Moody´s bajó calificación a México y a Pemex por incertidumbre en crecimiento

La calificadora redujo de "A3″ a "Baa1″ y reiteró la necesidad de que la paraestatal reciba fondos externos para mejorar su desempeño

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Moody´s redujo la calificación a la paraestatal Pemex debido a la incertidumbre de inversión en México (Foto: Reuters)
Moody´s redujo la calificación a la paraestatal Pemex debido a la incertidumbre de inversión en México (Foto: Reuters)

La calificadora Moody´s redujo la calificación que había referido sobre México y específicamente sobre la paraestatal de Petróleos Mexicanos (Pemex) cayendo de la categoría “A3” a "Baa1″ debido a las pocas expectativas de crecimiento con base en las decisiones políticas y relacionadas con la incertidumbre del panorama de inversión en el país, sumado a la problemática de la crisis global causada por el coronavirus.

Según consideró Moody´s, las decisiones gubernamentales a mediano plazo fueron las que afectaron las posibilidades de crecimiento, sobre todo cuando Pemex decidiera negarse a recibir inversión de capital privado para continuar con su crecimiento y para ejercer sus operaciones con mayor reservas financieras. Se decidió otorgar una calificación "Baa1″ debido a que, a pesar de que cuenta con un perfil crediticio saludable, hay mucha incertidumbre sobre la dirección que el país puede tomar en cuanto a posibilidades de inversión.

La calificadora también refirió como un punto importante que las políticas públicas a mediano plazo no muestran las cualidades para poder superar los obstáculos económicos a los que se enfrenta México a largo plazo, principalmente por basarse fuertemente en la industria petrolera como motor económico principal, que ahora está fuertemente afectado debido a la parálisis causada por la pandemia y a que Pemex no permitió inversiones extranjeras en los proyectos de extracción de crudo.

Pemex presenta una deuda de 83,900 millones de dólares y las posibilidades de crecimiento se ven reducidas (Foto: Reuters)
Pemex presenta una deuda de 83,900 millones de dólares y las posibilidades de crecimiento se ven reducidas (Foto: Reuters)

Las condiciones internacionales tampoco son buenas para el panorama futuro de Pemex ya que, con la carencia de movilidad debido al COVID-19, la necesidad de combustible se redujo considerablemente a tal grado que el precio de las gasolinas disminuyó. Esto le generaría problemas de ingresos ya que, por el momento, el precio del barril de petróleo se encuentra alrededor de los 19 dólares, lo cual afectaría cualquier beneficio de producción, sobre todo porque se espera la construcción de la nueva refinería en Tabasco aunque las otras plataformas se encuentran por debajo de los niveles de producción deseables.

No ha sido un buen año para México en relación a las calificadoras. Moody´s era la única que no había hecho una actualización sobre las expectativas del país, específicamente se refieren a que no ven factible que las acciones del gobierno en curso puedan cambiar la tendencia de la baja de producción de petróleo que tuvo durante los últimos 15 años en pérdidas.

La falta de certidumbre y credibilidad en las decisiones del gobierno fueron algunas de las causas por las que Moody´s redujo la calificación de Pemex (Foto: Cuartoscuro)
La falta de certidumbre y credibilidad en las decisiones del gobierno fueron algunas de las causas por las que Moody´s redujo la calificación de Pemex (Foto: Cuartoscuro)

Hasta el momento la paraestatal mexicana se encuentra en una deuda de 83,900 millones de dólares, por lo que combatir una pérdida tan alta no se ve como un proyecto factible durante el sexenio, por lo que para las calificadoras afectó mucho la negativa de inyección de capital privado para ayudar a mejorar la producción y el permitir que otras compañías puedan acceder a la extracción de petróleo y por ende a invertir y realizar operaciones.

La falta de ingresos de Pemex y la decisión de cancelar las subastas de petróleo, gas y la falta de apertura a contratos con otras compañías son el enemigo a vencer y a pesar de que el gobierno mexicano decidió hacer una exención en materia fiscal de casi 60 millones de dólares, la paraestatal no tiene un buen panorama en lo que resta del año, ya que se manifiestan condiciones de incertidumbre para la inversión, sumando la crisis que resultará de la carencia de actividades por la pandemia de coronavirus que azota al mundo.

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