Las seis personas más ricas de México tienen más que el 50% de toda la población más pobre: Oxfam

La investigación advirtió que la élite “rica y poderosa” podrá utilizar su dinero para librarse de las consecuencias de diferentes crisis, pero el resto no tiene ni tendrá esa oportunidad

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(Foto: Cuartoscuro)
(Foto: Cuartoscuro)

Un nuevo informe confirmó que la situación de desigualdad económica en el mundo también ha afectado a México en lo particular, y que la brecha es cada vez más amplia: ahora mismo, las seis personas más ricas del país poseen más riqueza que el 50% más pobre.

Y es que 2,153 multimillonarios poseen más riqueza que 4,600 millones de personas, un 60% de la población del mundo, de acuerdo con la organización no gubernamental Oxfam, que presentó el informe “El tiempo para el cuidado: el trabajo de cuidados y la crisis global de desigualdad” en el marco del Foro Económico de Davos, Suiza.

Oxfam pretende mostrar que la desigualdad económica “también está construida sobre la desigualdad de género”, ya que muchos de los beneficios de los más ricos están basados en la explotación del trabajo de mujeres y niñas "y la vulneración sistemática de sus derechos”.

La brecha también se extiende gracias a la falta de reconocimiento del trabajo de cuidados (Foto: Archivo)
La brecha también se extiende gracias a la falta de reconocimiento del trabajo de cuidados (Foto: Archivo)

“El trabajo de cuidados es fundamental, tanto para nuestras sociedades, como para la economía”, aseveraron. Y es que este concepto engloba actividades como el cuidado de menores, de personas mayores y con capacidades diferentes además de las tareas domésticas diarias como cocinar, lavar, coser e ir a buscar agua y leña.

En México, el trabajo de cuidados no remunerado equivale al menos a 1.7 billones de pesos, es decir, es equiparable a casi dos veces a la producción minera anual

De acuerdo con la organización, si nadie invirtiese tiempo y recursos en este tipo de actividades, economías enteras se colapsarían por completo. Son 12,500 millones de horas diarias de trabajo realizado por mujeres, equivalente a 10.8 billones de dólares, es decir tres veces el tamaño de la industria global de la tecnología.

La investigación arrojó que hay un estimado de 67 millones de trabajadores del hogar del mundo, de los cuales 80%, la abrumadora mayoría, son mujeres. Apenas 1 de cada 10 están protegidas por la legislación laboral.

El principal motor del trabajo de cuidados son las mujeres (Foto: Graciela López/ Cuartocuro)
El principal motor del trabajo de cuidados son las mujeres (Foto: Graciela López/ Cuartocuro)

En el caso particular de México, existen aproximadamente 2.4 millones de personas trabajadoras domésticas de las cuales: 98% no tienen contrato y su ingreso promedio mensual es de 1,550 pesos, es decir, su ingreso no es suficiente para cubrir sus necesidades alimentarias básicas.

La desigualdad en las labores de cuidados crea un ciclo vicioso de desigualdad económica y de género, que impide a las mujeres acceder a servicios de educación y salud; empleo digno y suficiente, además de carencia en la participación política y contextos libres de violencia.

Por lo tanto, Oxfam propuso un plan para comenzar a reducir este problema. El primer paso, fundamental para la organización, es la creación de un Sistema Nacional de Cuidados, “fondeado con impuestos progresivos a la riqueza”.

Una de las propuestas de la organización es crear nuevos impuestos progresivos para los más ricos (Foto: Diego Simón Sánchez/ Cuartoscuro)
Una de las propuestas de la organización es crear nuevos impuestos progresivos para los más ricos (Foto: Diego Simón Sánchez/ Cuartoscuro)

Además, propusieron aumentar los impuestos progresivos y crear nuevos impuestos a la riqueza extrema para financiar servicios que reduzcan la desigualdad y pobreza. El tercer punto consiste en buscar que la Constitución reconozca el drecho al cuidado como un derecho universal garantizado por el Estado.

“Si no se adoptan medidas firmes, la situación empeorará mucho más”, advirtieron. Los principales problemas citados son el envejecimiento demográfico, la debilidad fiscal y los recortes en el gasto público, así como la amenaza del cambio climático.

“La élite rica y poderosa podrá utilizar su dinero para librarse de las consecuencias de esta crisis, pero las personas en situación de pobreza y privadas de poder no tendrán esa oportunidad”, concluyeron.

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