Cuáles son los 5 empleos más originales del sector tecnológico

No todos los empleos en tecnología implican escribir código o asistir a reuniones virtuales desde una oficina. Aunque gran parte del sector se asocia a desarrolladores, ingenieros de software o ejecutivos de proyectos, existe una gama de ocupaciones que se alejan de ese esquema tradicional. Algunos de estos trabajos se asemejan más a actividades lúdicas o incluso a oficios soñados

A continuación, una selección de cinco empleos reales en el sector tecnológico que destacan por su especificidad, su vínculo con tecnologías emergentes y por ofrecer condiciones laborales distintas a las que suelen asociarse con la industria digital.

Uno de los empleos más conocidos fuera del circuito tradicional es el de probador de videojuegos. Su función consiste en jugar títulos en desarrollo para detectar errores, analizar la estabilidad del sistema y verificar que la experiencia de usuario se ajuste a los estándares requeridos antes del lanzamiento.

Aunque no implica tareas de programación, sí demanda conocimientos técnicos básicos sobre sistemas y consolas, así como la capacidad de elaborar reportes detallados para los desarrolladores.

Este tipo de trabajos suele encontrarse en estudios de videojuegos o empresas tercerizadas por grandes editoras. Según datos de Glassdoor y ZipRecruiter, los salarios anuales oscilan entre 30.000 y 70.000 dólares, dependiendo del nivel de experiencia, la región y la empresa contratante.

Con el crecimiento de los entornos inmersivos, desde videojuegos hasta simuladores médicos, el rol del diseñador de experiencias en realidad virtual ha ganado relevancia.

Su trabajo consiste en crear escenarios tridimensionales que respondan de forma coherente a los movimientos del usuario, mediante el uso de motores gráficos, sensores y dispositivos de realidad virtual.

Este empleo combina habilidades en diseño visual, interacción hombre-máquina y comprensión de narrativas inmersivas.

Según datos del mercado laboral estadounidense, los ingresos anuales pueden superar los 80.000 dólares, especialmente en sectores vinculados a la salud, la defensa o la educación.

Al margen de las oficinas o los laboratorios, existen técnicos encargados de instalar tecnología en condiciones geográficas o ambientales exigentes.

Es el caso de quienes colocan sensores en torres de telecomunicaciones, sistemas electrónicos en parques eólicos offshore o equipos de monitoreo en regiones de difícil acceso.

Estos trabajos requieren certificaciones específicas y entrenamiento físico, además de una comprensión técnica del equipo a instalar.

De acuerdo con el sitio EmpleosSemanal.com, un técnico especializado en mantenimiento de turbinas eólicas marinas puede percibir entre 50.000 y 100.000 dólares anuales, dependiendo del proyecto y la localización.

Otro perfil cada vez más requerido es el del probador de dispositivos tecnológicos. Este profesional analiza equipos como teléfonos inteligentes, relojes inteligentes, cámaras u otros aparatos conectados, antes de su comercialización.

Aporta informes sobre funcionalidad, rendimiento, facilidad de uso y durabilidad del producto, para que las marcas puedan ajustar sus lanzamientos.

Algunos testers trabajan de manera independiente bajo contrato, mientras que otros forman parte de equipos internos de aseguramiento de calidad.

Según datos recopilados por CVProfi, los ingresos anuales pueden ubicarse entre los 40.000 y 90.000 dólares, especialmente si el tester cuenta con experiencia previa o certificaciones en pruebas de hardware.

La industria del entretenimiento, que incluye videojuegos, películas y experiencias en línea, depende de profesionales que dominan la creación de efectos visuales.

Este empleo involucra la generación de animaciones digitales, modelado en 3D, simulaciones físicas y técnicas de posproducción audiovisual.

Quienes se dedican a este campo emplean herramientas como Blender, Maya o Unreal Engine, y colaboran con diseñadores, editores y programadores para producir escenas visuales.

Los salarios, según el tipo de producción y la experiencia del profesional, pueden superar los 70.000 dólares anuales.

Estos cinco perfiles reflejan cómo la expansión del sector tecnológico ha dado lugar a ocupaciones que combinan habilidades técnicas con tareas prácticas, creativas o situadas fuera del entorno tradicional de oficina.