Empezar a correr

Un gran número de personas de todas las edades comenzaron a correr gracias al Covid-19, y pareciera que la mayoría tiene intenciones de sostenerlo cuando todo este contexto dañino haya pasado. El poder de correr durante este tiempo se reveló con una investigación de Nielsen, oficial de investigación e inteligencia de World Athletics, que destaca cómo los corredores han aumentado su práctica (con o sin competencias) y los beneficios para la salud que les aporta.

En diez países encuestados, cuatro de cada diez personas se consideran corredores y el treinta por ciento de ellos corren al menos una vez a la semana. A diferencia de muchos otros deportes de participación, la carrera recreativa tiene una división de participación equitativa. De todos los corredores, el 53% son hombres y el 47% son mujeres. Más de una quinta parte de todos los corredores que ya corrían antes de la aparición del coronavirus revelan que ahora corren con más frecuencia que antes, y la mayoría de ese grupo afirma que continuarán corriendo con más frecuencia una vez que termine la pandemia.

En un marco mundial de restricciones y limitaciones para evitar contagios, correr resultó la salvación para muchos: el running no requiere instalaciones cerradas, contacto o cercanía física con otras personas, ni elementos sofisticados. Por esto, muchos deportistas privados de alguna práctica no permitida en las fases de mayores restricciones, se refugiaron en el running o el ciclismo para mantenerse activos y no perder tanta condición física. Incluso personas sedentarias que no realizaban ninguna actividad física comenzaron a hacerlo por el hecho de disponer de más tiempo libre. O simplemente porque comprobaron que el ejercicio resulta muy provechoso para despejar la mente y bajar el estrés.

Al preguntar a los corredores sobre los motivos para correr, prácticamente todos coinciden en lo mismo: “correr le hace bien al cuerpo, a la cabeza, y al espíritu”.

También se ha dado una situación muy particular en muchas personas que durante el confinamiento de tantas horas en casa, descubrieron propuestas de distintos entrenadores en las redes sociales. Muchos de ellos, coachs de running que adaptaron sus rutinas con ejercicios realizables en el hogar al prohibirse correr al aire libre. Pero una vez pasada la restricción, se ganaron el cariño y la confianza de sus alumnos virtuales que los siguieron en la modalidad presencial una vez restablecida en sus parques, pistas, o circuitos de siempre.

Con o sin alerta epidemiológica, el deporte y la actividad física son medidas para adoptar como estilo de vida para minimizar el riesgo de padecer enfermedades y alejar hábitos nocivos.

Suena esperanzador que tanta gente haya incluido algo saludable en una etapa de crisis para la salud global. Y que este hábito pueda mantenerse propiciando una mejor calidad de vida para la población.

Por Carolina Rossi, Entrenadora Nacional de Atletismo, Running Team Leader FILA Argentina, y corredora

carolinarossi.com.ar/ @carolinarossifilart

Fuentes: Prensa Maratón de Buenos Aires

Fotos: FotoRun para Asociación Ñandú