Al trance de lento avance del precio del dólar oficial mayorista en la Argentina contribuyó en las últimas tres semanas la apreciación del real en Brasil, que revirtió en forma parcial el desplome experimentado hasta mediados de mayo. En el país vecino la divisa llegó a negociarse por debajo de los 5 reales, después de haber llegado a superar los 5,90 reales el 14 de mayo último.
La divisa de EEUU había alcanzado un récord intradiario de 5,96 reales 20 días atrás, lo que representa un descenso de 16,6%. O, lo que es lo mismo: una apreciación del real del 19,9% desde mediados de mayo, que mejora en una proporción similar la competitividad cambiaria de la Argentina respecto de su principal socio comercial.
De todos modos, hay que recordar que el tipo de cambio en Brasil mantiene una fuerte apreciación de 24% en 2020, desde los 4,02 reales del cierre del 2019, con la inflación casi nula, la más baja en 21 años. De hecho, abril registró una deflación de 0,31%, algo que no visto desde agosto de 1998 en el vecino país.
Lorenzo Sigaut Gravina, director de Ecolatina, destacó: “el impacto económico del coronavirus en Brasil ha sido devastador. Además de la crisis sanitaria y las crecientes tensiones políticas, el consenso de mercado espera que la economía sufra una caída superior al 6% con un real brasileño cerrando 2020 en 5,4 unidades por dólar y en 5,1 en 2021”.
La inflación anual en Brasil se desaceleró a 2,4% en abril, un fuerte descenso respecto al 3,3% de marzo. También fue la lectura menor desde febrero de 1999. “La baja inflación subyacente y de servicios debería dar tranquilidad al Banco Central en el corto plazo”, describió en un reporte Alberto Ramos, jefe de investigación en América Latina de Goldman Sachs.
Cabe señalar la influencia que suele tener la evolución del tipo de cambio en el país vecino en el plano local, habida cuenta de la fluida relación comercial entre ambos países. Aunque en 2020 hay una divergencia entre el avance del dólar mayorista en la Argentina (15,2%, con una inflación similar) respecto de Brasil (24%, casi sin inflación), el reciente descenso desde valores récord en el mayor socio en el Mercosur se dio en simultáneo con el retroceso de las paridades bursátiles y de la cotización del blue en pesos.
Frágil balance comercial
En mayo, la economía argentina siguió derrumbándose y el intercambio con Brasil no fue la excepción: el flujo de comercio bilateral se desplomó un 56% interanual, producto de una caída de ese porcentaje tanto para las exportaciones como para las importaciones.
En el pico del colapso económico por el aislamiento que provocó la COVID-19 la suma de exportaciones e importaciones entre la Argentina y Brasil totalizó en mayo USD 846 millones, “fue 55,6% inferior al valor obtenido el año anterior -cuando alcanzó USD 1.905 millones-, acumulando 21 meses consecutivos de bajas interanuales”, destacó un informe de la Cámara Argentina de Comercio.
“Como resultado, las ventas al país vecino perforaron los USD 400 millones, registrando el menor valor para un mes desde abril de 2004. Lamentablemente, la brusca caída no fue solo consecuencia del mal desempeño de la economía brasileña: el resto de sus importaciones cayó ‘solo’ 7,7% interanual, de modo que nuestra performance fue peor al promedio y nuestra participación en dicho mercado se redujo a la mitad, pasando de 6% en mayo de 2019 a 3% en 2020. Por su parte, las compras argentinas al gigante sudamericano rondaron los USD 450 millones, arrojando también el menor valor para un mes desde enero 2004”, refirió un informe de Ecolatina.
Aunque ambos países atraviesan una recesión y el comercio bilateral se desplomó un 30% interanual, la reciente apreciación del real puede ayudar al ingreso de divisa a la Argentina, luego de que el saldo favorable para la Argentina retrocediera en el período enero-mayo de los USD 210 millones en 2019 a USD 80 millones en 2020.
“Ante el avance de la pandemia, estimamos ahora una disminución del 29% en el intercambio comercial para 2020 entre Argentina y Brasil a USD 14.592 millones, lo que implicaría una retracción a niveles inferiores a los de 2005”, señaló un análisis de la consultora Abeceb.com.
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