Con las rodillas y manos sobre el césped, Kevin Serna reposa en la hazaña que gestó en el Allianz Parque de Sao Paulo y no puede evitar romper en llanto. No son lágrimas de tristeza las que salen de sus ojos, tampoco de felicidad exactamente. Esas lágrimas, pues, son el puro reflejo del enrevesado camino que atravesó para llegar a ser quien es hoy: el héroe inesperado del Fluminense.
Pocos años atrás no hubiera imaginado un escenario igual. El contexto era completamente distinto para él. Incluso, pudo no haberse dedicado al fútbol, pero el destino le tenía preparado grandes cosas dentro de la cancha y a sus 26 años lo está experimentando.
A sus tempranos 18, Kevin ya no veía un futuro profesional con la pelota en sus pies. Por más que se esforzaba, no encontraba la morada perfecta para explotar su talento y darse a conocer. Por un tiempo, dio un paso al costado y se dedicó a otros trabajos para solventarse. Claro, seguía jugando, pero únicamente en torneos de nivel amateur en los que le pagaban nada comparado a lo que hoy gana.
“Por circunstancias de la vida me había alejado del fútbol, me estaba dedicando a otras cosas, a trabajar en otras cosas que me llenan de orgullo y que me formaron como persona. Trabajé en un restaurante, vendiendo libros, en una chatarrería, estuve trabajando así un tiempo”, narró en una entrevista para TV Perú Deportes.
Con la motivación de su familia y amigos, decidió intentarlo una vez más y no decepcionó. Serna comenzó a tejer sus sueños y pasó por una senda llena de tribulaciones, pero ha sabido salir airoso en cada dificultad que se le presentó.
Para perseguir su anhelo, tuvo que dejarlo todo en su país natal (Colombia) y aventurarse en Portugal, tomando todos los riesgos de ello. Las cosas no salieron bien. Le prometieron muchas cosas que no fueron cumplidas en un equipo llamado Perafita FC, en Porto. Incluso, pasó hambre con un grupo de chicos que también aspiraban hacerse un nombre en Europa.
A pesar de ello, siguió trabajando y encontró una gran oportunidad en Paraguay, con el Sportivo Luqueño, donde ya pudo dar inicio a su carrera profesional con casi 22 años encima. Para ser su debut, la edad estaba un poco avanzada, pero eso era lo que menos importaba. Serna se hizo un espacio importante en ese equipo, pero igualmente lo dejaron ir porque querían a un jugador más experimentado en su posición. Otra vez la vida le daba la espalda. Pero el error no fue suyo, sino del club.
Perú como impulso de su carrera
“Hay golpes en la vida tan fuertes”, decía César Vallejo, y Kevin Serna lo supo muy bien en todo momento. Pero el colombiano resistió cada impacto con vigor, le puso la cara a la desdicha, y encontró una fuente de prosperidad. ¿En dónde? En el Perú. Pero tuvo que empezar de cero una vez más.
Era febrero del 2021, cuando se le abrieron las puertas del país. Fue Cultural Santa Rosa (hoy llamado Los Chankas) el club que apostó por sus servicios en la Liga 2 para buscar su ascenso a la máxima categoría del fútbol peruano. Kevin no defraudó: logró su cometido en su primer año con 11 goles y nueve asistencias y su nombre comenzó a sonar con fuerza en diferentes rincones.
Ya en Primera, tuvo que continuar con sus andanzas con el ADT de Tarma, donde la rompió por dos temporadas consecutivas. En el 2023, se lució con un gol maradoniano que le permitió adjudicarse el premio del mejor tanto del campeonato. Pero eso no es todo. El gran rendimiento que sostuvo con los tarmeños generó que uno de los equipos más grandes del Perú se fijara en él: Alianza Lima.
Serna llegó al club ‘íntimo’ y se le abrieron más puertas. No por casualidad solo permaneció seis meses en La Victoria. Dos goles en dos partidos contra Fluminense en la Copa Libertadores avizoraban un ‘plot twist’ en su historia. Y sucedió. El elenco brasileño desembolsó casi tres millones de dólares para tener a su “pesadilla aliancista” en sus filas. El resto es historia.
Serna, con dos goles claves en las últimas dos fechas del Brasileirao, no solo salvó del descenso al ‘Flu’, sino que también lo clasificó a la Copa Sudamericana 2025. Es el paladín del ‘tricolor’. Su nombre estaba prescrito en esta gesta increíble. Y ahora, él seguirá trazando su circuito hacia la gloria futbolística. Ya demostró por completo que está hecho para cosas mucho más grandes a las que en un inicio se le negaban.