El Arco del Puente del Rímac resistió más de dos siglos y fue destruido por un incendio durante la guerra con Chile

La estructura atrajo la atención pública a principios de 2025, cuando se llevó a cabo una excavación arqueológica cerca del Palacio de Gobierno con el fin de localizar algunos de sus pilares

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El Arco del Puente del Rímac. (YouTube Municipalidad de Lima)

En el corazón del Centro Histórico de Lima se erguía un arco que representaba mucho más que una simple estructura arquitectónica. Bajo su sombra, personas de diversas clases sociales cruzaban a diario, ajenas al trágico destino que el paso del tiempo depararía a esa construcción. Aquella formación curvada no cedería ante un temblor, como pensaban algunos transeúntes, sino ante las voraces llamas de un incendio.

Se trata del Arco del Puente, construido en el extremo sur del actual Puente de Piedra. Durante el mandato de Diego López de Zúñiga y Velasco, conde de Nieva y cuarto virrey del Perú (1561-1564), se levantó este arco, que funcionó como la entrada al barrio de “Bajo el Puente”, hoy conocido como el distrito del Rímac.

La estructura atrajo la atención pública a principios de 2025, cuando se llevó a cabo una excavación arqueológica cerca del Palacio de Gobierno con el fin de localizar algunos de sus pilares. Mientras arqueólogos y obreros trabajaban bajo tierra, varios curiosos se acercaron a leer un cartel de la Municipalidad de Lima que llevaba inscrito ‘El Arco del Puente’.

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Vista del jirón Trujillo, que originalmente se llamaba calle de la Bajada del Puente. (Eugène Courret)

“El arco de Lima fue un gran elemento ornamental ubicado al ingreso del Puente de Piedra. En realidad existieron varios a lo largo del tiempo adecuados a partir del estilo propio de la época. Hubo un renacentista asociado al primer Puente de Piedra en 1610, posteriormente modificado siguiendo un estilo barroco y cargado de elementos decorativos”, se lee.

Ahora bien, en cuanto a la construcción del Arco del Puente, Kristhian Ayala citó al investigador Tipian para indicar el año en que se inauguró, con ocasión de la reconstrucción del Puente de Piedra: “Fue el arco triunfal que se inauguró en 1611 a la entrada del puente. Este arco de ladrillo, de gran tamaño, fue también construido por el Maestro Juan del Corral”.

“Ostentaba en la hornacina, sobre la arca una imagen en bulto de Nuestra Señora de Belén, dando frente a la calle de Palacio, y ‘dos torrecillas de remate’ al Barrio de San Lázaro. En los muros lucianse [sic] inscripciones en latín relativas a la construcción del puente, con los nombres del Virrey, Comisarios y Maestro que intervinieron”, agrega. Es preciso señalar que parte de sus estructuras estaba hecha de madera.
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Antes del el gobierno del presidente José Balta, el Arco del Puente llevaba el rótulo "Dios y el rey". (camp.ucss.edu.pe)

Como dato complementario sobre la antigüedad del monumento, resulta pertinente mencionar lo que se señala en una de las páginas de El Pregonero, boletín del Programa Municipal para la Recuperación del Centro Histórico de Lima. “Prolima proyecta su restitución en el mismo lugar que ocupó durante tres siglos”, reza la página.

El arco más conocido del que tenemos registro, gracias a la fotografía de Eugène Courret, data de los inicios de la República del Perú. Esta estructura ya presentaba modificaciones, como el cambio en el rótulo, donde se sustituyó la inscripción “Dios y el rey” por “Dios y la patria”.

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El Arco del Puente se ubicaba en el extremo sur del hoy conocido Puente de Piedra. (Composición Infobae: D. J. Byron / Eugène Courret)

El incendio que destruyó el Arco del Puente durante la guerra del Pacífico

El domingo 13 de abril de 1879, en pleno contexto de la guerra del Pacífico, un incendio arrasó con el Arco del Puente, uno de los monumentos más antiguos y representativos de Lima. Aquella madrugada, alrededor de las dos, un horno de la pastelería de Antonio Alemani, ubicada junto al arco, desató las primeras llamas que pronto se desbordaron fuera de control.

El fuego avanzó con rapidez y, en menos de una hora, destruyó por completo la pastelería, las cigarrerías instaladas a ambos lados del monumento, el almacén del señor Gandolfo, la vivienda de las señoritas Hercelles y varios cuartos del callejón donde vivía el señor Gamboa.

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Así lucía el Arco del Puente tras el incendio de 1879. (Croquis de D. J. Byron publicado en la revista La Ilustración Española y Americana)

A pesar de la llegada de las bombas francesa e inglesa, los intentos por sofocar el siniestro fueron inútiles: no había agua en las acequias cercanas para combatir el avance de las llamas. Sin posibilidad de contener el incendio, el fuego terminó por envolver el Arco del Puente y reducirlo a escombros. Con su caída, Lima perdió una de las piezas más medulares de su memoria urbana.

Finalmente, en el boletín El Pregonero se menciona este trágico acontecimiento. “Como se recuerda, el incendio ocurrió en 1879, un momento en que tanto el interés nacional como los recursos económicos de la ciudad tenían como prioridad el inicio de la también denominada guerra del Salitre. Por lo tanto, la refacción del arco pasó a un segundo plano y pronto se olvidó”, se lee.

La reconstrucción del Arco del Puente

Prolima planea llevar a cabo un ambicioso proyecto para devolver al Rímac uno de sus monumentos más medulares: el Arco del Puente. La idea es reconstruirlo en el mismo lugar que ocupó durante tres siglos. El primer paso en este proceso ha consistido en crear una reproducción fidedigna de la estructura, con el fin de contar con una representación gráfica detallada que sirva como base para el plano arquitectónico de la futura obra.

Así se vería el Arco
Así se vería el Arco del Puente una vez reconstruido. (Municipalidad de Lima)

Para llevar a cabo esta reproducción, los especialistas de Prolima han revisado una gran cantidad de material gráfico y fotográfico. Esto les ha permitido determinar con precisión las dimensiones, proporciones y detalles del arco y sus partes.

Un elemento importante en este análisis fue una fotografía tomada por el fotógrafo francés Eugène Courret, en la que se ve a una persona de aproximadamente 1,60 metros de altura junto al arco. Esta imagen ha sido determinante para establecer las medidas exactas del monumento.

Gracias a este trabajo exhaustivo, los expertos han podido reconstruir de forma más exacta el Arco del Puente, conservando las características originales y asegurando que su restauración sea lo más fiel posible a su aspecto histórico. Este es solo el primer paso en la tarea de devolverle al Rímac una de sus grandes joyas arquitectónicas.

De acuerdo con la información publicada en El Pregonero de la Municipalidad de Lima, gracias a la fotografía de Courret, se ha logrado “calcular y determinar las escalas humanas y urbanas del entorno, así como las medidas del arco con mucha claridad”.

A través de las letras
A través de las letras caladas de la frase “Dios y la patria”, que forman parte de la sala de interpretación, se podrá contemplar la vista hacia Lima y el Rímac. (MML)

Así luciría por dentro el Arco del Puente

En el boletín El Pregonero se indica que el Arco del Puente tendría una sala de interpretación ubicada entre los campanarios de la parte alta, a la cual se podrá acceder mediante ascensor o por escaleras.

A través de las letras caladas de la frase “Dios y la patria”, que forman parte de la sala de interpretación, se podrá contemplar la calle.

El nuevo ambiente servirá para compartir el valor histórico del monumento y ofrecerá una vista privilegiada hacia Lima y el Rímac. Con esta iniciativa, se busca garantizar el uso colectivo del patrimonio, tanto en ámbitos educativos como culturales y recreativos.