Geraldo Alckmin, Sergio Moro y otros funcionarios estuvieron en la mira del PCC, la mayor banda narcocriminal de Brasil

La Policía Federal de Brasil dio a conocer la lista de objetivos del plan del Primer Comando de la Capital (PCC) para asesinar a autoridades del país. Geraldo Alckmin, Sergio Moro y otros funcionarios estuvieron en la mira de la mayor banda criminal del país.

El actual vicepresidente fue blanco de la facción criminal al menos desde 2011, cuando era gobernador de San Pablo y llevó adelante una actuación muy incisiva contra el PCC.

El periódico local Estadao y la revista Forum dieron a conocer que informes transcritos de la investigación de la Policía muestran que, desde 2011, la facción tenía planes para “decretar” (asesinar) a Alckmin.

“Después de que llegó este gobernador (Alckmin), las cosas realmente se volvieron locas. Usted sabe todo lo que pasó en el momento en que nosotros enfrentamos al gobernador. Entonces, hoy en día, secretario de Seguridad Pública, secretario de Administración, comandante de los gusanos (Policía Militar), todos están contra nosotros”, dijo un miembro de la facción en ese momento, en una de las conversaciones interceptadas por la Policía y dadas a conocer este miércoles.

Los jefes del PCC encargados de las “operaciones especiales” de la facción (asesinatos y rescates de presos) fueron responsables de los asesinatos de agentes penitenciarios, policías y hasta un juez, recordó Estadao, al tiempo que detalló que la facción también “decretó” -o sea, juró matar- al vicepresidente Geraldo Alckmin, al ex secretario de Administración Penitenciaria Lourival Gomes, al diputado federal Coronel Telhada, al director de prisiones Roberto Medina y al fiscal Lincoln Gakiya.

Este miércoles, la Policía Federal lanzó la “Operación Sequaz” con el objetivo de arrestar a los jefes de las facciones “Sintonía Restringida” y otros involucrados en los más recientes planes de rescate del máximo líder de la organización criminal, Marco Willians Herbas Camacho, alias “Marcola”.

El diario citado indica que los criminales querían rescatar a su jefe pero, al fracasar la acción, decidieron atacar a las autoridades de Rondônia, Mato Grosso do Sul, Paraná y San Pablo. Además de policías y agentes penitenciarios, la facción pretendía atacar al senador Sergio Moro, a su esposa, la diputada federal Rosângela Moro; y a los dos hijos de la pareja.

Subraya Estadao que intercepciones telefónicas mostraron que, al menos desde 2011, el grupo criminal ha estado planeando matar al entonces gobernador Alckmin. En una de las conversaciones interceptadas, uno de los líderes del PCC, el preso Luis Henrique Fernandes, conocido como “LH”, conversaba con otros dos miembros de la facción. El primero era Rodrigo Felício, “Tiquinho”; mientras que el otro era el entonces miembro de la dirección del PCC, Fabiano Alves de Sousa, “Paca”, asesinado en 2019 en una guerra interna de la facción.

La conversación entre los criminales tuvo lugar el 11 de agosto de 2011 a las 22:37. “Paca” cuestionó a sus cómplices sobre qué debían hacer. Luego, ordenó a los dos que busquen “algunos hermanos que no se les pregunte (que no son buscados por la Policía) y entrenen”.

El entrenamiento para la acción sería rescatar prisioneros o atacar a las autoridades. “LH” dijo que el tráfico de drogas dirigido por la facción estaba experimentando dificultades desde que Alckmin llegó a la gobernación.

En escuchas telefónicas de 2013, miembros del PCC volvieron a mencionar la orden de matar al entonces gobernador y hoy vicepresidente de Lula. Fue en ese momento que en el plan de ataque a las autoridades se integró a otra prioridad de la facción: liberar a “Marcola”.

Nunca tuvieron éxito. El primer plan de rescate se descubrió en 2014: la facción montó un avión Cessna 510, un helicóptero Bell y un Esquilo blindado con los colores de la Policía Militar de San Pablo para el ataque. Este último estaría armado con una ametralladora calibre .30.

En 2017 se descubrió nuevamente el plan de rescate, lo que llevó a la Policía Militar a trasladar un pelotón desde las Rondas Ostensivas Tobias de Aguiar (Rota) a la ciudad de Presidente Venceslau. La misma táctica se utilizó para frustrar un nuevo plan, a fines de 2018. En ese momento, los policías de Rota recibieron entrenamiento del Ejército para disparar con ametralladoras calibre .50, que se colocaron alrededor de la prisión para frustrar la acción de los bandidos, informó el periódico citado.

A raíz de ello, surgió el plan de ataque a las autoridades. Poco después, en enero de 2019, “Marcola” y sus cómplices fueron trasladados al sistema penal federal. En enero de 2019 fue incautada una nueva carta, esta vez, en la Penitenciaría de Junqueirópolis. En octubre del mismo año, se encontró en la Penitenciaría 1 de Presidente Bernardes otro mensaje de la Tonada Final, cumbre de la facción. Finalmente, el 16 de julio de 2020 fue incautado un nuevo boleto, esta vez en el penal de Mirandópolis.

Este último fue encontrado con un detenido de la llamada “sintonía con el sistema”, el grupo encargado del orden en las cárceles. Iba a reunirse con un abogado. El documento “exigió” la muerte del fiscal Gakiya a los miembros de la facción en general. En ese momento, la facción aún no había amenazado al ex ministro de Justicia Sergio Moro ni al entonces gobernador João Doria, quienes cumplieron la orden de la Justicia de trasladar a “Marcola” y otros 21 líderes de la facción. Desde entonces, Gakiya ha vivido bajo protección policial.

En el operativo de este miércoles, unos 120 agentes cumplieron con 24 órdenes de búsqueda y 11 órdenes de arresto en los estados de San Pablo, Paraná, Mato Grosso do Sul y Rondonia.

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