Un capo narco fue asesinado en la última masacre carcelaria de Ecuador

Leandro Norero fue uno de los 15 muertos en la balacera entre bandas en la prisión de Lacatunga, a 105 kilómetros de Quito

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La Policía trasladó a Leandro Norero desde una unidad en Guayaquil hasta la cárcel de Latacunga, el 27 de mayo de 2022. (Foto: Policía Nacional).
La Policía trasladó a Leandro Norero desde una unidad en Guayaquil hasta la cárcel de Latacunga, el 27 de mayo de 2022. (Foto: Policía Nacional).

La violencia se vuelve a tomar las cárceles del Ecuador. Esta vez ocurrió en la cárcel de Latacunga, en la provincia de Cotopaxi, a 105 kilómetros al sur de Quito. Luego de horas de intensos tiroteos entre facciones de varias bandas penitenciarias, durante dos días seguidos, las autoridades policiales anunciaron que 44 reclusos resultaron heridos y 15 fueron asesinados, entre ellos Leandro Norero Tigua, un célebre narcotraficante con vínculos políticos del más alto nivel.

La balacera comenzó a las 13:30 horas, y se extendió por cinco horas hasta que la Policía Nacional informó sobre las 18:30 que había recuperado el control del penal y que los heridos de los enfrentamientos estaban siendo atendidos por personal sanitario del Ministerio de Salud.

Tras una investigación de siete meses, la fiscalía acusó a Norero Tigua, conocido como “El Patrón”, y a otros tres imputados por delitos asociados al tráfico de drogas, y que fueron detenidos en un operativo realizado en la madrugada del miércoles 10 de mayo de 2022.

En los operativos para capturar y apresar a Norero, en total se realizaron 19 allanamientos en Guayas, Manabí y Santa Elena, tres provincias costeras de Ecuador. En los operativos se encontraron varios elementos de prueba que la justicia presentó durante las audiencias de formulación de cargos. Los hallazgos registraron la incautación de $6.4 millones en efectivo, 24 lingotes de oro macizo, un arsenal de armas de fuego de grueso calibre y municiones para el abastecimiento.

Norero se encontraba cumpliendo una pena en Latacunga luego de que la fiscalía presentara cargos en su contra ante los jueces penales de Guayaquil, el 26 de mayo de 2022.

Pero Norero ya fue sentenciado por narcotráfico en 2014 en Perú. Sin embargo, en 2020, Norero fingió su muerte y sus abogados presentaron pruebas falsas sobre su contagio y deceso por COVID-19, lo que dejó sin efecto su orden de encierro y le permitió regresar a Ecuador, donde continuó con sus actividades ilícitas. El expediente elaborado por la fiscalía ecuatoriana incorporó este elemento que fue aportado por la Asistencia Penal Internacional de Perú.

Militares a las afueras de la cárcel de Latacunga donde sucedió el último motín. (Foto: SNAI).
Militares a las afueras de la cárcel de Latacunga donde sucedió el último motín. (Foto: SNAI).

Leandro Norero Tigua se hizo famoso cuando en el 2012, el gobierno de la época firmó un acuerdo de paz junto a los líderes de las pandillas carcelarias, incluida Los Ñetas, a la que pertenecía Norero. Hay fotografías de Norero participando en estas negociaciones, así como fotografías acompañado de Rafael Correa y Ricardo Patiño, altos líderes de la denominada como revolución ciudadana. Correa y Patiño, antes presidente y canciller del Ecuador respectivamente, en este momento se encuentran en condición de prófugos del sistema de justicia ecuatoriano.

Tras años de pasar por desapercibido en medio del acuerdo de paz entre las pandillas carcelarias, Norero volvió a ser noticia el 14 de octubre de 2021 cuando fue nombrado en los medios por las amenazas que recibió de otra pandilla denominada como Los Fantasmas. En el mensaje videográfico se aseguraba que Los Fantasmas, Los Samir y Ben 10, organizaciones presuntamente marginadas en el acuerdo de paz impulsado por el gobierno de la época, comenzarían una campaña de exterminio de los integrantes de sus bandas rivales: Los Tiguerones, Los Lobos y Los Lagartos. En el mensaje se acusaba de los destrozos dentro y fuera de las cárceles a Norero y a sus brazos armados. Aquí podría estar el origen de la actual crisis carcelaria que no ha podido contener el gobierno del Ecuador y que ha segado la vida de más de 300 reclusos en las masacres carcelarias.

Siete meses después, Norero fue detenido por la justicia ecuatoriana y trasladado al penal de Latacunga. Un año después, se anuncia su muerte como consecuencia de un nuevo tiroteo durante su encarcelamiento.

En abril de este año, el legislador socialista Ronnie Aleaga fue fotografiado en la piscina de una mansión en Miami, en los Estados Unidos, donde disfrutaba de una fiesta familiar. La foto fue tomada en una propiedad de Xavier Jordán, socio de Leandro Norero. Jordán estuvo involucrado en contratos irregulares con el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social durante el pico de muertes por COVID-19.

Pero la foto de la piscina con Jordán no es la única conexión entre Aleaga y Norero. Ambos, Aleaga y Norero, pertenecen a los Latin Kings y a Los Ñetas respectivamente, bandas carcelarias que en el pasado se han enfrentado por el territorio para la expansión de la industria del narcotráfico, el secuestro y la extorción en Ecuador.

Como parte del acuerdo de paz, cerca de 300 líderes de estas pandillas se afiliaron públicamente a Alianza PAIS, el antiguo partido político del expresidente Rafael Correa, ahora conocido como Revolución Ciudadana.

Uno de los líderes más destacados de los Latin Kings en alcanzar notoriedad fue Aleaga, quien más adelante fue postulado por la organización de Rafael Correa para ocupar una curul en la Asamblea Nacional del Ecuador. Otra figura del correísmo y vinculada en una foto a Javier Jordán es Marcela Aguiñaga, exlegisladora y actual candidata a la prefectura de la provincia de Guayas. Aguiñaga ha asegurado que la foto es una de las muchas tomadas con los ciudadanos que se acercan desde que ocupa funciones públicas.

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