Juan Grabois, sobre la designación de Miguel Ángel Pichetto: "Fue un caso de prostitución política"

El dirigente social se mostró crítico del Gobierno y su nuevo exponente, analizó su relación con Alberto Fernández y aseguró que, si la decisión fuera suya, no pagaría la deuda con el FMI por al menos dos años

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El dirigente social y líder del Frente Patria Grande, Juan Grabois, se mostró extremadamente crítico de la decisión de  Miguel Ángel Pichetto de convertirse en compañero de fórmula de Mauricio Macri: dijo que constituye un caso de "prostitución política".

En diálogo con Luis Novaresio en "LNE", que se emite por A24, Grabois describió su relación con la ex presidente Cristina Kirchner y Alberto Fernández, se mostró a favor de la llegada de Sergio Massa al frente opositor que integra e indicó que, si la decisión fuera suya, no pagaría la deuda contraída con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por al menos dos años.

En primera instancia, Grabois criticó "cierta liviandad" en el peronismo ante la decisión de Pichetto de aceptar el ofrecimiento del oficialismo. "Fue un caso de prostitución política. Era el jefe de la bancada opositora principal y se vendió por un cargo. Hizo lo que hace que yo no pueda hablar de política con mis compañeros de los movimientos sociales, porque me dicen que no sirve para nada", fustigó.

Además, aseguró que el senador está intentando asemejarse al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro. Para fundamentar su postura, hizo referencia a la reciente declaración en la que, en el Pre-Coloquio Idea de Vaca Muerta, expresó que "la Argentina necesita más emprendedores tecnológicos y menos cartoneros".

Miguel Ángel Pichetto (Fabian Ceballos)
Miguel Ángel Pichetto (Fabian Ceballos)

"Intenta polemizar con lo que representamos los movimientos sociales. Macri vendría a representar la modernidad de Mercado Libre y (Marcos) Galperín y el resto, el Frente de Todos, el atraso de los cartoneros. Que de hecho los cartoneros son un símbolo de la dignidad, de la resistencia a vivir de un plan", disparó Grabois.

"La estigmatización como signo de atraso lo pone a un nivel con el que yo tengo que confrontar", agregó.

El dirigente luego posó la mirada en el espacio electoral que integra. Halagó la decisión de Cristina Kirchner de no competir por la presidencia -"fue una muestra de renunciamiento en un momento donde nadie renuncia a nada"- y aseguró que la candidatura de Alberto Fernández "no es un sapo a digerir".

"No lo conozco en profundidad, pero hay una cosa que me gustó. Me confesó que no sabe sobre temas de economía popular, de los pueblos originarios, las villas. Pero quiere aprender, conocer. Me dijo que para él es un tema importante y espero que en ese sentido haya sido sincero", describió.

Alberto Fernández (Nicolás Stulberg)
Alberto Fernández (Nicolás Stulberg)

Sin embargo, concedió que él hubiera preferido que la candidata fuera la ex Presidente por dos razones. En primer lugar, indicó que "ella es un signo de contradicción y, en contraste, Alberto descomprime".

"Hay mucha gente en Argentina que cree que hay que descomprimir las contradicciones políticas. Yo no soy uno de ellos. Creo que hay que desarrollarlas para resolver las contradicciones sociales, que son realmente graves. Si hay una grieta acá, no es entre Macri y Cristina, sino entre los que están pasando hambre y el 1% de la población que se enriquece a través de monopolios y privilegios", abundó.

En segundo lugar, consideró que "el año que viene va a ser muy difícil y Cristina va a ser una garantía de coraje para enfrentar a las corporaciones y renegociar la deuda, que es lo que hay que hacer".

De hecho, el dirigente aseguró que si la decisión fuera suya, no la pagaría: "Estaría en pie de guerra con el FMI. Si me tienen que voltear, que me volteen. Pero quiebra el fondo también, porque Argentina es el principal acreedor".

En otro pasaje de la entrevista, Grabois se mostró a favor de la llegada de Sergio Massa al Frente de Todos. "Tengo buena onda. No tengo demasiado problema con nadie en el frente en la medida que no sea un fascista, antipobre. Me alegra desde el punto de vista electoral. Espero que ponga su enorme inteligencia al servicio de un proyecto para las mayorías", dijo.

Finalmente, el dirigente concluyó el diálogo al asegurar que desde que tomó un rol más activo en la política partidaria, se autoexcluyó de "cualquier actividad remotamente ligada" al papa Francisco. "Estoy cansado de que me usen para atacar al Papa. Él ejerce su influencia a través de planteos de naturaleza general. Nos comunicamos mediante carta cada dos meses", explicó.

La entrevista completa: