Cómo reducir el consumo energético del Smart TV sin tener que desconectarlo por las noches

Ajustes de brillo, contraste y modos de ahorro de energía permiten que puedas tener más tiempo prendido el televisor

Guardar
Los ajustes se deben hacer
Los ajustes se deben hacer para que el Smart TV no gaste tante energía. (Imágen ilustrativa Infobae)

Reducir el consumo de energía del Smart TV sin desconectarlo es posible gracias a una serie de ajustes internos que fabricantes y especialistas recomiendan aplicar para optimizar su rendimiento. Estos cambios permiten disminuir el gasto eléctrico sin alterar el funcionamiento habitual del televisor ni comprometer su vida útil.

En los últimos meses, diversas compañías tecnológicas han resaltado que no es necesario desenchufar el Smart TV cada vez que deja de utilizarse para evitar el llamado “consumo fantasma”, una práctica que se volvió común en muchos hogares. En su lugar, proponen revisar configuraciones internas que actúan directamente sobre los componentes que más energía requieren, especialmente aquellos relacionados con la pantalla y las conexiones inalámbricas.

La preocupación por el gasto energético de los televisores se incrementó debido a su presencia constante en el día a día. En hogares con varios integrantes o en familias que dedican varias horas al entretenimiento audiovisual, el Smart TV se ha convertido en uno de los electrodomésticos más usados.

El Smart TV se convirtió
El Smart TV se convirtió en un electrodoméstico que la familia usa a diario. (Imágen ilustrativa Infobae)

Esto genera la percepción de que su funcionamiento está estrechamente vinculado a un aumento significativo en la factura eléctrica. Sin embargo, especialistas señalan que el consumo puede controlarse mediante ajustes simples disponibles en la mayoría de modelos actuales.

Uno de los cambios más efectivos se encuentra en la configuración del brillo. Las pantallas, al igual que ocurre en los teléfonos móviles, demandan menos energía cuando el nivel de brillo está reducido. La mayoría de televisores modernos incluyen un modo “ECO” o de ahorro que modifica automáticamente esta configuración para optimizar el uso energético. En estos casos, el dispositivo regula el brillo según las condiciones de iluminación del entorno, lo que permite un rendimiento más eficiente sin que el usuario note diferencias importantes en la calidad de imagen.

Para modelos que no disponen de herramientas automatizadas, fabricantes como Sony recomiendan realizar estos ajustes de manera manual. Reducir el brillo y el contraste puede disminuir el consumo sin afectar de forma notable la experiencia visual. Según la compañía, este tipo de cambios es suficiente para mantener un equilibrio entre eficiencia energética y buena calidad de imagen. Además, estos ajustes no comprometen el estado del panel ni aceleran su desgaste.

Reducir el brillo y contraste
Reducir el brillo y contraste de la TV puede ayudar a ahorrar energía. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Otra recomendación señalada por especialistas consiste en revisar las conexiones activas en segundo plano. Funciones como el WiFi o el Bluetooth permanecen encendidas incluso cuando el televisor no se está utilizando, lo que genera un consumo adicional que pasa desapercibido para la mayoría de usuarios. Compañías como LG han advertido que mantener activados estos servicios cuando no se necesitan representa un gasto innecesario y que deshabilitarlos puede contribuir a un uso más eficiente del dispositivo.

Estas conexiones suelen utilizarse para sincronizar el televisor con aplicaciones, dispositivos externos o funciones inteligentes. Aunque resultan útiles para quienes interactúan constantemente con plataformas de streaming o asistentes virtuales, no siempre son indispensables. Desactivarlas cuando no cumplen un rol específico puede reducir el consumo sin afectar la operatividad general del televisor.

Además de estos ajustes, mantener el dispositivo actualizado también influye en su rendimiento energético. Las actualizaciones de software que distribuyen las marcas suelen incorporar mejoras en la gestión de procesos internos y optimización de funciones, lo que facilita un uso más eficiente del hardware. De igual forma, se recomienda revisar periódicamente los modos de imagen, ya que algunos perfiles —como el modo vívido o dinámico— requieren más energía para producir colores intensos y altos niveles de brillo.

No es necesario que desconectes
No es necesario que desconectes tu Smart TV para que ahorres energía. (Imagen ilustrativa Infobae).

Estas recomendaciones permiten que los usuarios mantengan el Smart TV conectado de manera segura y sin generar un gasto excesivo. Los especialistas coinciden en que no es necesario recurrir a la desconexión total para cortar el consumo, siempre que se apliquen configuraciones enfocadas en optimizar el funcionamiento del panel y de las funciones inalámbricas.