Desde Europa hasta Sudáfrica: una pareja vendió todo para viajar por el mundo en una autocaravana

Dejaron sus empleos y recorrieron más de 29 países. Documentaron todo en redes sociales, inspirando a miles de seguidores

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Chris y Marianne Fisher dejaron el Servicio Nacional de Salud y vendieron todas sus pertenencias para vivir el presente viajando por el mundo (@treadtheglobeofficial)
Chris y Marianne Fisher dejaron el Servicio Nacional de Salud y vendieron todas sus pertenencias para vivir el presente viajando por el mundo (@treadtheglobeofficial)

En enero de 2020, Chris y Marianne Fisher decidieron dejar atrás su rutina diaria en el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS) y emprender una aventura que cambiaría sus vidas por completo. Con más de 50 años, tomaron una drástica decisión: vendieron todas sus pertenencias y alquilaron su casa para financiar su sueño de recorrer el mundo en una autocaravana. “Llegas a un punto en la vida en el que te das cuenta de que no vas a vivir para siempre”, explicó Chris a The Mirror, señalando el momento de reflexión que los impulsó a tomar esta decisión. Marianne agregó a SWNS: “Nos dimos cuenta de que necesitábamos vivir por ahora”, destacando el fuerte deseo de aprovechar el presente.

Con esa idea en mente, la pareja compró una autocaravana Fiat Ducato de 20 años, a la que llamaron “Trudy”, por unos 21.000 dólares. Cuando comenzaron su viaje, el vehículo tenía 64.000 kilómetros en el odómetro, pero después de recorrer el mundo, acumularon más de 220.000 kilómetros, sin contar los 38.600 kilómetros adicionales que hicieron por mar.

Con esta fiel compañera, los Fisher cruzaron continentes, enfrentaron desafíos y vivieron experiencias inolvidables. “Cuando nos fuimos, todo el mundo decía: ‘No puedes dar la vuelta al mundo con un Fiat Ducato con tracción en dos ruedas’. Pero ella lo ha conseguido”, mencionó Marianne con orgullo.

En su autocaravana "Trudy", la pareja recorrió 29 países y vivió experiencias únicas como nadar en el océano Ártico y acampar entre elefantes en Sudáfrica (@treadtheglobeofficial)
En su autocaravana "Trudy", la pareja recorrió 29 países y vivió experiencias únicas como nadar en el océano Ártico y acampar entre elefantes en Sudáfrica (@treadtheglobeofficial)

El viaje los llevó a visitar 29 países a lo largo de cuatro años y medio, comenzando por Europa y llegando a destinos tan variados como Turquía, Estados Unidos, Canadá, Japón, Corea del Sur, India y Sudáfrica. “Ha sido fenomenal. Diferentes lugares, diferentes culturas... todo el mundo nos ha dado una cálida bienvenida”, expresó Marianne. Entre los momentos destacados de su viaje estuvo la llegada al punto más septentrional de Canadá, donde nadaron en el océano Ártico, tras recorrer la carretera de tierra Dempster Highway, de 1.600 kilómetros. También cruzaron la mítica Ruta 66 en Estados Unidos, exploraron México y navegaron desde Los Ángeles hasta Japón.

La pandemia de COVID-19 cambió los planes de Chris y Marianne Fisher, quienes, tras salir de Telford, quedaron atrapados en Turquía por 18 meses debido a los confinamientos. A pesar de las dificultades, documentaron su viaje en su canal de YouTube, Tread The Globe, donde lograron más de 28 millones de visitas y 180.000 suscriptores. “Transmitimos positividad mostrando que el mundo es un lugar hermoso”, afirmó Chris.

A través de su canal de YouTube, Tread The Globe, la pareja alcanzó 28 millones de visitas, inspirando a miles de seguidores (@treadtheglobeofficial)
A través de su canal de YouTube, Tread The Globe, la pareja alcanzó 28 millones de visitas, inspirando a miles de seguidores (@treadtheglobeofficial)

Los desafíos no faltaron: Arabia Saudita les negó la entrada debido a su autocaravana con volante a la derecha, lo que los llevó a Sudáfrica, donde continuaron su aventura por Mozambique, Zimbabue y Botsuana. “Tuvimos la loca idea de acampar en Las Vegas y ver un espectáculo del Cirque du Soleil”, contó Chris.

A lo largo de su travesía, Chris y Marianne Fisher vivieron momentos inolvidables que se convirtieron en los puntos culminantes de su épico viaje. Uno de los más destacados fue la oportunidad de nadar en el océano Ártico después de recorrer los 1.600 kilómetros de la Dempster Highway, una carretera de tierra que los llevó al punto más septentrional de Canadá. Además, disfrutaron de experiencias asombrosas como acampar en el Parque Nacional Kruger en Sudáfrica, donde vieron a elefantes cruzar frente a su autocaravana.

Más de 100 personas los recibieron en su regreso a Telford, mientras planean su próxima aventura (@treadtheglobeofficial)
Más de 100 personas los recibieron en su regreso a Telford, mientras planean su próxima aventura (@treadtheglobeofficial)

Chris recordó con entusiasmo estos momentos: “Pasamos por el monte Fuji y el Taj Mahal en India, y fue fantástico ver elefantes caminando delante de tu camioneta en el Parque Nacional Kruger y leopardos y leones alrededor”, contó.

Después de más de cuatro años y medio de recorrer el mundo, el regreso de los Fisher a su hogar en Telford fue todo un acontecimiento. Más de 100 personas los recibieron calurosamente en las calles de su ciudad natal. La pareja estaba visiblemente emocionada al ver el apoyo que habían recibido de la comunidad local. A pesar de la alegría de volver, también expresaron su nostalgia por el final de su odisea: “Muy tristes de que esta aventura haya terminado, pero habrá más”, añadió Marianne, anticipando futuros viajes.

Aunque su épica vuelta al mundo terminó, los Fisher ya están planeando su próxima aventura. A lo largo del viaje, experimentaron una transformación personal que los llevó a valorar cada momento. “Realmente siento que si no hacemos nada más en nuestra vida, habremos hecho algo fantástico”, dijo Marianne en una entrevista con SWNS. La pareja también expresó su satisfacción por haber cumplido su sueño, y Chris reflexionó sobre la decisión que tomaron: “Siempre nos ha gustado viajar y planeamos que un día, cuando nos jubiláramos, iríamos y pasaríamos nuestra jubilación viajando”. Sin embargo, este viaje no fue solo una aventura de retiro anticipado, sino una lección sobre la importancia de vivir el presente.

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