Los millones de Amazon: cuánto dinero tendrías hoy si hubieras invertido USD 1.000 en el gigante de Jeff Bezos el día que debutó en Wall Street

La mayor compañía de e-commerce del mundo salió a la bolsa en mayo de 1997. Por aquel entonces, ni los más optimistas podían prever que su capitalización bursátil llegaría a USD 1,8 billones

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Amazon es la compañía líder mundial en comercio electrónico.
Amazon es la compañía líder mundial en comercio electrónico.

Jeff Bezos, el hombre más rico del mundo –con un patrimonio personal de más de USD 210.000 millones–, emprende una nueva etapa en su historia y también, claro, lo será para su compañía, Amazón, la librería en línea que nació casi con Internet y que se convirtió en el mayor gigante global de e-commerce y en una de las marcas más valoradas del planeta.

A los 57 años, el empresario dejó su cargo de director general en manos de Andy Jassy. Se dedicará a otros proyectos, comenzando por un viaje al espacio el 20 de julio. Eso sí, mantendrá un rol clave en la empresa que fundó hace 27 años como presidente ejecutivo de su consejo de administración.

Amazon no solo fue un éxito corporativo que revolucionó el comercio minorista a escala global, también fue una excelente apuesta para los inversores.

Quien hubiera invertido USD 1.000 en la acción de Amazon el día en que salió a cotizar en Wall Street, el 15 de mayo de 1997, hoy tendría USD 2.340.653, lo que implica una ganancia de 234.000 por ciento en 24 años, de punta a punta, y un tasa de crecimiento anual compuesto (CAGR o Compound annual growth rate, en inglés), de un increíble 38 por ciento

infografia

“El 5 de julio de 1994 Jeff Bezos creaba una empresa llamada Cadabra, una librería online. Rápidamente rebautizada como Amazon, en honor al río Amazonas, la empresa vendió su primer libro un año después y salió a bolsa en mayo de 1997. Por aquel entonces, ni siquiera los más optimistas podían prever en qué se convertiría Amazon: en una de las mayores y más influyentes compañías del mundo”, detalló un informe de Statisa.

Hoy, las acciones de la empresa operan a USD 3.662, elevando su capitalización bursátil a 1,8 billones de dólares.

“Además de la subida del precio de las acciones de 18 a 3.600 dólares, el enorme rendimiento puede atribuirse a tres desdoblamientos de acciones, que convirtieron una acción comprada en 1997 en doce acciones a finales de 1999″, subrayó Statisa.

Amazon no solo fue un éxito corporativo que revolucionó el comercio minorista a escala global, también fue una excelente apuesta para los inversores

Si bien ha sido celebrada por las múltiples innovaciones que cambiaron completamente sectores económicos enteros, Amazon también ha sido vilipendiada por ciertas prácticas comerciales con tendencia a deshacerse de la competencia o por el tratamiento de los asalariados.

Se trate de venta de libros, de informática o de entregas a domicilio, “Bezos es un líder que promueve el cambio”, afirmó a AFP Darrell West, del centro de innovación tecnológica de Brookings Institution. ”Ha impulsado numerosos servicios que la gente tiene ya incorporados, como hacer compras en línea, pedir cualquier cosa y que se la entreguen al día siguiente”, destacó.

Jeff Bezos, presidente ejecutivo de su consejo de administración de Amazon.
Jeff Bezos, presidente ejecutivo de su consejo de administración de Amazon.

Lanzada desde el garaje de Bezos, Amazon tiene hoy un valor de más de 1,8 billones de dólares en Bolsa y sus ingresos fueron de USD 386.000 millones en 2020. Es un grupo tentacular, que va del comercio en línea a la informática en la nube, pasando por la inteligencia artificial y la producción de películas.

Un emprendedor con instinto

Bezos “tiene el instinto para dar con aquello que va a funcionar”, explicó a AFP Roger Kay, analista de Endpoint Technologies Associates. La empresa ha superado a sus rivales al decidir durante los primeros años “reinvertir todas las ganancias en su crecimiento”, recuerda Kay. Una estrategia que puede haber dejado perplejos a los inversores pero que ahora “parece completamente lógica”, destacó.

Para Bob O’Donnell, de Technalysis Research, Bezos “no fue el primero o el único” en la ola del comercio en línea “pero lo comprendió y ha trabajado para mejorarlo”. El jefe de Amazon principalmente ha “comprendido la necesidad de construir las infraestructuras”, con su vasta red de camiones, depósitos o aviones, destaca O’Donnell. “Muchas otras empresas no se dedicaron a invertir dinero en ese trabajo ingrato tras bastidores”, argumentó

También hizo suya la suerte de su empresa: incluso tras haber cedido a su ex esposa una parte de sus acciones en Amazon tras su divorcio, Bezos tiene actualmente unos USD 200.000 millones, según la revista Forbes.

Deja la gestión diaria de su empresa para pasar más tiempo dedicado a sus otros proyectos, como la sociedad Blue Origin -que hará su primer vuelo de turismo espacial el 20 de julio con Bezos a bordo. El hombre de negocios también es dueño del diario Washington Post y ha dicho que quiere dedicar tiempo y dinero a la lucha contra el cambio climático.

El mejor empleador de la Tierra

Bezos se va en un momento en que Amazon, que emplea a más de 800.000 personas en Estados Unidos tras haber visto a su actividad despegar aún más durante la pandemia, enfrenta numerosas críticas de parte de los defensores de los trabajadores y los reguladores.

Amazon destaca que ofrece un salario mínimo de 15 dólares la hora y otras ventajas, pero los críticos denuncian regularmente la obsesión con la eficacia aún a riesgo de tratar a los trabajadores como máquinas.

Tras un resonante divorcio, Bezos conserva actualmente unos USD 200.000 millones en acciones de Amazon

En su última carta anual a los accionistas en abril, y tras conocerse un intento de sindicalización en un depósito del grupo en Alabama, Bezos reconoció que la empresa debía mejorar para sus empleados y prometió que Amazon se convertiría en “el mejor empleador de la Tierra”.

Pero inquietos por la influencia creciente de los gigantes de la tecnología en sectores enormes de la economía, los entes reguladores estudian medidas que podrían llevar a desmantelar parcialmente Amazon.

Amazon podría entonces convertirse en “víctima de su propio éxito”, dice Kay. Pero aún si el grupo debe dividirse en varias entidades, cada una de ellas “prosperaría en su propio mercado”, predice. “Puedo imaginar fácilmente un escenario en el que la suma de esas entidades se muestre superior al conjunto unificado”.

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