Los empresarios advirtieron que las trabas a la importación ya frenan la inversión y el crecimiento

La Cámara de Importadores de la República Argentina se reunió con el BCRA para expresar su preocupación por las recientes decisiones de la entidad monetaria, en sintonía con otros ejecutivos; cómo es la norma y cuál es su impacto sobre la inflación

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Vista general de contenedores en el Puerto Comercial de la ciudad de Buenos Aires (Argentina), en una fotografía de archivo. EFE/Demian Alday Estévez
Vista general de contenedores en el Puerto Comercial de la ciudad de Buenos Aires (Argentina), en una fotografía de archivo. EFE/Demian Alday Estévez

Los importadores advirtieron hoy que “las restricciones a las compras externas vigentes dificultan el normal abastecimiento para la producción, lo que podría significar menores inversiones, exportaciones y menor crecimiento económico para la Argentina”.

Por este motivo, la Cámara de Importadores de la República Argentina se reunió ayer con el Banco Central “para dialogar al respecto”.

“Esto se debe a que las renovadas trabas oficiales para las importaciones generan un aumento adicional de los precios y trabas para el crecimiento económico que busca el propio Gobierno”, indicó la CIRA en un comunicado.

“El Banco Central de la República Argentina (BCRA) dispuso, en los primeros días del mes de marzo y a través de la Comunicación “A” 7466, la asignación de una categoría específica vinculada con la forma de acceder al mercado de cambios y a la disponibilidad de divisas para ciertas importaciones. Tal como está planteada la normativa, un crecimiento económico superior al esperado generaría una mayor demanda de importaciones y el límite impuesto terminaría impactando más temprana y negativamente en la producción y en el consumo”, indicó la entidad que preside Oscar Pérez.

“Durante el 2022 la demanda de compras externas se estima que será mayor debido a los aumentos en los precios internacionales, que pueden contribuir al valor de las exportaciones argentinas. Se requiere de un incremento del volumen de la oferta exportable, que será posible si también se incrementan las importaciones necesarias para producir”, advirtió la CIRA.

Se requiere de un incremento del volumen de la oferta exportable, que será posible si también se incrementan las importaciones necesarias para producir, indicó la CIRA

“La recuperación en curso de la actividad económica en Argentina requiere de importaciones. El 41% de las importaciones son bienes intermedios, el 35% bienes de capital y sus partes, el 9% combustibles y el 14% bienes de consumo. Tomando el promedio de los últimos seis meses, el rubro de bienes intermedios se incrementó 52% anual, seguido por piezas y accesorios para bienes de capital (46%) y bienes de capital (33%)”, precisó.

“En este escenario, limitando el acceso al mercado de cambios con hasta 5% por encima del valor de 2021, con un crecimiento del PBI esperado en torno al 3% y con precios de los insumos aumentando fuertemente debido a los hechos en Ucrania, es de esperar que se observe un impacto en la producción ya que los insumos intermedios y los bienes de capital son los primeros rubros que alcanzarían los límites”, aclaró.

Ante este panorama, “ayer las autoridades de la CIRA y del BCRA se reunieron para analizar y conversar sobre esta situación y la referida Comunicación “A” 7466. A propósito de esta última, la CIRA expresó su preocupación respecto del impacto negativo, en el corto y mediano plazo, sobre los planes de las empresas, la producción, la actividad económica y el empleo en la Argentina. Un importante canal de diálogo quedó abierto para darle seguimiento a los temas de coyuntura y operativos, con el fin de minimizar el impacto y la incertidumbre en las operaciones de comercio exterior”.

Edificio del Banco Central de Argentina en Buenos Aires.. Foto de archivo. REUTERS/Enrique Marcarian
Edificio del Banco Central de Argentina en Buenos Aires.. Foto de archivo. REUTERS/Enrique Marcarian

Frente a la puesta en marcha semanas atrás de un sistema de controles adicionales para las licencias automáticas, fuentes de una cámara industrial señalaron que “el gran problema de la norma del Banco Central es que no solo frena el crecimiento y genera un faltante de productos lo cual conlleva suba de precios o sea más inflación”.

Cómo es la norma

Cabe recordar que la entidad que preside Miguel Pesce dispuso su incorporación al Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI), que evalúa cada operación importadora y del que participan el ministerio de Desarrollo Productivo y la AFIP. De este modo, el Banco Central asigna una categoría a cada pedido para acceder a los dólares para pagar la importación.

Al mismo tiempo, el BCRA también dispuso “mantener hasta fin de año las condiciones de acceso al mercado aplicables a pagos de importaciones, la conformidad previa para cursar pagos de endeudamientos financieros del exterior con acreedores vinculados y las normas en materias de refinanciación de pasivos externos”, o sea, todo el cuerpo normativo vigente para importar.

Pero se agregó un paso más: el Banco Central asignó a cada SIMI una categoría, A o B. En el primer caso, el importador recibe el mismo tratamiento que tuvo hasta ahora; si se adjudica la categoría B, la importación de bienes asociadas debe ser financiada como mínimo a un plazo de 180 días corridos a contar desde el registro del ingreso aduanero de los bienes a la Argentina.

El BCRA habilitó el acceso al mercado de cambios a un importador para las SIMI categoría A por el equivalente al menor de dos montos: el valor FOB de sus importaciones de 2021 más un 5% o el valor FOB de sus importaciones de 2020 más un 70%. Para los nuevos importadores, el límite se fijará en USD 50.000, al igual que para aquellos que no hayan superado ese monto en base al cálculo anterior.

Además, las fuentes indicaron que esta decisión administrativa “toma como base el 2020 más un 70 por ciento o el 2021 más un 5%, lo que sea menor”.

Los empresarios advirtieron que las restricciones adicionales a las importaciones alentarán un mayor aumento en los precios

“En el caso de la mayoría de las fábricas se reactivaron en el 2021, porque 2020 fue un año de pandemia con muchos rubros cerrados directamente y con mucho faltante de materias primas, más que por el cambio de gobierno en 2019 y recién el año pasado se normalizan los cambios industriales”, se enfatizó.

En este sentido, indicaron que se ven afectados “todos los incentivos para la fabricación nacional con la ampliación de licencias no automáticas”

“Todas las fábricas tiene la base del 2020 muy abajo y, por ende, en este 2022 van a tener menos insumos e importación que el 2021, lo cual no solo no les permite crecer si no por el contrario las paralizaría en breve, ya que muchas de ellas recién inauguradas o puestas en marcha”, indicaron

Por esta razón, se afirmó, “ya se están realizando muchísimos planteos desde las cámaras industriales sobre este tema”.

La postura de la UIA

En tanto, el presidente de la Unión Industrial Argentina, Daniel Funes de Rioja, se refirió en diálogo con Infobae sobre esta cuestión: “Hemos conversado y seguimos conversando ese tema; estamos hasta ahora manejándolo con el Banco Central, el ministerio de Desarrollo Productivo y la AFIP; hablando exclusivamente de las importaciones que implican insumos industriales no hay problemas de abastecimiento en las líneas de producción; el tema se ha podido encauzar”.

“La UIA ha podido tratar en el tema y se han ido solucionando los problemas, o amortiguando, ya que no ha habido paradas de producción por esa causa. Evidentemente las restricciones cambiarias existen; todos las conocemos y las normas al respecto dificultan los procesos, pero este diálogo por lo menos ha permitido generar los caminos de solución”, indicó.

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