Tensión entre Germán Garavano y la presidente de asociación de magistrados en la cena de fin de año por el Impuesto a las Ganancias

La magistrada María Lilia Gómez Alonso de Díaz Cordero habló del Impuesto a las Ganancias y el ministro respondió. Además, hubo un pedido del Gobierno a los jueces por los hechos de violencia

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(Maximiliano Luna)
(Maximiliano Luna)

El gobierno nacional y la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional (AMFJN), la entidad que nuclea a los jueces y fiscales nacionales y federales, tuvieron un año tenso. El motivo central fue la aplicación del Impuesto a las Ganancias para los integrantes del Poder Judicial, un reclamo de la sociedad para que sea efectivo el "todos somos iguales ante la ley". La tensión estaba reservada a las reuniones privadas entre las partes. Pero eso fue hasta ayer.

La AMFJN celebró en un hotel de Puerto Madero su cena de fin de año. En los discursos hubo cruces entre la presidente de la AMFJN, la jueza de la Cámara Comercial, María Lilia Gómez Alonso de Díaz Cordero, y el ministro de Justicia de la Nación, Germán Garavano. La magistrada mostró el enojo de la entidad con temas puntuales y el ministro de Justicia no se quedó callado.

Nadie se atragantó con el salmón, el ojo de bife ni el domo de chocolate que se sirvió. Antes de la comida, desde un atril, Gómez Alonso de Díaz Cordero dio la bienvenida y leyó su discurso, en el que comenzó con un repaso por los temas institucionales que la AMFJN trabajó durante el año. Luego llegaron los reclamos.

María Lilia Gómez Alonso de Díaz Cordero (Maximiliano Luna)
María Lilia Gómez Alonso de Díaz Cordero (Maximiliano Luna)

"Debimos encarar el tema del alcance interpretativo de las normas que fijaron el impuesto a las ganancias para los jueces, funcionarios y empleados con el fin de que no se afectaran los derechos de quienes transitaban la carrera judicial. E iniciamos las acciones legales cuando se concretaron los primeros descuentos sin que la ley hubiera sido reglamentada", dijo Gómez Alonso de Díaz Cordero, que así generó los primeros aplausos desde las mesas del Hotel Alvear Icon de Puerto Madero.

En otro tramo del discurso, la presidente celebró que el Consejo de la Magistratura de la Nación haya avanzado en cubrir los cargos vacantes de jueces, pero señaló que se debe insistir con que eso ocurra "en los tiempos que exigen la realidad y la ley". Sobre el Consejo, Gómez Alonso de Díaz Cordero dijo que el organismo debe ser modificado, pero reclamó que sea encabezado por un juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. El Gobierno tomó el proyecto del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal para reformar el Consejo que no contempla la presencia de un integrante del máximo tribunal. "La Corte no quiere ir al Consejo", dicen los que participaron de la elaboración de la iniciativa.

El turno de Garavano

Luego habló el ministro de Justicia: "Agradezco la invitación, a pesar de las diferencias que seguramente seguiremos teniendo", señaló, antes de recordar sus 20 años en el Poder Judicial y cómo de chico su padre lo llevaba al Palacio de Tribunales. Después dejó lo que el protocolo indica para una cena de celebración y respondió.

"No nos tenemos que sentir agredidos porque el Congreso apruebe una ley de Ganancias", señaló Garavano; la frase provocó murmullos en las mesas.

Germán Garavano (Maximiliano Luna)
Germán Garavano (Maximiliano Luna)

El Congreso Nacional aprobó el año pasado una ley para que los integrantes del Poder Judicial paguen impuesto a las Ganancias. La norma establecía que ese tributo regía para los jueces que ingresen al cargo desde el 1 de enero de 2017. La discusión se dio sobre si también se aplicaba para los funcionarios que ya estando en el Poder Judicial pasen a ser magistrados. La AMFJN se oponía.

El Consejo de la Magistratura sacó una resolución para que se aplique para todos, pero la Asociación presentó un amparo que en primera instancia fue aceptado. El caso fue apelado y está bajo revisión.

En su discurso, Garavano también defendió el trabajo del gobierno de Mauricio Macri en la cobertura de vacantes de jueces. Señaló que este año enviaron al Senado el nombre de 90 candidatos a jueces y que ayer mismo había firmado otra tanda de postulantes, por lo que el 2017 lo cerraban con más de 100. Sobre el tema, destacó que hay muchos candidatos competitivos, por lo que es difícil elegir entre todos. A los que no fueron designados el ministro les hizo un pedido: "Sigan participando".

Por último, Garavano habló de los incidentes ocurridos un día antes en el Congreso, cuando se aprobó la ley de reforma previsional, y  señaló: "Los hechos de violencia que vivimos son trágicos y no podemos volver al pasado. La justicia en esto juega un rol fundamental".

Los discursos los escucharon jueces de todos los fueros e instancias, integrantes del Consejo de la Magistratura y funcionarios nacionales y de la provincia de Buenos Aires. En la cena estuvieron el juez de la Corte nacional Carlos Rosenkrantz; el de la ciudad de Buenos Aires Luis Lozano; la de la provincia de Buenos Aires Hilda Kogan. También la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich; el secretario de Legal y Técnica de Presidencia, Pablo Clusellas; el viceministro de Justicia nacional, Santiago Otamendi; y el ministro de Justicia bonaerense, Gustavo Ferrari.

Hubo mucha presencia de jueces de Comodoro Py, con un protagonismo central este año por las detenciones de ex funcionarios como Amado Boudou y Julio De Vido; o los empresarios Cristobal López y Fabián De Sousa y el pedido de desafuero de la ex presidente Cristina Kirchner.

Carlos Rosenkrantz. (Maximiliano Luna)
Carlos Rosenkrantz. (Maximiliano Luna)

No estuvo ninguno de los jueces de primera instancia que tomaron esas decisiones. Sí concurrieron el camarista federal Leopoldo Bruglia y los jueces de la Cámara Federal de Casación Penal Carlos Mahiques y Liliana Catucci. Hubo concurrencia casi total de los jueces de los tribunales orales federales, que son los encargados de hacer los juicios por corrupción.

El brindis de cierre estuvo a cargo del juez de la Corte Carlos Rosenkrantz. "La Argentina es un país curioso. A los argentinos nos cuesta admirar. Brindo para que la Argentina pueda admirar a su Poder Judicial", dijo el juez y todos levantaron su copa de champagne.