El ejército digital del alcalde de Ate: cómo Franco Vidal convirtió a sus seguidores en un arma para amedrentar a la prensa

Chats organizados, pagos encubiertos y ataques coordinados: la investigación del IPYS revela la estructura oculta detrás de la comunidad digital que ejecuta campañas de intimidación contra reporteros críticos en Lima Este

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Mensaje de advertencia difundido por
Mensaje de advertencia difundido por miembros del “Vidal Army” tras la publicación de un reportaje crítico. | Composición: IPYS/ Infobae Perú

El distrito de Ate en Lima ha visto surgir una forma inédita de presión contra el periodismo local. Franco Vidal, un joven alcalde que ha consolidado su figura tanto en la política como en las plataformas digitales, preside una comunidad que no solo sigue cada uno de sus directos, sino que también participa activamente en campañas de intimidación dirigidas a quienes cuestionan su gestión. A sus veinticinco años, Vidal ha convertido su popularidad como streamer en una herramienta política poderosa, capaz de movilizar a cientos de seguidores en defensa de su imagen.

El equipo de investigación del IPYS detectó una red coordinada que responde a indicaciones del alcalde. Esta red, identificada como “Los Dibujitos”, se encarga de hostigar a periodistas y críticos, desplegando amenazas, saturando redes sociales con mensajes adversos y filtrando información privada de sus objetivos. Durante seis meses, la investigación del IPYS rastreó la actividad de esta maquinaria virtual que utiliza incentivos económicos y una estructura jerárquica bien definida.

Franco Vidal y el surgimiento de los “Dibujitos”

Al asumir la alcaldía en enero de 2023, Franco Vidal Morales se convirtió en el alcalde más joven de Lima Metropolitana. Si bien su entrada en la política fue discreta, su verdadero salto a la notoriedad ocurrió cuando transformó sus transmisiones en vivo en Kick en un canal de promoción constante y contacto directo con sus seguidores. Con más de 250.000 seguidores en la plataforma, Vidal no dudó en designar a su comunidad digital como “Los Dibujitos”, un grupo que evolucionó de jugar videojuegos a conformar un núcleo leal en línea.

El propio alcalde ha ofrecido reiteradamente respaldo público a este grupo, invitando a sus integrantes a sumarse a chats grupales en WhatsApp y Discord, espacios donde se gestan las campañas digitales. Un registro obtenido por el IPYS ofrece evidencia de cómo se organizan las acciones y cómo los participantes son seleccionados y motivados para volcarse contra figuras de la prensa.

Organización interna y financiamiento digital

Los espacios virtuales que conforman el núcleo operativo están divididos en chats específicos con funciones diferenciadas. “Vidal Army Oficial” en WhatsApp, administrado por Jordan Bellido Rengifo y César Negrón Vargas, no solo permite el monitoreo de los debates internos, sino que también sirve como plataforma para coordinar respuestas rápidas ante críticas o investigaciones periodísticas. A estos administradores se suma el usuario “Homeless Dota”, encargado de gestionar también el servidor de Discord “Franco Vidal 9k”.

Ambos grupos permiten la segmentación de tareas y roles. En Discord, donde convergen cerca de 850 usuarios, existen canales y subgrupos como “Cliperos Constantes Grupo General”, “Sala de Espera” y “Cliperos Oficial”. Este esquema facilita el control de calidad del material digital y la gestión de los contenidos a publicar, según revela la documentación obtenida por el IPYS.

El sistema de incentivos no solo abarca recompensas monetarias. Los cliperos pueden acceder a un sistema de puntos canjeables por productos que van desde artículos electrónicos hasta alimentos. Este mecanismo de premios, avalado públicamente por el propio Vidal en transmisiones, fomenta la participación masiva y la creación de videos que eleven su imagen pública. De acuerdo con las piezas verificadas por el IPYS, la producción de estos clips está sujeta a normas estrictas: no se permite la promoción de otros alcaldes ni el uso de bots para inflar cifras de vistas.

Mensaje de advertencia difundido por
Mensaje de advertencia difundido por miembros del “Vidal Army” tras la publicación de un reportaje crítico. | IPYS

La propia municipalidad se ve implicada en esta maquinaria con miembros como Terry Minaya Torres, quien figura como creador y administrador del chat “Los Cliperos” y ha recibido contratos municipales durante la gestión de Vidal. Las conversaciones intervenidas muestran cómo la producción de contenido y la gestión de los grupos mantienen una supervisión directa desde la oficina del alcalde; es él quien regulariza pagos y aprueba incentivos.

De la presión digital al hostigamiento directo

La dinámica de los ataques coordinados parte de una reacción casi automática de los integrantes de “Los Dibujitos” ante cualquier contenido que cuestione la imagen de Franco Vidal. El equipo de IPYS documentó cómo los miembros del grupo identifican a los periodistas críticos y, en cuestión de horas, movilizan sus recursos virtuales para saturar las redes sociales de las víctimas con mensajes agresivos, amenazas de muerte y frases cargadas de advertencias veladas.

El hostigamiento digital trasciende la frontera de lo virtual mediante acciones de doxing, es decir, la difusión no autorizada de información personal del periodista afectado y de su entorno familiar. Las víctimas, además de recibir insultos y amenazas directas, relataron el acceso no autorizado a datos sensibles como números de DNI, direcciones, información laboral y hasta datos de sus hijos.

En diversos casos denunciados por IPYS, la presión escaló con llamadas telefónicas de números desconocidos que hostigaron a los comunicadores durante horas. En los ataques más graves, los integrantes de la red digital realizaron múltiples denuncias falsas a las operadoras telefónicas de los periodistas, provocando el bloqueo de sus líneas celulares. Esta táctica no solo obstaculizó su labor, sino que expuso a sus familias a situaciones de riesgo e incomunicación durante emergencias.

El caso de Alexandra Horler, quien recibió decenas de mensajes intimidantes y amenazas explícitas contra ella y su esposo, ilustra la magnitud del acoso. Situaciones similares vivieron Jessyca Lara y Marco Sifuentes, quienes, tras nombrar o cuestionar a Vidal en programas periodísticos, se convirtieron en blanco de campañas de difamación y hostigamiento masivo en múltiples redes.

Desde WhatsApp y Discord, seguidores
Desde WhatsApp y Discord, seguidores del alcalde despliegan campañas de acoso contra quienes cuestionan su poder, bajo la supervisión de funcionarios municipales. | Foto: IPYS

El objetivo de estos episodios no se limita a castigar al periodista atacado, sino a enviar un mensaje al resto del gremio: investigar o difundir información crítica sobre Vidal puede desencadenar represalias colectivas orquestadas desde los chats y grupos digitales que él promueve. La consecuencia inmediata, de acuerdo con IPYS, es la autocensura y un efecto de silenciamiento creciente dentro del periodismo local.

Vínculos y protección política

La red digital no opera de manera aislada. Distintos elementos revelados muestran la participación de funcionarios municipales y conexiones con líderes políticos de alcance nacional. Terry Minaya Torres, encargado de administrar uno de los grupos y beneficiario de tres contratos municipales por 12.800 soles, es solo un ejemplo de cómo los recursos públicos se entrelazan con la gestión de la comunidad virtual.

El alcance de estas relaciones se extiende al plano nacional. Franco Vidal ha mostrado públicamente afinidad y coordinación con Rafael López Aliaga, exalcalde de Lima y figura relevante en la actual campaña presidencial, y con la congresista Patricia Chirinos. La participación de Chirinos ha sido fundamental: facilitó la llegada de Vidal al Congreso como asesor y tiempo después encabezó el reconocimiento institucional de López Aliaga en actividades oficiales del distrito. El IPYS resalta que estas colaboraciones consolidan un esquema donde la defensa de la imagen pública se articula tanto en espacios digitales como en acciones oficiales.