una posibilidad única para generar divisas ante un abultado cronograma de vencimientos de deuda en los próximos años y equilibrar una balanza comercial que ahora es deficitaria. Para los brasileños puede significar energía barata para abastecer la creciente demanda industrial del sur y la posibilidad de producir fertilizantes a precio competitivo.
En lo inmediato, ambos gobiernos y empresarios del sector identifican tres caminos de corto plazo para que el fluido alojado en la cuenca neuquina cruce la frontera para abastecer la creciente demanda industrial en el sur brasileño:
- la venta de Gas Natural Licuado por mar,
- la infraestructura de gasoductos boliviana, y
- a través de Uruguay.
Estas alternativas y otras que están en estudio son complementarias.
El secretario de Energía argentino, Eduardo Rodríguez Chirillo, suele decir en privado que “la cuestión es juntar al novio, el gas de Vaca Muerta, con la novia, la demanda de Brasil”. Para el CEO del Instituto Brasileño de Petróleo y Gas (IBP), Roberto Furian Ardenghy, Bolivia será “el cura” porque su infraestructura permitirá conectar ambas puntas.
“Todo el gas boliviano lo compra Brasil a través del Gasbol que tiene capacidad para transportar unos 30 millones de metros cúbicos diarios y ahora se encuentra en 10 o 12 millones de metros cúbicos. Argentina tiene la posibilidad de llevar en el corto plazo entre 18 y 20 millones de metros cúbicos”, explicó Furian. Por la falta de inversión en sus pozos, Bolivia se encuentra ante un fuerte declino.
Argentina tiene la posibilidad de llevar en el corto plazo entre 18 y 20 millones de metros cúbicos (Furian)
Pero para conseguir llegar a ese objetivo no alcanza con la primera etapa de Reversión del Gasoducto Norte que permitirá conectar la cuenca neuquina con unas siete provincias del norte argentino para transportar hasta allí unos 19 millones de metros cúbicos. Sin embargo, es necesario encarar una segunda etapa con loops (ducto paralelo) y plantas compresoras para conseguir un excedente mínimo de 15 millones de metros cúbicos que al menos tardaría hasta 2026.
El objetivo de Chirillo es que se haga con capitales privados. El presidente del IBP comentó que el punto a resolver será el de la tarifa de transporte que pretenda cobrar Bolivia, la cual debería permitir llegar a Brasil con un precio competitivo.
“Argentina tiene el recurso, Bolivia la infraestructura y Brasil la demanda. Creo que las necesidades de los privados van a superar las diferencias políticas”, sostuvo Furian.
En ese sentido se manifestó el ministro de Minas y Energía de Brasil, Alexandre Silveira de Oliveira. Dijo esta semana a Infobae, durante la inauguración del parque eólico de 423 MW de PAE en el estado de Bahía, que la mejor ruta es a través de Bolivia.
También aclaró Silveira de Oliveira que el diálogo con los gobernadores de las provincias donde se encuentra Vaca Muerta Rolando Figueroa, de Neuquén, y Alberto Weretilneck, de Río Negro tienen predisposición al diálogo bilateral, a pesar de la mala relación de Lula con Milei, a quien trato de “pseudo líder”.
“Los dos gobernadores tuvieron la decencia, la disposición de encontrarse con nosotros en Río de Janeiro, junto con el presidente Lula, demostrando completa y total disposición de dialogar con Brasil sobre el gas. Así que no habrá ningún rompecabezas político que impedirá que Brasil continúe dialogando con los hermanos y hermanas argentinos”, dijo el ministro. La clave para el gobierno del país vecino es, insistió, la integración energética.
No habrá ningún rompecabezas político que impedirá que Brasil continúe dialogando con los hermanos y hermanas argentinos (Silveira de Oliveira)
La semana que viene, anticipó el funcionario, viajarán a Bolivia para reunirse con las autoridades y empresarios locales con el objetivo de dialogar, entre otras cosas, sobre la posibilidad de que el gas argentino pase por sus gasoductos. Para Silveira esa es actualmente la mejor opción.
Otra alternativa que resaltó el ministro tienen que ver con el barco que pondrán en Mar Argentino PAE y la noruega Golar para instalar en el país un buque que permitirá comenzar a exportar el gas de Vaca Muerta a partir de 2027. Allí podrían sumarse otros jugadores, como es el caso de la estatal YPF.
La otra alternativa que mencionó es a través del Gasoducto Buenos Aires - Montevideo que transporta unos 5 millones de metros cúbcios. Pero ahí falta construir un caño desde la capital uruguaya hasya Porto Alegre, más plantas compresoras para ampliar la capacidad del ducto.
La Argentina tiene en Vaca Muerta la segunda reserva no convencional de gas natural y la cuarta de petróleo, por lo que el país cuenta con la oportunidad de aprovechar sus recursos durante la ventana que otorgue la transición energética. Con el proyecto de PAE y Golar el país podrá ingresar al club de las naciones exportadoras de GNL junto a Estados Unidos, Rusia, Qatar y Australia, entre otros.
Por su parte, YPF planea construir junto a la malaya Petronas una planta de licuefacción en territorio argentino que aún no fue confirmada pero que en las próximas semanas podría oficializarse, debido a la sanción del RIGI. Allí la inversión será para una planta que podría incrementar las exportaciones para 2030 en USD 15.000 millones según las previsiones de la firma estatal.