El militante de La Cámpora que quiere convencer al dictador norcoreano de ir una Tercera Guerra Mundial

La increíble historia de Lim Zul, el argentino que se formó en Cuba, militó en el kirchnerismo y se fue a vivir a Corea del Norte convencido de que ahí está surgiendo un nuevo orden mundial. Humor político

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"Cuando se divide Corea luego de la Segunda Guerra Mundial, mi familia se separa. La mitad quedó atrapada en Corea del Norte bajo el régimen soviético y, la otra mitad, en Corea del Sur, que sucumbió al dominio de los Estados Unidos. La situación no era sencilla ya que mi padre, proveniente de la dinastía Zul, comenzó a ser perseguido por el régimen. En ese momento decidió huir en barco al primer destino con mi madre embarazada y a los pocos meses nací yo en Buenos Aires, bajo el nombre de Lim Zul, lo que marcó a fuego mi infancia" cuenta uno de los políticos más encumbrados dentro del régimen comunista de Corea del Norte, quien se crió en el barrio de Barracas y cursó sus estudios distintas escuelas del Estado. "Confieso que de chico la pasé muy mal. Al tener el mismo nombre del famoso jabón en polvo, mis compañeros me repetían todo el día: "Che Lim Zul, ¿querés lavar algo? Andá a lavarte el or…"

Resulta imposible no tocar el tema PepsiCo y la toma de la planta de Vicente López por parte de agitadores de izquierda y sindicalistas con uno de los generales de mayor rango en el ejército coreano, quien está acostumbrado a un país que brilla por el orden. "Esta es una de la razones por las que me fui de la Argentina. Yo crecí bajo el régimen de Perón y Evita, dos líderes prusianos acostumbrados a conseguir la voluntad de las masas como sea. Néstor y Cristina, en cambio, fueron dos blanditos. Mucho derecho humano, mucha Madre de Plaza de Mayo, mucho Zaffaroni, todo eso generó la cultura del dejar seguir y no meterse. ¿Sabés por qué acá en Corea del Norte no pasa nada de esto? Por el orden que hablábamos. Si un tipo bosteza en un discurso de nuestro líder, va directo al paredón. ¿Te imaginás lo que pasaría con estos muchachos que tomaron la planta? Te los terminás comiendo en la siguiente partida de galletitas Toddy. Van directo a la máquina y no te enterás nunca más. Así funciona, viejo" dice con tono enérgico este argentino que cuesta encasillar por su aspecto marcadamente oriental y sus frases que delatan un pasado porteño: "Máximo es un cuatro de copas", "Ottavis tiene menos calle que Venecia", entre otros comentarios que dejan en claro que no guarda buenos recuerdos de su paso por La Cámpora ("es que no le ganan una elección ni a Del Caño estos muchachos, son una tragedia").

Un jovencito Lim Zul lideró uno de los pelotones más sangrientos de Sierra Maestra. Fidel Castro lo adoraba y lo apodó “el ponja”
Un jovencito Lim Zul lideró uno de los pelotones más sangrientos de Sierra Maestra. Fidel Castro lo adoraba y lo apodó “el ponja”

Cuesta creer que un cuadro político formado en la doctrina castrista, quien estuvo en Bahía de Cochinos con tan sólo 15 años al frente de uno de los pelotones que decidieron la libertad de Cuba, no tenga una opinión formada sobre el conflicto de Venezuela. "Chávez era como Fidel y el "Che", uno de esos tipos capaces de convencerte que llovía cuando había un sol radiante. En cambio Maduro es un títere de Raúl Castro que fue la eterna sombra de su hermano mayor. Un dictador en serio asesina a inocentes y lo disfruta. No deja correr el rumor de que lo van a asilar en la embajada de Rusia o será recibido en España por este partidito llamado Podemos. Nicolás Maduro es un socialista de cotillón, por eso me vine a Corea del Norte. Acá no se respira libertad y esa es la clave de una verdadera Revolución".

A pesar de su franqueza, que raya con la crueldad, cuando surge el tema de la detención de Lula da Silva se lo nota incómodo. "Brasil tiene la mala costumbre de sobreactuar la condena a sus ex presidentes por temor a ser tildados de corruptos. ¿Si no cómo se explica que Michel Temer logre que condenen a Lula por 9 años y medio? Es como si Alí Babá le diera cadena perpetua a los 40 ladrones". Un amigo de la infancia en Barracas, que mantiene cierto contacto con Lim Zul, sorprende cuando cuenta cómo se refiere al presidente argentino. "Le pongo una ficha a Mauricio. No le tiembla el pulso a la hora de mandar a la Gendarmería para desarmar piquetes, manifestaciones o tomas de fábricas". Para rematar con un "Macri basura, vos sos la dictadura, es un lindo posicionamiento".

“Ese que está ahí tiene un Samsung 8”, señala Kim Jung un, el supremo líder del norte, implacable con aquellos que contrabandean productos de Corea del Sur
“Ese que está ahí tiene un Samsung 8”, señala Kim Jung un, el supremo líder del norte, implacable con aquellos que contrabandean productos de Corea del Sur

Fuentes cercanas a Cancillería reconocen que durante la reunión del G20 en Hamburgo la semana pasada, el momento más tenso se dio entre Vladimir Putin y Donald Trump, quienes casi se toman a golpes de puño cuando surgió el tema de Lim Zul. Como era de prever, el mandatario ruso enalteció la figura de lo que él llama "el último romántico", una persona capaz de dar la vida por el régimen y perseguir hasta abajo de la cama a quien se mueva un milímetro del objetivo marcado por su líder Kim Jung-un. A tal punto llega su obsesión con la vecina Corea del Sur, que ya causa preocupación entre los jerarcas del partido comunista. Por su parte, Donald Trump fue lapidario: "un coreano que habla argentino, que fue entrenado por Fidel Castro, es simpatizante de Hugo Chávez y formó parte del kirchnerismo, es lo más parecido al anticristo".

Este excéntrico personaje, desconocido por el común de la gente, pero un referente en las altas esferas de la política global, confiesa que "los helados Melona del barrio chino, me vuelven loco". Pero, sobre todo, extraña las campañas electorales. "Verla a Cristina en un escenario montado en el centro, improvisando un discurso moderado ante poca gente, sin banderas partidarias y pidiendo que bajen el olor a choripán de la pantalla, es el triunfo de Duran Barba y Marcos Peña", demostrando que sigue pendiente de lo que sucede en su país de nacimiento. Miralo a Lim Zul, resultó ser un nostágico.