Nueva York de 1934 sirve de escenario para el imaginario encuentro entre Carlos Gardel y Frank Sinatra en la pieza teatral Cuando Frank conoció a Carlitos. Este musical, escrito por Raúl López Rossi y Gustavo Manuel González, con producción de Héctor Cavallero, continúa en la cartelera de la calle Corrientes, aunque a partir de este jueves 12 de septiembre reestrenará en el Teatro Astral. Con la misma puesta en escena, la obra y su equipo seguirán personificando a las dos leyendas más grandes de la escena musical de todos los tiempos.
“El secreto en el espectáculo es primero tener mucha calidad de lo que se brinda al público”, comienza diciendo Héctor Cavallero, el productor del musical que conmueve al público, desde su estreno, el pasado viernes 5 de julio. “Otras de las razones del éxito es que se trata de una obra muy bien puesta, bien dirigida, con texto inteligente, con protagonistas de primera línea, bailarines increíbles con músicos en vivo. Tenemos un montón de cosas que hacen que el espectáculo sea muy atractivo”, asegura. “Sin embargo, a veces eso no te asegura de ninguna manera el éxito, pero a la gente le ha gustado mucho y el boca a boca ha sido nuestro principal medio de comunicación. El público se va encantado con el espectáculo”, relata entusiasmado.
Cuando Frank conoció a Carlitos también ha despertado el interés de la prensa especializada y es candidata a obtener varios reconocimientos a su labor. “Tenemos 10 nominaciones a los Premios Hugo, estamos en un teatro precioso, vamos a ver si además de los Premios Hugo podemos tener algún Premio Tony”, concluyó entre risas. Cabe destacar que la obra está nominada a mejor musical, dirección general, libro de musical argentino, producción integral, actuación protagónica masculina, arreglos musicales, dirección musical, diseño de escenografía y mejor diseño de luces original.
Ambientada en los estudios de la NBC, la trama sigue a Gardel (interpretado por Oscar Lajad), quien, tras una presentación, se refugia en su camarín huyendo de una mujer a la que prefiere olvidar. Ahí, un joven y ambicioso Sinatra (Alan Madanes) lo sorprende con su admiración y entusiasmo musical. A pesar de la reticencia inicial, la pasión y el carisma de Sinatra conquistan al Zorzal Criollo, estableciendo una conexión artística y emocional.
El musical desborda de emociones y melancolía, con una evidente influencia del tango y toques de foxtrot y jazz, géneros que realzan la atmósfera de la época y la fantasía. Nancy Barbuto, interpretada por Antonella Misenti, también aparece en la obra, añadiendo un elemento romántico y dinámico a la historia. Gardel, con 43 años, ofrece a Sinatra, de 19, valiosos consejos, incentivándolo a participar en un concurso de talentos, lo que desencadena una serie de eventos con consecuencias históricas y trágicas.
Por su historia y la dedicada presentación escénica, la obra ha sido un éxito. Raúl López Rossi, uno de los autores, expresó su sorpresa y satisfacción con la recepción del público: “La obra despierta emociones que nos sorprenden… Son tangos que tenemos metidos en el alma y en el espíritu y nos remueven un montón de sentimientos”, señaló en diálogo con Teleshow.
Las redes sociales han sido un termómetro para medir el impacto emocional en los espectadores, muchos de los cuales han compartido recuerdos y experiencias personales relacionadas con la música de Gardel y con el ambiente de época. Los creadores y el equipo de producción también se han mantenido cercanos al público, asistiendo a varias funciones e interactuando con los asistentes.
López Rossi también destacó la tentación de hacer cantar a Sinatra sus clásicos, pero aclaró firmemente que no cederán a esa presión. “My Way” no tiene cabida en esta historia, a pesar de las insistentes solicitudes de algunos espectadores.
Desde sus modestas raíces en un teatro de San Telmo para 70 personas y pasando por una etapa de streaming con Disney, la trayectoria de Cuando Frank conoció a Carlitos ha sido fructífera y transformadora. El objetivo es que la obra se mantenga en la cartelera porteña durante el verano, atrayendo a turistas extranjeros y, eventualmente, soñar con llevarla a escenarios internacionales, con Nueva York como destino inevitable.
Oscar Lajad y Alan Madanes han puesto al servicio de la pieza su talento y dedicación. Lajad, con más de 20 años interpretando a Gardel, ha encontrado en este rol un equilibrio entre la caracterización fiel y la profundidad emocional. Madanes, por su parte, ha asumido el desafío de representar a un joven Sinatra, navegando con habilidad entre lo conocido y lo innovador en su interpretación.
En una entrevista con este medio, Lajad se refirió a su proceso de construcción del personaje, en donde destacó la importancia de los testimonios y la investigación: “Lo construimos a partir de los testimonios que rescatamos… Es alguien a quien admiro y me hubiese encantado conocer”. Madanes también compartió su pasión por investigar y adaptarse a la figura de Sinatra, logrando una interpretación auténtica y resonante.
El cuerpo de baile y la atmósfera dual del camarín y la azotea de la NBC completan una puesta en escena que transporta al público a un viaje emocional e histórico. La interacción final entre Gardel y Sinatra encapsula un momento de amistad, enseñanza y melancolía, acentuando la calidad artística y la profundidad de la obra, que cautiva por la magia de este encuentro imaginario que, finalmente, se hace realidad, aunque sea sobre el escenario.
Teatro Astral
Avda. Corrientes 1639.
De miércoles a sábados 20 hs, y domingos 18,30 hs.
Información y entradas: