Tras el entredicho por Luciano Castro, Sabrina Rojas y Griselda Siciliani se vieron las caras: ¿qué se dijeron?

A veces no es conveniente sacar los trapitos al sol: ¡puede llamar a la tormenta! Al menos, la mediática. Porque cuando Griselda Siciliani (39) le contó a Susana Giménez que tuvo un romance con Luciano Castro (42), a Sabrina Rojas (37) no le gustó nada. "¿Era necesario?", reflexionó la mendocina, quien tiene tres hijos con el actor.

Quiso la vida -o las obligaciones laborales, más bien- que las dos, Griselda y Sabrina, se cruzaran en un evento: una producción fotográfica realizada por la revista Gente. "¡Está todo re bien!", dijo la ex mujer de Adrián Suar, buscando apaciguar tanto alboroto. "¿Qué hablaste con ella?", le preguntó un cronista de Intrusos. "Cosas nuestras, aclaramos un poco (la situación). Ya habíamos hablado por teléfono. Simplemente nos saludamos, nos vimos. Estuvo bueno", respondió Sicliani.

—¿Le pediste perdón?

—¡Sí, obvio! Le dije que no la quería molestar para nada. Pero Sabri es lo más: ella tampoco le dio tanta importancia.

—¿Luciano se enojó?

—No, no. Ya pasó: fue hace mucho, éramos muy pendejos.

—¿Y por qué lo dijiste?

—Porque me lo preguntaron y me pareció muy descortés decir que no.

—¡Luciano es fachero! No tenés un muerto en el placard…

—Bueno, tampoco es que estoy orgullosa (risas). Pero si te preguntan si tuviste algo con alguien, no lo vas a negar. Es de mal gusto. Pero sí, tiene razón Sabrina. Ahora toda la lista (de ex novios) que tengo… ¡No recuerdo a nadie! Todos olvidados.

De este modo la figura de Sugar, que produce justamente Susana Giménez, intentó evitar un nuevo frente de tormenta. Ya demasiado tiene con la disputa pública con Araceli González y Fabián Mazzei. Aunque ambas, curiosamente, comenzaron con una declaración de Griselda.

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